LIE TO ME ☆ JIKOOK

Capítulo 13 - 불안

Jimin estuvo más que ocupado la semana siguiente. El sábado lo pasó fuera con Hoseok y el domingo estaba demasiado resacoso como para poder avanzar con la materia de la universidad. Se había levantado con un dolor de cabeza horrible y una rara sensación en el cuerpo. 

Estaba claro que no podía beber soju de aquella manera. Tendría que buscarse otra clase de alcohol porque aquella siempre acababa causándole estragos. Apenas recordaba nada de la noche anterior. Débilmente podía acordarse de sus amigos y él yendo al club, y de Jungkook y él discutiendo en su pasillo. 

Pero aquello deberían ser alucinaciones o alguna clase de sueño extraño que no podía diferenciar de la realidad. Era imposible que se hubiese encontrado con su vecino casualmente al salir del ascensor a las altas horas de la madrugada a las que imaginaba que habría llegado.

Algo repiqueteaba en su mente, pero no podía averiguar que era. No le dio mayor importancia aquel día. Ya le refrescarían la memoria sus amigos en cuanto los viese.

Ni siquiera tuvo tiempo de pasar por la universidad aquella semana. Tenía un par de proyectos acumulados y un examen de una asignatura que odiaba con todo su corazón. Ir a clase no era compatible con el horario de estudios que se había propuesto. Era la última semana antes de navidad y no quería tener que estudiar nada durante las vacaciones.

Hoseok se pasó un par de veces por su casa así como lo hizo Felix. Se intercambiaban algunos apuntes y bebían un par de cervezas mientras disfrutaban del ajetreado Seúl por la ventana del rascacielos. Su padre estaba demasiado ocupado organizando su viaje de navidad como para salir de su piso y ver como los compañeros de su hijo vaciaban su nevera de tanto visitarlo.

Alexa también hizo alguna que otra aparición aquellos días, sobre todo para poder echarle un cable al menor con una asignatura que ella ya había pasado hace un par de años. Lo que fuese por su pequeño rubio. Le veía demasiado nervioso y estresado. Estaba claro que necesitaba un poco de relax.

- Jimin.

- Qué. - Respondió el joven con pocas ganas mordiendo su bolígrafo y con la mirada clavada en sus apuntes.

- Vamos a dejarlo por hoy, ¿te parece?

El menor le miró como si acabase de decir la locura más descabellada del mundo.

- ¿Estás loca?

- Apenas quedan dos días Ale, dos días. - Golpeó la mesa de una de las salas de reuniones de su padre en la que se encontraban.

- Lo sé, pero estas saturadísimo vamos a-

- No vamos a hacer nada, vamos a quedarnos aquí estudiando hasta que acabemos con los principios de la estadística del siglo XX.

- Mañana podemos seguir, te prometo que vuelvo si lo necesitas pero-

- No, no, no, no. - Jimin repetía una y otra vez frustrado mirando a su papel tratando de asimilar aquella información.

- Jimin, por favor hazme caso también necesitas descansar, y-

- Que no. - Repitió mientras sus ojos se llenaban de lágrimas y hundía su cabeza entre los brazos y la madera de la enorme mesa.

- Principito...

Alexa se fue a acercar a él pero Jimin se levantó frustrado de su asiento y comenzó a andar hacia la puerta. Lo último que necesitaba ahora era hablar. Se sentía inútil y no quería que su padre volviese a decirle lo decepcionado que estaba de él. 

Solo quería que todo aquello acabase ya. La presión le estaba doblegando.

La joven resopló compasiva por su amigo entendiendo muy bien cómo se sentía. Los exámenes le volvían aún más sensible de lo que ya era. Se levantó tras él y anduvo a sus espaldas mientras subía las escaleras dirigiéndose a su cuarto. Necesitaba ponerse unos cascos y escuchar sus canciones para poder calmar un poco su ansiedad. Nunca conseguía detenerla del todo pero al menos reducía la intensidad con la que le atacaba aquella patología con la que llevaba viviendo varios años.