Undécimo Capítulo

124 11 1
                                    

D E B B Y

Nos volvimos a besar. Nuestros fluidos bucales fueron compartidos otra vez. Traté de convencerme de que el beso de la obra lo disfruté porque estaba muy metida en mi personaje, pero vaya que no quería sepárame de Adrien cuando este con brusquedad juntó nuestros labios y debí aguantar un suspiro porque una parte de mi estaba anhelando que algo así volviera a pasar.

—Felicitaciones—dice Megan acercándose a Ada, capitana del equipo ganador. Porque perdimos, calificamos, pero no ganamos. Puede que no poder concentrarme en algo más que el beso que ocurrió en el camerino tuviera que ver con la poca velocidad de mi nado.

—Oh. Felicidades a ustedes también, estoy temblando de solo pensar en tenerlos como contrincantes en la estatal.

Asiento y decido verter mi concentración en la conversación. Es más saludable prestarle atención a Ada que pensar en el beso que compartí con mi mejor amigo.

Ada comenta sobre lo dictatorial que es el entrenador del equipo SW, tema que debido a las tensiones que crea en el ambiente es cambiado a que el equipo local tendrá una fiesta. Lo cual con una leve mirada con Megan se traduce a que en esa fiesta contactaremos a más Sheppards para que firmen nuestras peticiones. Mientras más rápido podemos ayudarla, menos tiempo debo mantener el secreto y mentir por ella. Lo hago porque ella me importa, pero siempre existirá esa parte que al guardar un secreto me recordará lo mucho que herí a mis padres.

—...Esa es la temática—concluye Ada.

Debo llamar la atención de Meg quien estaba mirando a otro lado sin ninguna razón aparente.

—Megan ¿Entendiste la temática de la fiesta?

—Mhhm sí —miente, lo sé por el pequeño cambio de tono en su voz. Ella sabe que odio que mienta y aun así siempre lo hace, es casi...Patológico para ella.

—Los esperamos ahí —se despide Ada.

—¿Cuéntame de qué es la temática?

—Me distraje—contesta con sinceridad y me permito darle un respiro. Por ahora.

Hablamos más sobre la fiesta hasta que el entrenador nos interrumpe. Interrupción más que necesaria pues nos lleva a enterarnos que el entrenador del equipo SW está acusando a Megan de estar ejerciendo su puesto como entrenadora de manera ilegal porque así lo dice un viejo manual. Ridículo.

—...La solución más viable es ir al tribunal de nuestra ciudad. Montar un caso el cual ganaremos. Cambiaremos el manual y para eso necesitaremos que el comité este de nuestro lado.

—¿Cuánto tiempo nos llevará eso? —cuestiona el dueño de mis confusiones emocionales.

—No estoy seguro. Espero que para la fecha de la competencia estatal al menos tengamos una cita para el tribunal. Mientras esperamos eso, trataremos de evitar a los SW ¿Alguien en desacuerdo?

—No.

—Vamos al hotel a preparar una cena para diez cuarentones —anuncia Megan y eso es lo que hacemos.

Al llegar al hotel todos decidimos cambiarnos para vernos uniformados como meseros, así que todos usamos camisas blancas con jeans negro, excepto Megan quien deben lucir impecable mientras convence a los entrenadores que la solicitud del entrenador SW es ridícula.

—Rojita, ¿Cómo se enciende esto? —pregunta Adrien al frente del horno tocando quien sabe qué. Me acerco a ayudarlo enternecida por su miedo al horno luego de que el día de la lasaña casi se quema si no fuera por la ayuda de la Sra. Glenis. Con Michael y Chad de meseros, Adrien y Olivia emplatando conmigo encargada de que la comida que le pedimos al hotel este lo suficiente caliente, la parte de la comida en la cena sale perfecto. Lo que espero que colabore a que la parte de mi amiga salga tambien perfecta.

¡¿ELLA ES MI AMIGA?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora