Begin Again. [Gemelos Oviedo]

Capítulo 1.

[Narra: _______]

11 de abril de 2014.

Querido Diario, sé que hace mucho que no escribo, pero necesitaba desahogarme y explicarte cosas.

Estos 8 meses han sido como... ¿Extraños? Todo ha sido muy diferente respecto a la vida que llevaba antes de el verano pasado.

Creo que ya escribí toda mi experiencia de este verano, marcharme fue lo más duro. Al llegar a Barcelona todo cambió, empezamos las clases, 4º de ESO, que me está yendo bastante bien. La gente ya me miraba de otra forma, yo era una chica normal, pero tampoco era muy popular, pero a partir de ahí cambió la cosa. Todas las chicas les interesaba ser mi amiga, supongo que era por haber sido concursante de “La Voz Kids” o por el simple hecho de que en febrero aparecería en la televisión. Eso fue lo mas impactante de septiembre. Octubre y Noviembre fueron más o menos igual, que Septiembre, salvo que en Octubre empecé a hablar con Jessica a través de mensajes y hasta ahora sigo teniendo el contacto. Me explica que sigue hablando con Jesús, y que son amigos, ya que por la distancia no podían seguir. Cada vez que hablaba con ella siempre me entraba la curiosidad y me habría encantado preguntarle: ¿Y Dani? ¿Te ha dicho algo de Dani?. Pero no lo hacía. Sinceramente no había vuelto a hablar con él desde cuando partí en el tren, y por algunos meses que hayan pasado sigo pensando en él, pero ya no me duele tanto como para llorar como lloraba las primeras 3 semanas de Septiembre.

¡He hecho los 15! Mucha gente dice que he cambiado mucho tanto física como psicológicamente, espero que haya sido a bien.

Durante estos meses he conocido gente nueva: Lidia, mi nueva compañera de clase, Tania, la hermanastra de Helena y también a Iván, mi nuevo vecino de portal. La verdad es que tengo que admitir que es monísimo, con esos ojos azules que tiene y ese pelo rubio oscuro, cualquiera diría que me recuerda a Calum, pero no, él es muy diferente, además, es un año mayor que yo. Nos llevamos muy bien, quedamos mucho y me hace olvidar muchas cosas.

El 6 de febrero se emitió las primeras audiciones a ciegas de “La Voz Kids”. Esa noche cambiaron muchas cosas. Mientras estaba con mis padres, mis tíos, mis abuelos, mis primos y por no decir todo el árbol genealógico de la família Martínez Carrasco, en el salón de nuestro piso viendo las audiciones, yo estaba con el móvil hablando con Jessica, Helena e Iván a la vez. Jessica estaba eufórica, aunque ella salía en las segundas audiciones, Helena diciéndome que lo tenía todo preparado para grabarlo, e Iván diciéndome que estaba ansioso por escuchar mi voz. Entonces es cuando sonó: -Somos Jesús y Daniel, tenemos 14 años y somos de Sevilla...-Con la voz de Dani. Miré rápidamente la pantalla y vi la imagen de ellos dos. Ése momento fue como un “deja-bu”. Recordé cuando estaba sentada detrás de la cámara poniendo nervioso a Dani. No pude evitar soltar una pequeña sonrisa entre dientes. -Ésos son tus amigos, ¿no ______?.- Dijo mi madre. Simplemente me limité a mascullar: -Emm... sí, bueno. Cuando sonaron sus voces, no pude evitar que se me pusiera la piel de gallina. Todo el mundo en mi salón acabó aplaudiendo y diciendo comentarios como: ¡Que angelitos!, ¡Que bien cantan!, ¡Que iguales!, etc. ¿QUE ANGELITOS? Si eran unos pillos. En fin, salí del salón para ir al baño, cogí el móvil y tenía mensajes de Jessica diciéndome que habían estado geniales, que había revivido el momento en que los observábamos a través de la televisión de la sala de espera de plató. Pero lo que más me insistió fue que mirara sus twitters. Accedí a mi cuenta y puse sus id. -¡DEMONIOS!-Exclamé. Sus seguidores aumentaban por diez en cada segundo. Me quedé alucinada, empecé a ver fotos de ellos por todo twitter en apenas 3 minutos que habían salido en la televisión. Miles de niñas siguiéndoles, publicando tweets diciendo: A mi me gusta el de la derecha, pues a mi el de la izquierda, los dos son monos, que “salaos”, etc. Era alucinante. Volví a la realidad ya que me estaban llamando mis padres para que corriera hacia el salón. Ya salía. Me vi subiendo las escaleras del gran escenario. Todo era tan diferente al verlo a través de la televisión... Pude sentir en ese momento el nerviosismo que tenía en aquellos instantes. Mi familia gritaba, algunos lloraban y cuando acabé la actuación todos se levantaron a besarme, abrazarme y a levantarme en brazos gritando: ¡_____!, ¡_____!. Un rato después miré el móvil y... ¡BUM! Tenía como 10.000 seguidores más 5.000 tweets por abrir y 50 páginas de club de fans. No me lo podía ni imaginar...