"Te estaré vigilando..." __ Pearce no puede olvidar las últimas palabras de Erick Colón, el chico al que una vez consideró tímido y conservador, y ahora lo describe como impulsivo y agresivo. Hacia meses que recibe cartas y llamadas anónimas de alguien que dicen estar vigilándola, cartas eróticas que prometen cumplir cada y una de sus fantasías sexuales. Pero todo cambió, cuando recibió una llamada de Erick, el cual prometió que iba a violarla. Aterrorizada, __ Pearce siguió el consejo de su detective encargado de su caso al mudarse de ciudad, y así una vez por todas lograr liberarse de el. O al menos eso era lo que creía...