Desnudo

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Narrador Colette

—Gracias por ayudarme con ese problema Adrián pero yo hablaré con mamá, no dejaré que pase lo mismo que pasó con Peter —Le hablé pero el solo se mantenía serio. —¿Qué pasa? ¿Te asustó mucho mi madre?

—No, es que ... —Hizo una pausa —Yo si quiero intentarlo Colette.

>>¿Qué?, ¿Acaso era una broma?<<

—Pero si quedamos en otra cosa Adrián, ¿De qué hablas? —Hable rápido

—Esa noche en la que me ayudaste me di cuenta que no eres una chica común y aunque existan un millón más, no hay ninguna como tú, eres especial —Adrian trato de acercarse.

Conocía esa mirada por qué es la que tenía Enzo noches atrás y me comenzaba asustar.

—No, no es así —Me aleje —Te estás confundiendo, yo no puedo.

—No te pido que te enamores de mi en este momento, solo te pido tiempo para tener la oportunidad de enamorarte.

—Es que eso no puede ser Adrián por qué a mí el que me interesa es —Hice una pausa y sin temor lance la respuesta —Enzo y lo voy a intentar con el.

—¿Qué?, ¿Enzo? Pero si el es un don nadie, el dinero que tiene es gracias a sus padres —Me miro incrédulo como si hubiese Sido una broma pero no era así —El es un problema, estuvo en rehabilitación durante un año.

Esa parte no la sabía pero con el tiempo iría descubriendo su historia.

—Tambien mi dinero es gracias a mis padres y bueno si ya salió de rehabilitación es buena señal—Le contesté restándole importancia

—Eres inteligente y te darás cuenta que el que te conviene soy yo por qué no podrás con todos los problemas que Enzo carga.

Esa parte me asustó, ¿Cuántos problemas podría traer Enzo?

—Pues ya lo veremos, no lo voy a dejar —Asegure sin mostrar ninguna inseguridad.

—Te voy a enamorar Colette y no por apuesta o por aburrimiento, sino por amor—Me beso en la mejilla —Dile a Enzo que prepare su mejor armamento por qué esta guerra no va a ser sencilla.

Se alejo y subió a su auto para después perderse en la carretera.

>>Estoy salada<<

Esa noche me pareció eterna ya que no pude dormir casi nada, finalmente me levanté de la cama y me fui a la cocina para empezar con un día productivo.

Escuché ruido en la cocina y me preguntaba, ¿Quien podría ser? Por qué Celine no se levanta a esta hora y menos Camile y mamá no estaba por qué salía desde temprano a trabajar.

Me asome y distinguí un cuerpo alto, fuerte y moreno, cubierto de tatuajes.

—Buenos días Colette, ¿Quieres hot cakes? —Hablo sonriente, mientras batía la mezcla.

>>¡Está desnudo!<<

Enseguida tape mi vista

—No, no gracias Dan —conteste con nervios y enseguida me di la vuelta y subí al cuarto de Camile.

Toque varias veces hasta que salió adormilada.

—¿Qué pasa? —Termino de hablar con un bostezo.

—¿Cómo, que qué pasa? Hay un hombre desnudo abajo, ¡Desnudo! —Hable bajo para no despertar a los gemelos.

—¿Sigue aquí? —Camile hablo totalmente asombrada.

Distintas pero igualesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora