Me declaro Nerd

Capitulo 20 ↓ "No te metas en mi cliche"

CHAN! CHAN CHAN! al fin Quiero darles la noticia que la historia será editada, tiene errores y los primeros capítulos son malos, a que sí. No cambiare nombre ni nada por el estilo pero lo que involucra a la trama y la forma de Alisson al expresarse a su mala vida pues un poco, no la quiero hacer común. ¿Ya dije que amo los comentarios? Pues los amo y son lo mejor en la vida, Quiero saber que tienen para mi así que dejen su opinión en este cap, es tarde y espero a que lo lean.

Las amo con la amorosidad de los amores amorosos y Hakuna Matata.

 ¿Qué mierda te dicen los psicólogos para calmarte? Eso de inhalar e exhalar. Creo que era algo sobre contar.

Cortar gargantas no era una opción, nop, estaba segura de que no.

No pensaba que el chico tendría el valor de actuar normal, yo no actuaba normal; no lo hago la mitad del tiempo, ¿Qué acaso no recuerdas la primera hora de la mañana? Yo si la recordaba y también como mi pecho se estrujaba al leer aquella nota.

Pero en este momento en pecho de Robert se estrujaba por el hecho de tener en sus brazos a Debra.

La nueva.

Sabia como el diablo que esas palabras me joderian bastante, y en efecto. En este momento lo hacían.

Debra Wilson era la carne fresca en la secundaria, y en el mundo cliché, eso significaba ser la víctima y atención del chico malo. Exacto.

Mi cliché, mi chico malo.

MIO.

Hacia puré mi manzana mientras en una reservada mesa al final de la cafetería observaba a Debra y Robert reír a carcajadas. A su lado, en la siguiente mesa sus amigos lo miraban como si se hubiera vuelto loco.

Es que esta chica ni siquiera lo intento, demonios.

Robert estaba entrando en otro tipo de cliché con esa chica, ¿saben cómo lo es? Por qué el chico Ulrich empezaba a desaparecer de mi vida a una velocidad increíble. Me decía que también entraría a un cliché diferente y nos separaríamos. Nunca sabría porque me había besado, porque se preocuparía por mí.

Este tipo de celos era diferente, y créanme. Eh sentido celos desde que empecé con esta farsa. Solté un largo suspiro dejando salir la incertidumbre.

Ava devoraba su comida frente a mí, su cercanía es cómoda y sus silencios no son incomodos, sin mencionar el gran hecho que era una de las personas que no masticaban con la boca abierta; gracias a dios, Ava se había vuelto una gran amiga, esto de estar sola no se sentía bien estos días.

Volví mi mirada cuando Robert y Debra dejaban el lugar haciendo que Ava se percatara  volteando conmigo dejando la cuchara en su boca, miro mi expresión de vuelta haciendo un sonido con su garganta de desaprobación.

—Khiza Zhoyo Zom Haminghoz— Ava comía con la boca cerrada, sí. Pero no se molestaba al quitar la cuchara de su boca al hablar.

—No son “Haminghoz” Ava— dije imitándola —Se cómo termina, y no es lindo para mí— apoye mis codos en la mesa — ¿De qué hablas?— pregunto.

Me tome el tiempo suficiente para admirar la belleza bruta de Ava antes de responder, ojos castaños más claros que su cabello, rostro ovalado dejando como centro de atención sus labios, el superior más fino que el inferior, largas pestañas.

— ¿Alisson?— Ava era mi amiga, lo había aclarado un poco; pero dentro de mí la Alisson insegura decía que podría contarle mi secreto más loco a su malvada hermana y hacer mi vida más complicada.

—Más bien, soy yo tirando litros de inseguridad en tus sentimientos, florecilla— Y dime porque no me sorprende.

— ¡Dejo pensamientos racionales, listilla!— Ya puedes hacer silencio, ¡Zorricilla!