Capítulo 12

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MARIZZA

Nos despertamos temprano el sábado. Fuimos a comprar las cosas que necesitábamos para la fiesta de esta noche.

Llegamos con varias bolsas de compras y nos sentamos en el sofá.

-Marizza, sabes mucho de fiesta- me dijo Pili

-Cierto. Prácticamente organizaste toda la fiesta- me dijo Pablo con una sonrisa que me derretía.

-Solia ir a algunas fiestas. De hecho a muchas fiestas.

-¡Entonces puedes ayudarme a vestirme- dijo Pili emocionada

-Si quieres que te preste algo, sólo pídemelo.

-Marizza, eres la mejor persona que conocí en mi vida.

-Pondré las bebidas en la heladera. ¿Quieres ayudarme?- me dijo Pablo haciéndome señas.

-Claro. Has alquilado un congelador, ¿verdad?

-Pense que la heladera era lo suficientemente grande.

-No querrás que toda la gente entre y salga de tu cocina. Es más práctico dejar un congelador con las bebidas aquí en el salón.

-Esta bien, voy a hacer eso.

Dejamos todo listo y a las 8 de la tarde, la casa ya estaba ordenada. Me puse pantalones cortos negros, medias red, un top corto de encaje negri, una camisa roja a cuadros y botas negras con tacones altos. Me hice algunos rizos y me alborote el pelo para que fuera realmente voluminoso. Me hice un maquillaje ligero. Un contorno negro y blanco en los ojos y me puse un labial rojo mate.

Le presté uno de mis vestidos a Pili. Miré el reloj y marcaban las diez de la noche. Ya podía escuchar el sonido fuerte de la música y el ruido de la gente hablando en voz alta.

Yo era la única que faltaba.

Baje las escaleras y noté que todos se detenían a mirarme. No ne sentí avergonzada. Siempre me vestí mucho para las fiestas y siempre me miraron de esa manera.

Algunos chicos se acercaron, pero no les presté mucha atención y camine hacia el congelador.

Agarré una botella de cerveza y la abrí con los dientes.

-Además de ser una lindura, sabes beber- dijo un chico, nuevo de la escuela, - ¿verdad? ¿Cuál es tu nombre?

-Marizza

-Hermoso, como tu- me seguia alabando el chico

-Disculpa que también quiero la atención de este ángel- dijo otro chico

Los chicos empezaron a amontonarse a mí alrededor y hablar al mismo tiempo. No pude responder a nadie y, sinceramente me sentía sofocada.

-¿Disculpe por favor?- Pablo apareció apartandolos.

-Pablo, mi hermano, ¿está diosa es tu amiga?- pregunto uno de los chicos

-De hecho, estamos juntos. Entonces, les agradecería que se hicieron a un lado- frunci el ceño y lo miré

-¡En serio! Primero Sol ¿ahora la chica nueva maravillosa? ¿Por qué siempre obtienes las mejores?- dijo el chico

-Porque no soy un idiota. Ahora lárgate de aquí. Salieron y nos quedamos sólos

-Entonces ¿estamos juntos?- esperé una respuesta positiva ya que habia habido un beso entre nosotros.

-Me di cuenta de que te estaban molestando y dije eso. ¿Disculpa si te molesto? No quiero que nadie moleste a mi amiga.

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