¡¿ELLA ES MI AMIGA?!

Vigésimo Tercero Capítulo

Martes, 9 de octubre del 2018

A D R I E N

Despertar con Roja a mi lado es despertar con el pie derecho en mi diccionario. Sus manos me rodean, su pecho se encuentra pegado a mi espalda. Al voltearme con cuidado para no despertarla noto que aún al dormir su labio inferior tapa al superior. Sonrío ante la imagen.

Para que no despierte a mis ojos intensos viéndola decido dirigirme al baño. Cuando regreso de este, ella sigue durmiendo pacíficamente abrazando a una almohada.

—Que fácil conseguiste remplazo —bromeo en un susurro.

La escucho reír contra la almohada lo que me indica que la ruidosa puerta del baño la despertó.

—Tú decidiste irte —replica entre bostezos.

Me recuesto a su lado posando mi cabeza en la almohada que abraza.

—¿Soñaste conmigo? —pregunto por mi ego que anoche creció bastante.

Los recuerdos de anoche vuelven a mí y debo pensar en otra cosa antes que la zona baja de mi cuerpo decida reaccionar.

—Puede ser, pero no pretendo decirlo. Debes mantenerte humilde —contesta levantándose, se apoya en sus hombros expectante a mi respuesta.

—Yo soy demasiado humilde, tu respuesta no cambiaría eso —replico.

—Claro —responde hundiendo su cabeza en la almohada por varios segundos.

Al levantarse se encamina lentamente hacia el baño. Me detengo a apreciar la imagen de ella en mi camisa y solo bragas con el cabello despeinado.

El sonido de mi celular interrumpe mi concentración en la diosa pelirroja en el baño. Lo contesto de inmediato, puesto que el identificador de llamada anuncia que es el entrenador quien me esta llamando.

—Adrien, muchacho, lo de la pagina era solo un registro que debía hacer. Tenemos que esperar que nos llamen para indicarnos el resultado, así que en la hora del almuerzo nos reuniremos como equipo.

—Esta bien entrenador, ¿Necesita ayuda con algo?

—¿Puedes venir más temprano y quedarte por más tiempo? Necesito tu ayuda para firmar digitalmente algunos documentos y registrar más datos en la página si nos dicen que el equipo SW queda descalificado.

—Estaré ahí temprano y me quedaré por el tiempo que necesite.

—Nos vemos muchacho.

No intercambiamos muchas palabras, pero noto el estrés en su voz. El entrenador no es un experto ocultando que no tiene las cosas bajo control y de alguna manera aprecio eso. Me hace sentir mejor sobre el hecho de que yo, la mayoría del tiempo, tampoco tengo mis cosas bajo control.

Le informo a Debby mi conversación con el entrenador, ella acepta acompañarme y nos arreglamos. Caminando hacia el lobby. En el camino noto como Debby y yo seguimos sufriendo por averiguar cómo actuar ahora, como relacionarnos ante el cambio drástico de nuestra relación. Nuestras manos se rozan, ninguno de los sabe que hacer.

No sé si sostener su mano o apartarme para respetar su espacio.

Al final es ella quien termina entrelazando nuestras manos justo al entrar al salón donde está el entrenador, él observa nuestras manos y decide no comentar al respecto. En su lugar me pide que le encienda la computadora y busque la página que le mandaron por mensajes.

Lo hago y Debby decide juguetear con su app en el teléfono mientras tanto. Los chicos llegan una hora después junto a Megan. El ambiente se palma de tensión que aumenta cuando entra Justin junto a los miembros del equipo de porristas.