Prohibido enamorarse ✅

Capitulo 2.

Logan:

Me levanto abro los ojos y no entiendo en donde estoy. Cuando estoy mas despierto me doy cuenta que estoy en lo de Hanna. Me levanto medio dormido, miro la hora y llego tarde, me levanto rapido agarrando mis cosas. Me subo a mi moto. Cuando llego todo los pasillos estan vacios, tampoco es que me importa pero mi papá me mataria, el quiere que sea igual a su hijo ejemplar. Entro al salon y tengo sobre mi la mirada asecina de la profesora junto la de los estudiantes que son mas amigables.

- Logan James - me riñe el profesor viejo de matematica, sigo caminando sin importarme - quince minutos tarde - como si me importara me encojo de hombros.

- Hola bonita - digo cuando llego al lado de una chica que nunca vi, tiene ojos  que me llaman de cierto modo la atencion, pero lo asocio a que es un color peculiar, no llegan a ser azules pero tampcoo celestes.

- No me digas bonita - dice iba a replicar pero el profesor me interrumpe mi coqueteo para mi próxima presa.

El timbre suena, el profesor me advierte por ultima vez tengo que levantar las notas si no no voy a poder jugar futbol americano, no enteindo qeu necesidad hay de que tenga buenas notas para poder jugar. Frustrado voy a mi casillero y me encuentro con mis dos mejore amigos Henry y Erick, El primero es rubio con ojos castaños, alto juega conmigo en el equipo y el segundo es pelinegro, ojos verdes el no juega con nosotros pero corre con nosotros. Nos criamos en la misma calle, nuestras casas estan las tres juntas.

- ¿Que paso que no te vimos? - pregunta Erick cuando llego

-Me quede dormido en lo de Hanna - digo mientras guardo las cosas en el casillero

- Esa chica es hermosa - dice Henry y lo agarro de la camisa estrellandolo contra los casilleros

- No la toques, a ella no - digo y levanta las manos en rendición - sos mi mejor amigo pero ella es como una hermana

- Tranquilo - dice palmeando el hombro

- Ella merece a alguien mejor - digo haciendo un movimiento con el hombro para que entienda que no estoy de humor.

Llega la hora del almuerzo espero como siempre a mis dos amigos para entrar cuando entramos accidentalmente escucho la voz de Hanna.

- Para todos soy un ratón de biblioteca - dice y me acerco a su mesa

- ¿Quien  te dijo eso? - necesito darle una lección a ese imbécil, todos en el colegio saben que si le hacen algo se la ven conmigo. Ella es como una muñequita de cristal, se puede romper muy facilmente y no quiero que eso el sueceda

-Troll bajale un cambio - ruedo los ojos, no estoy para nuestros apodos - todo el colegio - aprieto mis puños

-Te tenes que defender peque - le digo molesto.

- Estoy bien así - dice

- Después no te quejes - tengo que descubrir quien le dijo eso

Cuando me alejo de ella, veo a mis amigos. Me acerco a ellos y nos sentamos para almorzar.

- Log - dice Henry y lo miró mal - ¿que te pasa?

- Todo primero que a la peque la molesten - ellos lo saben mas que nadie porque han sido cómplices de mis acciones - segundo el tema de Franchesco me tiene mal - antes que comiencen los recuerdos Henry habla

- ¿Quién esta con Hanna? -  el idiota piensa que no me doy cuenta pero se que le gusta, pero hasta que no me demuestre que cambio no lo quiero cerca de ella.

- Es Gia es nueva - dice Erick, no se como el hace pero se entera de todas las cosas que suceden en esta escuela.

- Si la vi en mi clase de matemática - digo - le hable pero fue cortante

- La primer chica que se resiste a Logan James - dice Erick con vos de locutor y sonrio divertido

- Si quisiera  la pudiese tener ahora a mi lado - digo seguro mientras continuo con la comida

- ¿Tan seguro estas? - pregunta Henry asiento.

- Acóstate con ella, enamórala y en el baile rómpele el corazón ¿aceptas? - dice Erick con una sonrisa.

- ¿Qué gano? - digo mirándolos alternativamente.

- Hacemos lo que quieras - dicen.

- Acepto - seguro de mi mismo, siempre que quise estar con una chica pude, ella no va a ser la exepcion.

- Si te enamoras vos haces lo que queramos - dice Henry mirándome acusatoriamente.

- En sus sueños me van a ver a mi enamorado - digo sin saber cuanto me iba a apenar de haber hecho esto.