¡¿ELLA ES MI AMIGA?!

Primer Capítulo

Sábado 17 de marzo del 2018.

A D R I E N

Estoy aquí contra mi voluntad. Fui arrastrado a esta fiesta porque una de mis cualidades es que soy un buen amigo. Soy demasiado bueno siendo un amigo. Incluso cuando no quiero serlo.

—Feliz Cumpleaños, Olivia—felicita Debby por todos mientras que Michael es apretujado por la cumpleañera.

Mi mejor amiga, la chica pelirroja de hermosa sonrisa y personalidad, me convenció de venir. Porque ella cree que debo ser un buen amigo para Olivia, la fan enamorada de mi mejor amigo. Por lo que me encuentro sentado en unos de los sofás de la cumpleañera y no puedo evitar pensar en Debby. Pues es que nunca puedo parar de pensar en ella. No sé a qué parte de mi cerebro se logró integrar, pero nada de lo que hice o haga podrá sacarla de ahí. En estos momentos apreciándola moverse e involucrarse en la fiesta recuerdo lo mucho que odio ser su amigo. Porque es lo único que soy. Soy quien la ve bailar desde lejos y solo obtiene una sonrisa de su parte. Mientras que un desconocido baila con ella y obtiene cercanía, e incluso si juega bien sus cartas hasta algo más.

—Te torturas tú solo—comenta Michael palmeando mi espalda. Él ha soportado todas las etapas por la que ha pasado mis sentimientos por nuestra pellirroja amiga.

Si bien mi atracción por Debby nunca se fue y no creo que planee irse en un futuro cercano, ha evolucionado. Eso es lo que me gusta pensar. He pasado los peores años que fueron mis primeros años de adolescencia, en los que no sabía cómo controlar el creciente deseo sexual que empecé a sentir. He evolucionado a un Adrien de 18 años que sigue enamorado de su mejor amiga, pero al menos sabe cómo ocultarlo mejor. He aprendido a vivir con la idea de que siempre seré su amigo Adrien.

Y nada más. Porque en todos estos años ella no ha mostrado ningún indicio de sentir algo parecido, no quiero incomodarla con mis sentimientos. No es necesario. Puedo vivir solo siendo su amigo. Siendo su buen amigo que será parte de su vida, solo un espectador más de su felicidad.

Ella se encuentra bailando pegada al chico. Mueve sus caderas al ritmo de la música dándole un buen espectáculo a su pareja de baile que no se mueve y solo está parado detrás de ella hipnotizado con sus movimientos.

Alzo la cerveza en mi mano en su dirección, entiendo cómo te sientes. Entiendo lo hipnotizante que puede ser Debby Reeds.

Bebo un sorbo de la botella, otro sorbo cuando ella se voltea quedando cara a cara con el chico con suerte envidiable. Eventualmente hago de esto un juego de beber, Michael no puede detenerme y solo me mira atento con su vaso lleno de soda.

—Apuesto—carraspeo para poder hablar mejor. —Apuesto que puedo terminarme esta botella antes de que bailen otra canción—exclamo hacia el aire, pues Michael no quiere apoyar ninguna de mis apuestas—, a-aburidoooo—Comienzo mi misión y bebo sin mirarlos dejando que el culo de la botella tape mi vista. —¡Listo!

Celebro mi quinta o decima quinta victoria, no lo seé. Solo sé que volví a ganar. Qué bueno que Debby me trajo a esta fiesta, el alcohol y yo nos estamos divirtiendo bastante. ¡Todo es genial!, ¡Todos somos amigos!

Debby es una buena amiga, y debería darle las gracias por bridarme diversión en esta fiesta. Sí, está decidido, voy a darle las gracias. Cuando termine mi cuarta, sexta, ¿décimo primera? cerveza, logre levantarme de este sillón sin que la habitación de vueltas y Michael deje de mover tanto su cabeza voy a agradecerle.

D E B B Y

Este chico no sabe bailar. Lo único que hace es estar tieso como una pared, siento que bailar contra la pared sería menos incomodo que bailar con él. Seguro es buena persona, pero en realidad no tenemos mucho en común. Él intenta arreglar su rigidez susurrándome cosas en el oído.