Bad Habits

Capítulo 16 - You are My Bad Habit, Love.

Hola y Feliz Año para todos!!!! 🎉🥳✨🥂

Bueno, se viene la cuenta regresiva para el final de esta historia así que espero que me acompañen en este último tramo ⏳⏳⏳

Quiero decirles GRACIAS por tan lindos comentarios que me dejaron en el último capítulo, estas semanas fueron algo complicadas con el fin de año pero les prometo contestar ahora que empezamos de cero otra vez

Así que espero que disfruten del capítulo y si les gusta me dejen algún comentario que siempre ayuda a seguir y es como un mimo para los que escribimos 🙏🏻🥰❤

Aquí mi regalo del comienzo de año para ustedes! Aviso que se viene montaña rusa, jajaja para no perder a costumbre en este 2021 😋

POR MÁS HISTORIAS SERQUEL EN ESTE NUEVO AÑO, ESPERO QUE ME ACOMPAÑEN EN CADA AVENTURA NUEVA! GRACIAS POR LEERME SIEMPRE ❤✍🏻

💥 QUEDAN 4 CAPÍTULOS 💥✍🏻

💥

- Sergio, ya deja de beber. Estás así hace un semana, por favor. Casi no comes, no duermes – dijo Andrés con un tono de voz por demás preocupado.

Sergio se quedó en silencio un momento, tenía la mirada perdida.

- Estaba todo bien, Andrés. Quería mudarse conmigo, empezaríamos algo juntos sin mentiras, sin engaños, sin dolor – apretó el vaso de whiskey en su mano – El mismo dolor que siento ahora y que ni siquiera el alcohol puede quemar. Es que le doy vueltas y vueltas y no lo entiendo, joder que estábamos bien.

- Pero piensa, Sergio ¿estás seguro de que no pelearon, que no discutieron, que no hubo algo que le molestara?

- Que no, Andrés. Vino al departamento, yo le cociné porque queríamos celebrar que por fin comenzaríamos algo en serio, hicimos el amor como nunca y se quedó a dormir. Estaba todo bien. Sí, es cierto que estaba algo dispersa durante la cena y me llamó la atención que se fuera temprano pero imaginé que quería acomodar algunas cosas que le quedaban porque pasaríamos a buscarlo todo más tarde tú y yo – golpeó la mesa con fuerza – No dejo de pensar en que me preguntó qué haría yo si esa fuera nuestra última cena. Ahora sé que no fue una simple pregunta, Andrés. Sabía que sería nuestra última cena pero ¿por qué? ¿por qué jugar así conmigo? Los juegos se habían acabado ya.

- Bueno, quizás aparezca cuando menos te lo esperes. Al menos sabemos que está bien. Cuando fuimos a su apartamento, el portero nos dijo que se había ido hacía algunas horas con un par de maleta ¿no? No sé, a lo mejor se arrepintió de mudarse contigo y necesita pensar. Es una mujer independiente, que a lo mejor no quiere perder su espacio, su libertad y no sabe cómo decirte. Ya sabes, es como mi Ágata, de esas mujeres que pisan fuerte.

Andrés no creía lo que estaba diciendo pero quería tranquilizando por miedo a que cometiera una locura.

- Justamente por eso, Andrés. Raquel no es ninguna cobarde, si quería que esto terminara me lo hubiera dicho a la cara – bebió el último sorbo de whiskey y exhaló con fuerza – Nada de esto tiene el menor sentido. No sé qué hacer, apagó el móvil, no sé adónde buscarla, joder.

Andrés bajó la mirada y se quedó un instante en silencio.

- Tú... ¿tú crees que va a entregarnos? Lo siento pero es que debo preguntar.

Sergio desvió la mirada y a Andrés se le heló la sangre. Podía ser su hermano pero en ese momento lo estaba odiando. Apretó los dientes y un poco más el vaso, era la única manera de no mover su mano para chocarla contra el rostro de Andrés.