Quinto Capítulo

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Miércoles, 27 de marzo del 2018

A D R I E N

¿Por qué los humanos no tenemos el poder de leer mentes?

Yo entiendo que tal como en mi videojuego, eso llevaría a una guerra porque los humanos no podemos soportar los crudos pensamientos de los demás. Pero, a mí me gustaría, al menos solo por un día, saber qué clase de cosas ocurren en la mente de mi mejor amiga pellirroja. Especialmente saber por qué hoy decidió no irse conmigo sin razón aparente.

—Creo que Debby está molesta porque le quite una papa frita en el almuerzo. Sí, eso debe ser, por eso no quiso venir conmigo.

Quiero pensar que esa fue la razón. Mentirme, pues sé que la manera en la ella me miró fijamente no fue solo por robarle la comida.

El viaje que incluía a los gemelos y a Vannesa me dejó exhausto. Entre Vanessa acercándose a mí en cada parada del semáforo, Calvin sirviendo de un muro para impedirle llegar demasiado cerca de mí y Chad cantando a todo pulmón cada canción que salió en la radio no fue exactamente mi definición de un paseo en auto ideal.

—¡Maldición, esa chica sí que es complicada! —de la mejor manera posible, pero sí que lo es.

Mi exclamación provoca un reproche de la madre de Michael. Madre que nunca es buena idea comparar con la mía, porque lleva a emociones no deseadas. Me disculpo arrepentido, para sus ojos quiero ser alguien que podría inferir que es un buen hijo. Porque un buen hijo debería tener una buena madre. Hablamos brevemente del blog de su madre hasta que decido sacar el tema que he querido mencionar desde ayer. Ideo la manera de traerlo a la mesa disimuladamente

—Me alegro. ¿Qué te parece Megan? —disimulo cambiando de canales.

—¿Como entrenadora?

—Como entrenadora y como persona-aclaro y no puedo evitar alzar mis cejas.

—Es buena, es exigente y sé que va a hacer que el equipo mejore su potencial.

—¿Por qué no la invitas a salir? —sugiero, por lo divertido que estoy con su reacción sale en un tono más bulón.

—Estás loco—grita. Su madre lo regaña y debe disculparse.

—Se que estoy un poco loco. Esta vez ¿Por qué lo estoy? —No es como si le pregunté directamente que tan enamorado está de la entrenadora.

—Porque sabes lo que pasó la última vez, además te tengo que recordar el discurso que nos dio el entrenador ayer o ¿ya se te olvido?

La última vez fue cuando Skylar y Jhonny cruzaron esa línea, pero yo dudo bastante que el problema de ellos tenga que ver con su relación únicamente

—Es diferente.

—No lo es. Megan es linda, pero me he esforzado mucho para mantener el puesto de capitán y no puedo dejarlo por Megan. Que me quiten el puesto en el último año me arruinaría, no, eso no pasará.

—Cobarde—murmuro tratando de llegar a sus nervios. Para que eso lo incite a hablarle. Michael aun no lo comprende del todo, pero es importante para mí que pueda darle buenos consejos románticos. Él pasó conmigo todas esas madrugadas en las que no podía dormir porque pensamientos como que nunca seré suficiente para Debby eran mi tormento.

Él me ignora por lo que decido sugerirle que juguemos videojuegos. Nos encontramos con su hermana en la habitación viendo televisión, con palomitas. Decido unirme a ella pues desde que llegamos Michael no me ha ofrecido ni agua, y levantarme a buscarla yo mismo sonaba como demasiado trabajo después del entrenamiento de Megan. Por la serie que está viendo, consigo relacionar lo que pasa en la serie con el tema que antes estábamos hablando. Esperando que Sofie, su hermana, me apoyara. Pero en un evento inesperado, Sofie decide que Michael tiene razón.

¡¿ELLA ES MI AMIGA?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora