Capitulo 17; ¿A ti que coño te paso?

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¡Feliz año lectoras! tambien les deseo un buen 2015 y lo digo por que este sera el ultimo capitulo de este año.  Y en este aspecto ustedes lograron que me llevara un buen recuerdo. Su apoyo en esta novela fue y es increible!. Este es un capitulo con una sola escena por asi decirlo. ¡Pero el siguiente esta por la mitad! y digo que solo tardare menos de una semana si no tengo problemas en subirlo. Asi que, si este no les parecio emocionante. Solo como relleno, esperen el siguiente... WATTPAD A CAMBIADO MI CATEGORIA, Asi que sali de mi zona en Literatura Femenina y wattpad la reubico en ADOLESCENTES. 

Me Declaro Nerd/ Cap 17. 

Los cortes de sus nudillos eran profundos y trague en seco cuando note que su ojo izquierdo estaba levemente cerrado.

— ¿Puedo pasar?— dijo sacándome del trance. Asentí — ¿Estas bien?—

—No comentare sobre esa pregunta estúpida— Vete Jess

Lo hice pasar y en el momento en el que se quejó al llegar hasta el sillón individual mi cabeza comenzó a maquinar con mis miles de preguntas. Como ya estaba soltando lo que pasaba en mi cabeza al mundo sin siquiera cuidar que saliera, que se escapara algo sobre esto no me preocupaba demasiado.

—No preguntes que ha pasado— bufe en ironía —Tú no estás en posición de mandarme aquí, amigo— había cerrado sus ojos cuando se recostó en el espaldar del sillón que cuando hable los abrió de repente dedicando una mirada incrédula y diciendo — ¿Estás diciendo que puedo mandarte en cualquier otro lugar, pero no aquí?— reprimí mis ojos en su dirección

—Deja de tergiversar lo que digo Ulrich— le di otro vistazo y esta vez me dije en el hematoma que se formaba en su quijada. Deje mi inútil “pelea” con él y fui a buscar el botiquín en mi habitación antes de que algunas de esas heridas se infecten.

Cuando bajaba las escaleras con la enorme caja que se acercaba más a la descripción de una gran maleta, la chaqueta de mezclilla de Rob se acomodaba en su hombro listo para retirarse.

— ¿Adónde crees que vas?— dije dejando el botiquín en la mesa —Sentado— señale el sillón —ahora— solté exigente, Robert se detuve un rato rascando su nuca.

—No debí haber parado aquí Alisson— camino un poco más cerca de la puerta —No sé si pueda quedarme— coloque mis brazos en jarra. Esto del chico lastimoso no se le daba bien.

—No te hagas, no quieres que el chico se vaya. Eso es todo— Ujum

—No puedes quedarte— Su cara de dolor me recordó que hable lo bastante rápido para que él lo entendiera como un rechazo. Me golpee mentalmente repetidas veces. —Lo siento— la manija ya daba vueltas en su mano.

— ¡Oye!— su mirada conecto con la mía —No, puedes quedarte— note como se relajó, tardo un poco más en volver al sillón pero supongo que también me relaje.

No me gustaba esto, se suponía que nada de Robert por este día y por los siguientes, ahora estaba con Ash. En una forma en la que ni yo misma me imaginaria estar con un chico. Pero luego mi cliché aparecía golpeado y con hematomas; porque estoy segura que hay moretones repartidos por su cuerpo. A mandar todo a la mierda.

De acuerdo, admito que esto solo me gusta un poco.

No es cierto, estoy jodidamente emocionada. Soy una perra.

—Lo eres— Aprendí de la mejor

— ¿Me contaras lo que ha pasado?— dije mojando una mota de algodón en alcohol. El negó — ¿Quién lo hizo?— presione sobre un corte bastante feo. — ¿Por qué  mejor no hablamos sobre ese hospital andante al que llamas “Botiquín”?— Presione aún más el algodón ganando un fuerte quejido de su parte.

Me declaro NerdDonde viven las historias. Descúbrelo ahora