Short-Stories

• Navidad • (2°)

--Yo soy...m-me gustan los chicos-- su mirada iba a todos lados, menos a los ojos furiosos de su madre.

--¿Que dijiste?-- la mujer se levantó de su silla, casi dejándola caer hacia atrás, Leonardo se levantó a los segundos y llevó su mano a la espalda baja de la mujer.

Christopher suspiró, levantándose también de su asiento para quedar frente a frente con su madre.

--Dije que soy gay, q-que me gust-- su rostro se giró por el fuerte golpe que propinó la mujer en su mejilla derecha, y si su padre no hubiese sostenido las dos manos de ella otros golpes le hubiesen llegado.

--¿¡Como mierda es eso de que eres maricón!? ¡Eres un Vélez y ningún hombre de esta familia es así! Espero que sea una broma de muy mal gusto, Christopher-- la mujer bramó en su rostro, sus ojos demostraban el enojo que sentía.

"Tranquilo amor, todo saldrá bien" las dulces palabras de Erick resonaron en su cabeza, y su chico no pudo haber estado más equivocado. Pero tomó valor de algún lado, y habló tranquilamente.

--No es una broma, y espero que no te moleste que vaya a pasar la Navidad con mi novio, ya que por lo que veo no te agradó en nada lo que te acabo de decir-- la mujer forcejeó con su marido para soltarse y poder golpear a su hijo, estaba llega de rabia y asco.

--No pienses que saldrás de esta casa para revolcarte con un maricón Christopher Vélez, y si lo haces te olvidas de que tienes madre--.

--Yenny basta, Christopher es libre de salir y estar con quién quiera-- Leonardo no podía creer en lo que escuchaba ¿desde cuando su dulce y tierna mujer era tan homofóbica? Y eso no era lo peor, si no que lo que más le dolía era en como trataba a su propio hijo.

--¿Tú sabías?-- le preguntó incrédula.

--Si, lo sabía--.

--¿¡Y por qué mierda no me dijiste!?-- esta vez forcejeó pero para golpear a su esposo.

--Porque Christopher tenía que decirte, y no esperábamos que reaccionaras así. No te reconozco Yenny--.

--No me interesa, ahora mismo agendarás una hora en el psicologo para Christopher-- ella suspiró, soltándose del agarre de su esposo, que está vez si la soltó para salir de ahí y dejarlos solos.

Christopher que hasta el momento había guardado silencio, la miró sin poder creerlo.

--¿Quieres que vaya al psicólogo?--.

--Claro que sí-- se acercó al castaño y descansó su mano en la mejilla golpeada de éste. --Te ayudaré a ser normal nuevamente, y disculpa por el golpe--.

Christopher se separó con brusquedad de su madre, alejando la mano de su mejilla.

--Soy normal y siempre lo eh sido. Tú eres la que está enferma-- Yenny abrió su boca con indignación, y a los segundos Leonardo bajó con una mochila y se la entregó a su hijo.

--No te estoy echando de casa. Puedes volver cuando quieras, las puertas de este casa siempre estarán abierta para ti. Ahora anda y busca a tu chico, disfruta mucho este tiempo junto a él y dile que lo quiero conocer cuanto antes. Ahora vete, yo me encargo--.

Christopher tenía ganas de llorar, sinceramente el creía que su padre iba a ser el que no lo aceptaría y que su madre sí, pero fue todo lo contrario.

Su madre dijo algo, pero ignoró todo y salió de casa.

...

Los dos jóvenes se encontraban en el cuarto del más pequeño, le estaba contando lo que había sucedido con su madre.

--lo siento tanto-- murmuró el ojiverde, abrazando a Christopher y besando todo su rostro.

--Nunca pensé que iba a reaccionar así, no la reconozco-- el mayor se permitió llorar entre los brazos de Erick, quien lo abrazaba con fuerza, intentado darle todo el apoyo que podía.

--Hay que entenderla mi amor, en sus tiempos ser gay no era como ahora. La gente mayor piensa que ahora todos son gays y que antes no, pero era por que antes había mucho más miedo. No estés enojado con ella, lo aceptará tarde o temprano-- paseaba su mano de arriba hacia abajo, dándole de la fuerza que no tenía, haría todo por verlo feliz.

--Gracias mi amor, pero no creo que lo haga--.

--Lo hará, porque te ama, porque eres su hijo y no te dejará-- Beso su cabello, trepándose en su regazo quedando cara a cara.

Christopher sonrió, pensando en que sin Erick, no sería absolutamente nada en esta vida, estaría solo intentando luchar contra sus demonios.

--Te amo-- musitó, besando sus regordetes labios y apretando su cintura. Erick sonrió sobre sus labios, pegándose lo más posible a él, dejando que haga lo que se le dé la gana con su boca y su cuerpo.

--Yo te amo más-- respondió, metiendo sus manos por debajo de la camisa, no de una forma sexual, si no más bien como una caricia para reconfortarlo.

--Tengo tanto miedo Erick...tanto-- susurró.

--¿Por qué, mi amor?-- sacó su camisa, bajando sus labios hasta el pálido cuello.

--Tengo miedo de que algún día te vayas, que me dejes-- Erick se apartó sonriendo, tomando las mejillas de su novio para mirarlo a los ojos.

--Mi amor por ti es infinito, Christopher. Jamás dejaré de amarte, ni si quiera lo pienses-- beso la punta de su nariz para luego juntarla con la suya y darle un beso esquimal.

--Juramelo, Erick--.

--Lo juro, mi amor--.

--No sé que haré contigo, siento tantas cosas por ti...-- Dio una larga caricia, desde su cadera hasta su hombro, mirando con adoración esa piel de color dorado.

--Dame todo tu amor, lo quiero todo-- susurró, besando sus labios con desesperación.

--No podré erick.-- negó, mordiendo el labio inferior de su novio.

--¿Por qué no?--.

--Porque esta vida no es lo suficientemente larga para hacerlo--.

--Entonces búscame en la otra, juro que esperaré por ti en cada una de ellas--. Se meció en su regazo, enterrando sus uñas en los hombros del castaño.

--Te buscaré, juro que te buscaré en todas, y te demostraré todo lo que siento por ti-- y cerraron la promesa con un beso, uno que se grabó en sus almas y corazones, que duró toda la eternidad.

Este es el fin, espero que hayan disfrutado mucho y gracias por todos sus comentarios bonitos, les amooo✨💕

Biankiita💫🤙