Amor de mi vida, te odio [XiSang]

Capitulo 24: Lección

Tan pronto como se sienta, Nie Huaisang abre su abanico y bosteza detrás de él. Un doble recordatorio para Lan Xichen de que no quiere estar aquí, ni siquiera con un mejor té, y también que algunas personas saben apreciarlo adecuadamente, como lo demuestra este perfecto abanico.

Lan Xichen no muerde el anzuelo. Sirve té sin siquiera mirar hacia el abanico a pesar de que le molestó mucho la última vez. Se sienta, elegante como siempre, y empuja una taza de té perfecto hacia Nie Huaisang.

-¿Hay alguna posibilidad de que podamos jugar al Go hoy? - Lan Xichen pregunta en tono resignado.

Honestamente, Nie Huaisang no sabe por qué el otro chico todavía pregunta. Aparte de esa única vez, nunca han vuelto a jugar. Su mejor suposición es que es solo un hábito en este punto, y esos Lan son muy aficionados a su rutina.

-No estoy de humor - Dice Nie Huaisang con otro bostezo. Ya no se molesta en dar excusas, sabiendo que Lan Xichen solo acepta su negativa cada vez.

-Entonces tengo otra sugerencia sobre una forma de pasar el tiempo - Anuncia Lan Xichen, su habitual sonrisa vacía un poco más nerviosa que de costumbre - Me gustaría que Nie gongzi me mostrara cómo pinta.

-No estoy interesado en una lección  - Responde Nie Huaisang, abanicándose.

-Lo se. Quiero que me enseñes.

Esa es una declaración tan inesperada que Nie Huaisang se queda boquiabierto por un segundo y detiene su mano, seguro que debe haber escuchado mal. Cuando ve que la esquina de la boca de Lan Xichen se torna en una sonrisa más real, la ira se apodera de la sorpresa.

-Lan gongzi se está burlando de mí - Acusa - Pensé que eso habría ido en contra de las reglas de Gusu Lan.

La sonrisa en el rostro de su prometido cae.

-¿Es tan difícil de creer que me gusta tu forma de pintar?

Nie Huaisang se encoge de hombros - Lan gongzi pinta tan perfectamente, ¿Qué tiene que aprender de alguien, y menos de mí? Si estás tan desesperado por conversar, al menos elige algo creíble.

Lan Xichen frunce el ceño.

-No estoy mintiendo.

-Por supuesto que no. Eso también va en contra de las reglas, ¿no? - Nie Huaisang se burla con una sonrisa.

-No estoy mintiendo - Lan Xichen insiste, se levanta - Y lo puedo demostrar

Es la primera vez que pierde parte de su precioso tiempo juntos al salir de la habitación. Mientras observa a Lan Xichen apresurarse hacia la parte trasera de la casa, hacia el dormitorio, Nie Huaisang se pregunta distraídamente si es algo que podría denunciar a Lan Qiren. Eventualmente decide que no quiere lidiar con ese anciano. Además, Lan Xichen todavía tiene material de chantaje suyo, así que es mejor no molestarlo demasiado. De todos modos regresa pronto y deja una pequeña pila de papeles sobre la mesa.

-Me gusta la forma en que pintas - Dice Lan Xichen, con la cara roja - Y como no puedo entender cómo lo haces, deseo que me enseñes.

En lugar de responder, Nie Huaisang mira boquiabierto las pinturas que se le presentan, lo que parece ser media docena de copias de los conejos que le dio a Lan WangJi. Vacilante toma uno y lo inspecciona de cerca, un pequeño ceño fruncido formándose en su frente.

-¿Tú hiciste esos? - Tartamudea, mirando al otro chico que todavía está de pie - Pero se ven como... Tú pintas tan bien, ¿por qué intentas copiarme?

-Me gusta tu forma de pintar - Repite Lan Xichen con una intensidad inesperada, y su rostro se pone aún más rojo.

-Pero me dijiste que debería dejar de pintar, el año pasado. No lo he olvidado