Pesadillas Reales La Maldición.

Capítulo 20: Te creerá loca...

Había regresado a casa y mis padres todavía no me dejaban de interrogar acerca de mi desaparición o escape, aunque ya les había explicado cien veces las mismas cosas. Otro era por no avisar al menos de lo que pasaba y también seguían molestos por haberme ido con James, y sin avisar por igual.

En fin, yo había regresado con James, y Sam; pero nadie sabía sobre él. A mi padre le daría un infarto si supiera de Sam y nuestra relación, aunque tarde o temprano tendrá que saberlo. No siempre iba a ser un secreto, Sam y yo habíamos acordado de hacer pública nuestra relación. También había otro problema, en el lado del mundo Oscuro, Krista. James me había explicado que había modificado la memoria a todos los habitantes de Alsthom, excepto a mis padres; pero pronto se darán cuenta de que algo pasó o que alguien faltaba, y ese alguien era la zorra de Krista Black. Debí matarla cuando pude.

Estaban las otras zorras de sus seguidoras y pronto empezarán a sospechar, más cuando sepan de la relación entre Sam y yo. Sobre lo demás no habrá problemas, todos los profesores Oscuros sobrevivieron a la pelea, Mike, James y Sam por igual. Solo lo que arruinaba era Krista. ¿Y si le pidiera a James que todos se olvidaran de Krista? ¿Cómo si nunca hubiera existido? Además ¿quién la quería? Todos la odiaban y un mundo sin ella, era un mundo mejor.

Eso lo iba a pensar al siguiente día, ahora quería descansar. Al fin descansar de todo, al fin sentirse bien nuevamente después de todo este tiempo, después de dos largos e infinitos años de tortura. Al fin, estaré en paz. Conmigo misma y con el mundo…con los dos mundos. Tal vez no tenga una vida normal como la que esperaba, pero tendré una mejor vida junto a Sam y a los que más quería. Por más que me convirtiera en una Oscura, y sé que será difícil controlarme, sé que cambiaré…para bien o para mal. Y también sabía que no estaré nunca sola y que Sam y James me acompañarán por siempre, nunca me dejarán sola y yo nunca los iba a dejar. Ellos eran todo para mí.

Tranquilamente subí hacia mi habitación y al entrar me desvestí y me acosté en la cama feliz, como extrañé esta cama, como lo extrañé a todo. Suspiré de alivio, esta noche era la noche en que no tendré pesadillas, a partir de esta noche no tendré más pesadillas; nunca más. 

Pasaron los minutos y el sueño aún no llegaba porque me faltaba algo especial, Sam. Cuando escuché que la ventana del balcón se abría, supe que él había llegado, pero me hice la dormida para ver qué hacía. Escuchaba sus pasos pesados mientras se acercaba a la cama y como hundía el colchón al acostarse a mi lado, luego pasó un brazo alrededor de mi cintura y me dio un beso en el cuello. Esperaba que Sammy se comportara esta noche. 

- Nut ¿estás dormida? –preguntó en voz baja. No le contesté- ¿Nutty? 

- ¿Ahora me llamas Nutty? –pregunté con una risa baja.

- Ja ja ja, no. Era para saber si decías algo, ya sabía que te hacías la dormida. Eres muy mala para fingir –comentó. Giré en sus brazos para mirarlo.

- Tonto –repuse besándolo- le dije la verdad a mis padres –confesé seria- excepto lo de tu familia y obviamente tú. Saben lo que son los Oscuros, pero no saben que eres un Oscuro.

- ¿Saben lo de James?

- Sí.

- Bien, fingiré que no –comentó algo fastidiado.

- ¿Qué, te molesta?

- Por supuesto –respondió en un susurro- soy tu novio… ¿al menos le dijiste que sales conmigo?

- Umm. No –contesté. Sam suspiró molesto.

- Bien, no importa ¿sí? Solo quiero dormir contigo.

- De acuerdo, Sam. Algún día se los diré.

- Ok. Mañana tenemos clases –comentó.

- ¿En serio?