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Blake Gallo

Ambos eran una pareja muy explosiva, su relación era amor y odio a la vez. Principalmente a la hora de tomar decisiones, ninguno se daría la razón ni mucho menos perder apuestas, dañaría su orgullo, principalmente el tuyo. Pero ambos eran unos pasionales a la hora del sexo, a todas horas y donde fuera, no les importaba si alguien los viera "seria más divertido" era su gran pretexto para tener sexo en los vestidores o en cualquier lugar de la estación, incluyendo muchas veces la oficina del jefe Boden cuando no se encontraba en ella.

-No deberías estar haciendo esto -Dijiste entre besos, estabas a tal alto nivel de excitación que solo querías seguir y seguir sintiendo las sensaciones que tu novio siempre te hacia sentir.

-No deberíamos, pero... A~ah -Soltó un fuerte gemido al sentir tu tacto sobre su miembro -eres una... traviesa.

-Cierra la boca y sigamos con esto -Fue lo ultimo que dijiste para seguir el mismo juego que antes habían iniciado con un simple beso luego de pelear sobre quien mordió una manzana antes del almuerzo. Una de las bomberos en la estación, Stella Kidd escucho los fuertes gemidos ahogados entre jadeos provenir de los vestidores, abrió grandes sus ojos para seguir su camino, no queriendo ver lo que sucedía allá adentro. El sexo era la única solución que tenían para arreglar sus diferencias, y funcionaba siempre, Blake sabia como hacer su trabajo y bastante bien.