A cada bandido hay un soldado

(Bandos opuestos)

- ¿Estás segura de que es una buena idea? Sabes que él es un criminal, y no cualquiera, sino el más peligroso de toda Sadala.

Caulifla se encontraba regresando a su hogar, ella lo consideraba demasiado lujoso para que viviera sola así que optó por compartirlo con uno de los mejores amigos que hizo luego de la partida de Kyabe, el nombre del joven era Asparán.

- Lo sé... Pero es el único en todo el planeta con el que podré volverme más fuerte. Además, si él entrenó aprovechándose de la persecución del ejército yo puedo aprovechar que él es lo suficientemente poderoso para entrenar y mantener a sus secuaces a raya.

El otro saiyajin era un soldado bastante sobresaliente gracias a sus estrategias, por lo que Caulifla siempre lo reconoció como un igual pese a que él aún no ascendía a capitán segundo siquiera.

- Hmmmm... Pero él también se volverá mucho más fuerte, y si lo hace será incluso más incontrolable que antes Caulifla.

- Tienes razón... Pero si dejo que se haga fuerte por su cuenta el resultado será el mismo con la única diferencia de que yo no voy a tener oportunidad contra él.

- Si tú lo dices...

Ambos uniformados llegaron al enorme departamento, al llegar ambos se fueron a cambiar y se sentaron a la mesa para cenar.

- ¿Y cómo estuvo el torneo? No me has contado nada de ese, algo raro considerando lo emocionada que te veías con el anterior ¿Pasó algo malo?

La mayor se empezó a atragantar con su comida, una vez terminó de toser con violencia ella aclaró su garganta completamente nerviosa.

- ¿E-el torneo?

Una ola de recuerdos inundó la mente de Caulifla, no dijo una sola palabra en un buen tiempo, preocupando a su amigo.

- ¿Caulifla?

- Nos eliminaron.

- ¿¡Q-qué!? ¿Entonces cómo-?

- Fue el universo 7 el que nos revivió.

Caulifla bajó la mirada con cierta vergüenza, se sentía como alguien débil e inútil, un lagarto afeminado le dio la paliza de su vida a ella y a Kyabe, de no haber sido por la intervención de Kale probablemente hubieran sido eliminados luego de que los orillaran al borde de la muerte.

- Ya veo...

- Me siento tan débil, fuimos apaleados por un idiota que se parece a Frost ¡Ni siquiera pude ayudar a Kyabe! ¡Sólo fui otro maldito saco de boxeo para ese imbécil!

- ¡Caulifla cálmate! Ya pasó, nosotros estamos vivos y teniendo esta conversación... No es necesario que te alteres.

- ¡Ya lo sé es sólo que-! Ugh, no puedo creer que haya desperdiciado tanto mi vida al no entrenar, ahora ya hay muchos sujetos que me superan y eso no es lo peor del caso ¡Uno de ellos es Kyabe! ¿¡Cómo me veré ante su majestad cuando ese criminal se apodere de Sadala!?

- ¡Tranquila! Mira, he visto que él no se ha apoderado de Sadala aunque ya tenga la capacidad, probablemente sus intenciones sólo son proteger a los de las zonas marginadas y ya.

Eso relajó un poco a la chica, que suspiró pesadamente.

- Rogaré porque estés en lo correcto Asparán.

- Sí Caulifla.

(...)

- ¿¡QUÉÉÉ!?

Todos los secuaces del chico se veían bastante sorprendidos y anonadados ante la noticia que recibieron, pero el líder intentó calmarles.

- Justo como lo oyeron, pero si estamos aquí teniendo esta conversación es gracias a la misericordia del universo 7.

- ¿Universo 7?

- Sí chicos, el premio aparte de la supervivencia era un deseo de las super esferas del dragón, unas esferas que cumplen cualquier deseo. Un miembro del equipo del séptimo universo pidió que nos resucitaran.

- Impresionante.

- Esos tipos han de haber sido bastante fuertes.

- Nunca creí que hubiera algo así allá afuera.

- Joven Kyabe ¿Entonces quién derrotó al equipo de nuestro universo?

Un incómodo silencio se hizo presente en el ambiente, el joven de traje azul marino bajó la mirada recordando lo ocurrido, por lo que Kale dio un paso al frente y aclaró la garganta.

- El universo 7 eliminó a varios miembros de nuestro equipo, sí, pero fue mi culpa que nos eliminaran. Yo saqué de la plataforma a varios de nuestros aliados, no tenía control de mi propio poder ¿Vieron esa transformación de la soldado?

El resto asintió levemente.

- Pues yo me transformé en el torneo, pero mi forma era inestable, no tenía control sobre mí en lo absoluto, esa soldado se sacrificó para que Kyabe y yo pudiéramos fusionarnos y evitar mi muerte... Pero ya era tarde, la fusión fue eliminada por un saiyajin del séptimo universo en un doble K.O.

La morena sentía vergüenza de sí misma, pero, contrario a lo que ella se esperaba, todos la miraban de forma compasiva.

- Kale eso no fue tu culpa, no sabías que al transformarte perderías el control.

- Kyabe tiene razón, eso no fue culpa tuya.

La morena sonrió levemente, aunque ella hubiera sido responsable del destino de su universo nadie realmente le echaba la culpa, eso era un tanto lindo.

- Bien, antes de terminar la reunión voy a decirles lo que haremos mañana: El grupo 2 va a patrullar el pueblo en busca de soldados, los grupos 3 y 4 van a patrullar los límites de nuestro territorio y el grupo 1 se quedará conmigo ¿Está claro?

- ¡Sí Kyabe!

- Todos vayan a dormir que mañana los voy a despertar a primera hora.

Todos los demás se fueron del sitio en dirección a sus casas, dejando solos a Kale y a Kyabe.

- Hermano...

- ¿Qué sucede Kale?

- ¿Por qué me defiendes tanto? Tú viste lo que sucedió conmigo en el torneo...

- Como se lo dije al resto, tú no sabías que eras la super saiyajin de la leyenda, no puedo culparte de algo que nadie sabía.

- Si tú lo dices.

Dijo tímidamente la chica.

- Vamos, no te pongas así Kale... Como mi segunda al mando te reconozco como alguien muy fuerte, yo creo en ti.

- Pero hermano, alguien como yo nunca sería tan fuerte como t-

- Ni una palabra más Kale, vamos a acostarnos que estoy exhausto.

La chica de coleta suspiró resignada.

- Sí hermano, yo también estoy cansada.

Kyabe revolvió los cabellos de la chica con una sonrisa.

- Nunca dejas de sorprenderme, y las sorpresas que tú me das siempre son agradables, de eso no hay duda.
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