Hange, en el otro lado

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Hange regresó galopando y se detuvo delante de Erwin.

-¿Qué has estado haciendo toda la mañana? Nanaba te estuvo buscando para llevarte a conocer la ciudad...- dijo Erwin.

-He inspeccionado algunas zonas del bosque, quiero construir una casa-dijo Hange sonriendo-he encontrado un claro bastante cerca del camino con un amplio espacio para cultivar.

-¿Cultivar? ¿Qué?-preguntó Erwin intrigado.

-Té-dijo mientras acariciaba el hocico de su caballo.

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-Hange, todos en el SC sabíamos que tú y Levi tenían algo más que una amistad-dijo Nanaba.

-Bueno, igual que Mike y tú... esas cosas se sabían, pero no se decían-admitió Hange.

-Es verdad...pero ¿sabes qué? A diferencia del otro lado, en este, podemos ver "todo" del otro-dijo Nanaba con una mirada divertida.

-¿Cómo todo?-preguntó Hange.

-TOOODO... Qué resistencia tenía el escritorio de Erwin-río Nanaba.

-Mierda-dijo Hange con la cara sonrojada.

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Mike y Nanaba vivían en una casa y hospedaron a Hange.

Ella se acurrucó en la cama y pensó en lo que le dijo Levi antes de marchar.

Dedica tu corazón.

-¿En serio?¿Todos estos años juntos y solo se te ocurrió decirme el lema de la Legión?... oh, Levi, qué malo eres para expresarte...es una suerte que sea buena entendiéndote-pensó, antes de dormirse.

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Moblit y Hange caminaban hacia la taberna, donde esperaban los integrantes del antiguo escuadrón Hange.
-Gracias Moblit-dijo Hange-me salvaste la vida en Shiganshina.
Moblit sonrió.
-Y tú tuviste cuatro años de duro trabajo como comandante-contestó Moblit.
-No lo menciones...-rió-Te he extrañado mucho.
Moblit se detuvo.
-Yo también, Hange-la abrazó. Permanecieron un rato así. Luego se separaron, y Hange se limpió las lágrimas.
-Pero él te cuidó bien, Hange, y aunque no lo quieras creer, tú también a él-dijo Moblit.

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Mike y Hange esperaban a Nanaba en la calle. Hange tomaba el brazo a Mike, contenta de tenerlo cerca. Mike, de pronto, comenzó a olfatear y acercó su nariz a ella, olfateando más profundamente.
-Sí, me he bañado... yo solita... y si haces algún comentario sobre esto...patearé tu trasero-dijo ella.
Mike solo sonrió.

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