Proyecto 53.

Capítulo 14. Cada vez más lejos.

Pasamos por la puerta que por fin se abrió, el cambio es exageradamente drástico. Vamos de un inmenso corredor completamente blanco a una habitación más oscura que la noche.

Todos sacamos nuestras linternas y empezamos a avanzar, es un espacio condenadamente estrecho. La puerta a nuestras espaldas se cierra nuevamente de golpe, haciendo que peguemos un pequeño brinco en nuestro lugar.

Escucho a Tob gritar, todos nos volteamos a verlo asustados. Oh dios.

Está pegado a la pared de la cuál salen un par de largos brazos largo de un color verde pálido que lo sujetan a ésta.

-¡Ayudenme! -Exclama desesperado.

Nosotros reaccionamos, sacamos cuchillos y nos disponemos a avanzar hacia él. Oigo otro grito a mi derecha y volteo la luz hacia donde proviene, ésta vez han atrapado a Mitch.

Siento algo en mis tobillos, unos dedos huesudos amenazan con agarrarlos, levanto rápidamente los pies y como puedo los piso. Lucho por no entrar en pánico pero cada vez atrapan a más chicos.

A lo lejos observo una luz roja brillando y corro hacia ella como última alternativa. Mientras más me acerco se ve cada vez más lejos, el aire empieza a faltarme cuando escucho una voz familiar.

-¡Julie!

-¿Austin? -Digo y me paro en seco. Miro a mi al rededor, ya no puedo ver ni oír a los demás, estoy sola en una habitación completamente oscura y no muy amplia.

-¡Juliette ayudame! -Escucho el grito, proviene de la dirección de la luz.

-¡Austin! -Grito y corro hacia donde se escucha la voz. -¿En donde estás?

-¡Jul! -Escucho en dirección contraria, es la voz de una chica. Me volteo y observo ésta vez una luz de color azul.

-¿Quién, quién eres? -Suelto como puedo.

-¿No te acuerdas de tu hermana? -Pregunta la voz en tono triste. ¿Qué?

-Ayudanos, ayudanos Juliette. -Dicen las dos voces al mismo tiempo.

-¿Qué debo hacer?, ¿Dónde están? -Pregunto desesperada.

De pronto siento una pinchada en el cuello, el cuerpo me empieza a pesar y todo empieza a verse borroso, lo último que escucho son las voces intensificándose antes de que todo se vuelva oscuro y silencioso.

Hay dos niñas pequeñas.
Están en un jardín jugando y saltando al rededor de charcos creados por la lluvia.
-¡Hey Julie atrápame! -Dice una niña.
La imagen es absorbida y aparece otra ocupando su lugar.
Soy yo con una chica al lado, la misma que anteriormente pero mayor. Mi hermana. Nos vemos realmente felices.
Entonces algo parece golpearme mentalmente, ¿un recuerdo?, no. Son letras, se juntas y me muestran un nombre: Judie.
Debe ser su nombre.

Siento una enorme luz sobre mi, atraviesa mis párpados. Aprieto los ojos como esperando que pare pero obviamente no funciona, mis ojos por fin empiezan a dignarse a abrir y mientras esto sucede una imagen borrosa aparece frente a mis ojos, una vez que éstos se acostumbran puedo verlo todo.

Estoy tirada en el piso de una enorme habitación blanca, de nuevo, hay dos luces, una a cada lado y dos botones junto a ellas,pero los colores de los botones y las luces no corresponden, la luz roja tiene el botón azul y la luz azul el botón rojo. ¿Para qué es todo esto?

-Nos volvemos a ver Juliette. -Escucho la voz de una mujer aproximándose y dirijo mi mirada hacia ella, es Claire, la mujer que me recibió. Me quedo seria. -¿No vas a decir nada? -Ella alza una ceja y ríe.

-¿Qué le hiciste a los muchachos que venían conmigo?

-Oh los verás en un minuto. -Sonríe. -No has sido obediente Juliette, te dije que siguieras las reglas, ¿no es así? -Hace una ligera pausa pero al ver que no respondo continua. -Como quieras. Las malas acciones siempre tienen un castigo, en éste caso, tu castigo será elegir el destino de la vida de... un par de caras familiares.

-¿A que te refieres? -Ella no contesta sólo hace una seña con la cabeza y aparecen un par de jaulas, una debajo de cada luz.

Oh no.

En una de ellas se encuentra Austin y en la otra Judie. A unos 9 metros más abajo hay unos enormes picos metálicos sobresaliendo del piso.

-¡Julie! -Grita Austin, sus ojos están rojos, ha estado llorando.

-¿Qué vas a hacerles? -Pregunto lo más firme que puedo aunque mi voz amenaza con quebrarse.

-¿Yo? Nada, tú serás la que lo haga.

-¿Disculpa?

-Tienes 15 segundos en ese reloj -Dice y aparece una pequeña pantallita. -Los suficientes para correr y apretar el botón de la persona que quieras salvar, la otra caerá directo a una muerte segura. -Sonríe. -Si decides no apretar ningún botón ambas personas caen. Es tu decisión Juliette.

-¿Qué?, ¡No! No puede hacer esto, mateme a mí, ¡ellos son personas inocentes!

-El tiempo corre. -Dice y de repente desaparece. Observo la pantalla, el tiempo empieza a avanzar.

15. ¿Qué hago?

14. Austin llora.

13. Judie grita que lo salve.

12. No puedo.

11. Estoy corriendo hacia ella lo más rápido que puedo.

10. Austin grita que no lo haga.

9. Tengo miedo.

8. No puedo respirar.

7. Judie llora.

6. Me voy a desmayar.

5. No logro llegar.

4. El tiempo se acaba.

3. Miro por última vez a Judie.

2. Llegué.

1. Apenas aprieto el botón.

0. La jaula cae.

Caigo al suelo también.

Esperen. Algo está mal. La jaula que cayó no es la que está frente a mí.

-¡No! ¡Austin!