Capitulo 4: Aprendiz.

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Orochimaru: Guarida oeste. 05:37 a.m

Miré levemente orgulloso como Naruto cerraba la herida en aquel pescado con suma facilidad, como si fuese lo más sencillo que le pudiesen haber pedido. Pero no lo era, la vena central del pez había sido cortada meticulosamente por Kabuto con un bisturí de chakra para dificultar el proceso de sanación y el pulso del animal había caído en picada al igual que su sistema respiratorio. Pero el niño lo solucionó en poco minutos y devolvió el pescado a la pecera.

Definitivamente Kabuto había tenido razón. Seis meses de entrenamiento habían bastado para que Naruto controlara su chakra con la misma precisión que él, lo único que le faltaba era conocimiento. Debía estudiar teorías y más teorías, hasta que supiese cada función del cuerpo humano u otros cuerpos, como lo eran los de los animales, hasta que pudiese sanar toda herida que pudiese presenciar.

Ya había finalizado su estudio de venenos, donde se mostró muy interesado y fanático de los mismos. Se había vuelto un especialista aficionado en solo tres meses y había aprendido a hacer la mayoría de los venenos más mortales en dos meses sin problema.
Además de aprender los antídotos y los síntomas de los venenos en el sistema.

Ahora comenzaba con heridas mortales o de gravedad, más que nada para evaluar su control de emociones y su práctica. Ya no solo era saber la teoría, ahora debía realizarla. Y, hasta el momento, todo le había salido de maravilla.

Naruto, que ahora contaba con ocho años y medio, había estado entrenando más duro con la medicina que con los ejercicios de control de chakra. Haciendo una rutina con solo tres horas de descanso y nueve de entrenamiento durante más de cinco meses. Duro y cansado, pero había dado sus frutos.

- Bien, Naruto, es todo por hoy. Descansa hasta mañana al mediodía, tengo cosas que hacer por la mañana.- informó Kabuto y el niño solo asintió antes de limpiar sus manos y salir del cuarto, seguramente iría a dormir.

- Estoy impresionado.- admití, ganándome una sonrisa ladeada de mi estudiante.

- También yo, Orochimaru-sama. La facilidad con la que aprende es vertiginosa.- comentó.- Calculo unos cuatro meses más para que sea un experto en las artes médicas. Solo necesitará experiencia después de eso.

- Podremos conseguirle un poco de experiencia, quizás los ponga a trabajar en el cuidado de mis proyectos por un tiempo. El sello maldito está tomando más tiempo del que pensaba y los pacientes suelen estar bastante descompuestos.

- Bien, yo lo acompañaré para supervisarlo.- acordó.- Por cierto ¿A terminado con su modelo?

- No, resulta difícil pensar en un modelo que no pueda ser roto por el zorro. Debo hacer más pruebas y estudiar mejor el funcionamiento general del sello. Quizás pueda agregarle algo parecido al sello de ocho trigramas para restringir el acceso al chakra demoníaco y así evitar que lo sobrecargue y lo quite. Tomara tiempo, quizás tres o cuatro años.- me quejé leve, él asintió en comprensión.

- Entiendo, lo ayudaré más tarde. Ahora iré a descansar unas horas, anoche insistió en que nos desvelaramos para crear venenos nuevos.- sonreí grande y asentí, dejando que salga de la habitación.

                             [...]

Tal como Kabuto dijo, Naruto tardó cuatro meses y medio en volverse un experto en la medicina, tanto en teoría como en práctica.
Dos semanas después de eso, lo ingresé como supervisor de mi más reciente proyecto; los sellos malditos.

Una marca que contenía un trozo de mi alma y que brindaba al portador una parte de mi poder. Era adictiva debido a la sensación de fuerza que daba y, por ello, muchos de los sujetos de prueba se descontrolaban.
Muchos morían y otros estaban al borde de la muerte, era bastante tóxica para aquellos que no tenían el cuerpo adecuado para recibirla.

Naruto tendría mucho trabajo medico allí, porque más de cinco o seis de los sujetos de prueba decaían en un transcurso de dos horas. Su objetivo era que ninguno muriera, aunque era prácticamente imposible, pero eso es lo que se le fué ordenado. Él acepto gustoso.

Sería supervisado por Kabuto, quien se ofreció como guía para orientarlo en la rutina de revisión y cuidado que debían tener los sujetos.

Así tendría experiencia y trabajaría su rapidez, además de su nivel de reacción y acción.

Sorprendentemente, después de dos semanas, ninguno de los sujetos de prueba que estaban en estado crítico había muerto.

- El problema no es el sello, si no que el cuerpo necesita una preparación previa a su colocación. Así como las inyecciones que yo requería antes de las afinidades de chakra, ellos necesitan algo que haga el proceso de reconocimiento menor. Alguna sustancia que tenga parte de usted, Orochimaru-sama.

Tal como él lo dijo, fue hecho. Para mí sorpresa, funcionó en gran medida. Los sujetos que no pasaban la prueba de inyecciones una semana antes de la colocación del sello maldito, no eran aptas para portarlo. Aquellos que podían asimilar la inyección, sobrevivían al sello y se mantenían en buenas condiciones médicas.

Los últimos detalles que quedarían retocar eran los del control. Aquellos que recibían el sello debían recibir un entrenamiento arduo para poder controlarlo óptimamente, sacando todo el provecho del poder que se le otorgó.

Semanas después, las rondas de entrenamiento comenzaron y los resultados fueron más que buenos. Al parecer, el sello tenía como efecto colateral una leve mejoría física, tanto en fuerza como en rendimiento, siempre y cuando esté activado.

                            [...]

Naruto cumpliría doce años en ocho meses y eso significaba solo una cosa; podría ingresarlo a Konoha como espía para que pudiese conseguir la información que necesitaba para mí invasión.

Decidí enviaron a él de entre todos mis subordinados porque sabía que su lealtad era innegable. No me traicionaría por nada ni mucho menos se dejaría influenciar por el entorno.

A diferencia de Anko, que se negó a darme más información de la necesaria y ya no tenía con qué más chantajearla. Al parecer se había encontrado con alguien experto en sellos, porque el suyo había sido deshabilitado hace unas semanas. Sin él, ya no podía amenazarla con nada.

Había estado consiguiendo información mediante ella porque podía matarla debido a que todavía tenía el sello en funcionamiento, pero al deshabilitarlo, me quitaba todo el control que alguna vez tenía.

Por ello, decidí preparar a Naruto un poco más durante estos meses faltantes y finalmente colocarle aquello en lo que por tanto tiempo trabaje y que, por fin, ya estaba listo para utilizar.

𝕊𝕖𝕣𝕡𝕚𝕖𝕟𝕥𝕖•Naruto Bad• 🍂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora