24: Voz

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No sabía muy bien si había sido para su suerte pero TaeHyung se había ofrecido a relevarlo y pudo salir dos horas antes, después cuando estuvo a punto de tomar el autobús que lo llevaba a la universidad, recibió un mensaje de MinKyung avisándole que habían cerrado la universidad temprano.

Sí, definitivamente había sido suerte.

Ahora se encontraba de camino al bar que había descuidado tanto tiempo, la última vez que había ido fue cuando se encontró a JiMin, y eso había sido ya varios meses atrás.

Abrió la puerta de madera y de inmediato la atmósfera cálida lo envolvió, el tintineo de las botellas de alcohol llegaban a sus oídos como un dulce canto, el bullicio leve lo atrapó y dio pasos lentos por el suelo de madera, pudiendo escuchar sus propios zapatos.

Se deshizo la coleta que recogía su cabello, dejándolo caer por sus orejas, se revolvió levemente el cabello hasta llegar a donde acostumbraba encontrarse a MinHee, uno de los meseros. En el escenario había una chica de cabello corto cantando alguna canción que no reconocía, se apoyó junto a la barra y pronto, MinHee apareció.

-¡Jeon JungKook! -exclamó con una botella de alcohol en su mano, le dio una pequeña palmada en la espalda.

-Hombre, ya nos tenías abandonados.

JungKook rió levemente y se quitó el cabello de la cara.

-He estado muy ocupado -se limitó a decir, y como era lo usual, MinHee no preguntó.

-Esa chica bajará después de esta canción, espero poder escucharte hoy, los clientes han estado preguntando por ti.

Las orejas de JungKook se tiñeron de rojo, negó con la cabeza y MinHee le revolvió el cabello, antes de desaparecer entre la gente. No pasó mucho tiempo para que la chica bajara y pronto, JungKook ya se encontraba sobre el escenario.

🎀

Cuando su jefe le había dicho el lugar al que iban todo lo que pudo pensar había sido en JungKook, pensó en su bonita voz y se preguntó si era un lugar al que recurría, nunca habían hablado realmente de ello. Siguió a su jefe entre las mesas, un chico de cabello castaño cantaba con una voz gruesa en el escenario e instintivamente, buscó a su pelinegro por el local, pero no lo encontraba y era poco probable que se encontrase ahí, a esa hora estaría en su trabajo.

Tenía tantas ganas de sacar su móvil y preguntarle cómo estaba, pero su jefe había estado de malas y sabía que si lo sacaba, era su perdición. Se limitó a escuchar junto a sus compañeros y tomar unas cuantas bebidas mientras tenían una reunión.

Y entonces, la voz que escuchaba casi todos los días llegó a sus oídos como un suave susurro, se giró rápidamente al escenario y ahora la voz de su jefe sonaba de fondo. Ahí estaba JungKook, con su bonito cabello largo rodeándole el rostro y sus bonitas manos tomando el micrófono, sonrió al instante al verlo cerrar los ojos y sumerjirse en la música.

No supo cuánto tiempo estuvo mirándolo fascinado, porque una sacudida en su hombro le hizo reaccionar.

-¿Entendiste, JiMin?

Salió de su trance y miró a su jefe, quien lo miraba inquisitivamente.

-Sí, sí -afirmó aunque a penas había escuchado la mitad.

Su jefe volvió a hablar pero sus ojos volvieron al escenario cuando la voz de JungKook dejó de entrar por sus oídos, entonces lo vio bajando del escenario al mismo tiempo que sus compañeros de trabajo se ponían de pie.

Se despidió de cada uno y de vez en cuándo miraba hacia JungKook para no perderlo de vista, finalmente todos se habían ido y estuvo a punto de acercarse, cuando lo encontró sentado en una mesa con un chico.

Estaban riendo y JiMin juró que no lo había visto reír tan bonito, el corazón se le llenó de calidez y sonrió ante la imagen, quizá era mejor dejarlo solo, sabía de sobra que JungKook no tenía tanto tiempo para reunirse con sus amigos. A pesar de tener la incertidumbre del porqué no le había avisado que había salido temprano del trabajo, la ignoró, JungKook no tenía porqué avisarle de todo.

Y sin más, abandonó el local.

🎀

Se encontraba mensajeándose con JiMin después de su práctica, estaba recargado en una de las paredes de la entrada a la universidad, esperando a que su amiga saliese, NamJoon también se encontraba junto a él.

-¿Hoy viene tu rubio por ti?

El entusiasmo en su movimiento de cabeza le hizo reír a su amigo, dejando ver aquellos hoyuelos que adornaban su sonrisa. No había podido ver a JiMin ayer porque decidió llegar a su casa temprano, quería mucho al mayor y quería verlo, pero también quería un momento a solas.

-¿Aún no son novios?

-Vamos lento.

-Claro, lento, pero duermes en su casa más de lo que duermes en la tuya.

Bien, no podía negar eso. Pero por suerte, un taxi apareció frente suyo y no pudo evitar sonreír.

-Dile a MinKyung que me fui antes.

-Como si no lo fuese a notar.

Ignoró el comentario irónico del novio de su amiga, y apresuró el paso hasta el automóvil, adentrándose tan pronto la puerta fue abierta.

-¡Cooky, Cooky, Cooky!

Las pequeñas manitas de Sarang se enrollaron en su cuerpo y JungKook, demasiado contento para pensarlo demasiado, rodeó a la pequeña con uno de sus brazos. Después de dedicarle una sonrisa, subió la vista para encontrarse con la mirada divertida de JiMin.

-Hola, JungKookie.

-Hola hyung.

La mano de JiMin se posó sobre la suya y su pulgar le acarició suavemente, el corazón de JungKook se llenó de felicidad y no pudo evitar pensar, que quizá no necesitaba ir tan lento.



:: UNA GRAN DISCULPA, aaaaaaaa es que les juro que la escuela me trae LOCA;_;;;

como ya estoy casi en los finales, tengo tarea a montón y aproveché para escribir este pequeño capítulo ,espero me perdonen por la tardanza, no es pq yo quiera:C

espero estén teniendo un buen día u_u<3 ::


baby steps :: jikookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora