Allaric siguió a su padre hasta uno de los camarotes, en cuanto entraron notó que era el de él. No había cambiado nada, a pesar de ser un pirata era un obsesivo con la limpieza y el orden, siempre había tenido esa manía de que todo estuviera perfectamente ordenado y pulcramente limpio.
—Sigues siendo el mismo viejo quisquilla de siempre— comentó y su padre rió divertido mientras buscaba algo en una especie de clóset improvisado.
—Las buenas costumbres no cambian, incluso si han pasado siglos, Ricky— dijo y sacó una muda de ropa.
—No me llames así, sabes que lo odio— musitó molesto y agarró lo que su padre tenía en la mano quien le miró arqueando una ceja— ¿Qué? ¿Me dirás que no es para mí?— soltó y él sonrió con molestia.
—Las malas costumbres tampoco se pierden por lo visto, sigues siendo el mismo malcriado— se quejó y Allaric solamente hizo una mueca comenzando a retirarse la camisa mojada— ¿Por qué tu novia no vino?— le preguntó en cierto momento.
—Porque no es mi novia— respondió seco y se colocó la camisa limpia.
—Bueno, sé que no eres de relaciones pero, para ser el amor de tu vida, al menos esperaba que fueran novios— comentó su padre y él le miró algo triste.
—Es complicado ¿Está bien?— fue lo único que dijo y se puso el pantalón— ¿Me das unas botas?
—¿También eso?
—¿Me ves con cara de tener algo que ponerme, viejo?
Chastian chasqueó la lengua con molestia y tomó un par de botas para luego lanzárselas sin más. Allaric se las colocó en silencio mientras su padre le escudriñaba.
—Necesito hablar con ustedes, principalmente con ese amigo tuyo— habló y Allaric le miró sin comprender.
—¿Con Ken?— preguntó y este asintió— ¿Por qué?
—Él sabe muy bien el porqué.
—Ellos también necesitan ropa ¿Sabes?
—Buscaré algo para los hombres dentro de la tripulación, no será tan fina como la que traen pero no creo que quieran ser exigentes— respondió caminando hacia la puerta.
—Para Dianne y Clarisse también, papá— le dijo Allaric y este le miró por encima del hombro.
—Ellas también tendrán ropa, Ricky— y dicho eso salió del camarote seguido de Allaric...
Diamond salió de donde estaban los demás bastante molesta, pero más que eso, estaba dolida ¿Cómo podían decir aquello? Ella jamás haría algo que dañara a Elizabeth o a Sussan, si todo eso había pasado era porque estaba cegada por la ira y Clariel la tomó con la guardia baja; pero no volvería a pasar, esta vez no la sorprendería.
Ella salió hasta la cubierta y todos los marines que estaban por ahí se quedaron observándola. Diamond arqueó una ceja y se cruzó de brazos, esperaba que esos hombres no estuvieran pensando en lo que ella creía porque, de ser así, los iba a tirar por la borda a todos.
Caminó haciendo como que les ignoraba hasta la punta de la proa, notando que algunos seguían con lo suyo pero que otros tenían la gran osadía de acercarse y colocarse a unos metros de ella. Diamond se recostó del barandal mirando hacia el mar apretando sus manos sobre la madera de este, como la siguieran mirando como el primer pedazo de carne femenina que habían visto en meses se las iban a ver.
—Pero que preciosura nos trajo la marea— escuchó que decían a sus espaldas con un acento francés bien marcado y respiró hondo cerrando los ojos para calmarse. Sintió como el que había hablado se acercaba a ella y tomaba un mechón de su cabello. En segundos Diamond le apartó la mano agresivamente y le encaró bastante alterada.
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Love You in Black & Blue (Dark Angel IV)
FantasyHistoria inspirada en la canción Diamond Heart de Allan Walker. Love You in Black & Blue (Amarte en negro y azul) es la segunda parte de Diamond Heart, así que si aún no la has leído, deberías pasarte por allá para poder entender esta, estoy segura...