Primer amor

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Narrador Colette

Ya había pasado una semana de la muerte de Belmont y las cosas cada vez se ponían más tristes.

Camile se encontraba recogiendo sus cosas porque ya se tenía que ir, lo hacía con calma y en silencio, por otro lado, estaba Celine la cuál igual guardaba sus cosas con lágrimas en las ojos.

—Nozomi, ¿Quieres una galleta de coco?—Trate de animarlo.

El se mantuvo en silencio.

—O mejor una de chocolate, no tiene porqué enterarse Camile— Insistí

El negó.

—Te daré un poco de dinero si hablamos un ratito— Le extendí un billete.

—No quiero.

Pensé—¿Quieres ver a Enzo?

—Si —Me miro con sus ojitos tristes—¿Me llevas?

Asentí— Vámonos

—Espera—Se echo a correr a su ex habitación y llegó con una chaqueta de cuero.

—¿Quieres verte como un chico malo? —Le sonreí.

—No, era de Belmont—Agacho su cabeza—Ya no la va a necesitar y la voy a devolver.

—No necesitas hacer eso, puedes usarla tú—Lo anime —Como un recuerdo.

—Es que...—Abrazo la chaqueta—Yo creo que Belmont se enojaria conmigo si la uso.

—Nada de eso—Me senté a su lado —Mejor vamos por un helado, ¿Vale?

—Si, pero con Enzo.

—Claro.

No quería ver a Enzo ni a Adrián pero si eso animaba a Nozomi podía pasar una eternidad con ellos.

Llegamos a la plaza y ahí estaba sentado Enzo, en cuanto nos vio corrió y abrazo a Nozomi.

—¿Cómo estás pequeño? —Le sonrió.

—Pues triste —Me miro de reojo —Pero mi tía quiere que esté más feliz por eso venimos.

—¿De qué quieres tu helado? —Lo sorprendí

—De limón pero, ¿puedo ir a la fuente de los deseos? —Le asentí y corrió hasta ella.

—Gracias por dejarme verlo una última vez—Se sento a mi lado en una banca.

—Camile me lo pidió y yo solo accedi por él—Señale a Nozomi —Se que te quiere.

—Si pero más a Adrián, ¿No?.

>>Seguimos hablando de Nozomi, ¿Cierto?<<

—No lo se, tal vez solo le agrada por su dinero—Observe que Nozomi, aventaba dinero a la fuente —Me preocupa que sea tan interesado.

—Se le va a pasar —Le resto importancia—¿Te quedarás?

—No lo se —Lo mire —Celine me ofreció pagarme el colegio en Francia pero aún no se si irme.

Distintas pero igualesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora