Capítulo IX

8 0 0
                                    

— Puedes abrirla. —Dijo James cerrando la  puerta a su lado

— ¿Qué es? —Pregunté antes de abrirla

— Ábrelo. —Ordenó

Obedecí a su petición y en el interior de la caja descubrí una pequeña llave, me pareció muy extraño y decidí preguntar de qué era. Solo obtuve una sonrisa como respuesta, esto me dejó más en incógnita y mi apuesto novio no estaba dispuesto a decir nada

— James, por favor dime de qué es. —Supliqué

— Tranquila, te diré en cuanto salgamos. —Respondió confiado como de costumbre

Las siguientes 2 horas estuvimos sentados frente a una pantalla gigante, luego de allí salimos a caminar por todo el boulevard, el reloj marcaba las 3:30pm y aún el sol estaba fuerte, decidimos parar a comer algo, entramos a un restaurante de comida italiana, luego pasamos por un parque de diversiones que estaba muy cerca de allí, nos subimos a varios juegos pero James estaba enfocado en uno solo... La montaña rusa, ese era su favorito y para mí no era nada agradable, nunca había subido a una, me causaba temor solo por oír los gritos de las personas que estaban arriba

— Vamos a subir, no te preocupes yo estaré contigo. —Dijo James agarrando fuerte mi mano

¿Qué? ¿Subirnos? ¡No!, está loco, no subiré allí.

Odio cuando mi subconsciente me dice cosas, el siempre tiene razón.

Luego de negarme infinitas veces, casi llorar y suplicarle que subiera solo, me rendí, no pude seguir luchando contra el y terminé aceptando

Nos subimos al tren, nos colocamos los broches de seguridad y todo lo del protocolo, la máquina se puso en marcha.

Perfecto, ahora sí moriré. Al menos moriré a su lado, no será tan malo después de todo. 

Fué el momento más aterrador de mi vida, pero a su lado me sentí muy segura... Utilizé sus abrazos como cinturón de seguridad y su mirada me inspiraba confianza

Quién diría que me enamoraría así de el, era increíble como un día estás planeando tu vida o ya llevas una meta y al día siguiente aparece alguien de la nada, alguien que te hace cambiar todo y que a pesar de eso te obliga a escribir una nueva versión de la vida que querías llevar, una nueva versión de ti misma

Te hace pensar diferente, actuar diferente, incluso te hace ver la vida diferente porque cuando la estás viendo a blanco y negro, ese alguien llena de colores esos días oscuros, por el simple hecho de ve verte sonreír...

Creo que nunca me hubiera subido a una cosa de esas por mi propia cuenta, pero realmente fue lo máximo... Como mi cabello era llevado por el fuerte viento, y esa sensación de volar mientras estás de la mano de la persona que amas.  Nunca olvidare está experiencia

★★★★★★★★★★★★★★★★★

— ¿Ya me vas a decir de qué son las llaves? —Pregunté a mi apuesto hombre

— No, te llevaré al lugar, y allí te lo explicaré todo. —Dijo mientras conducía

Era muy extraño el no querer decirme de qué se trataba, el sabía muy bien que eso de las sorpresas no era lo mío, pero era imposible llevarle la contraria, el siempre por alguna razón no discutía, solo callaba y escuchaba. Un poco extraño, pero era ideal

Llegamos a una casa un poco alejada de la ciudad, era pequeña ( no tanto), tenía un hermoso jardín, una alberca, un baño, una cocina, la sala de estar y una hermosa biblioteca en el primer nivel, en el segundo nivel tenía 2 cuartos y un baño en cada uno de ellos, un pasillo enorme hacía un balón con una hermosa vista al mar.

Me agradaba el hecho de que fuera cerca del mar, amaba el mar, era como un escape para mí cuando estaba estresada. El sonido de las olas me hacían olvidar todos los problemas y la cálida arena en mis pies era esa parte esencial para ayudarme a conseguir una salida a todas esas cosas que me atormentan.

El lugar era maravilloso, cálido y acogedor.

James se acercó a mí, me tomó de la mano y me llevo a caminar por la playa, mi corazón latía fuerte, amaba estar con él cada segundo más. Caminamos y caminamos sin decir ni una sola palabra, disfrutando de la hermosa vista y pidiendo al cielo que este día no se terminara jamás

— ¡Mi amor!, Pues ahora sí te voy a decir que es todo ésto. —Su voz era tranquila. — Ésto es tuyo, y  no quiero que lo veas solo como una simple casa, quiero que esté sea tu escondite. Oí que te gusta el mar y estar sola de vez en cuando, pues este será tu Escape, cuando te sientas frustrada o solo necesites pensar, aquí puedes venir cuando quieras.
— Es tuyo. —Susurró a mí oído.

No sabía que decir, no tenía palabras y lo único que hice fue abrazarlo y darle las gracias

— ¡No!, No quiero venir aquí para escapar de nada. —Dije mirándolo a los ojos. — y tampoco quiero que esté sea mi escondite... Quiero escapar contigo y quiero que tú seas mi escondite, de lo contrario no lo voy ha aceptar. Moví la cabeza en forma de negación.

En su rostro podía ver el deseo, y sí, era lo mismo que probablemente el estaba observando en mí.

— Pues me temo que no podré ayudarte con eso. —Dijo mientras bajaba la cara con decepción

¿Qué acababa de decir?,No lo podía creer, ¿Por qué se empeñaba en molestarme? ¿Estaba jugando o decía la verdad? Ya no sabía ni que pensar, solo tenía miedo de seguir escuchando.

Amor Y Leyes. Unidos Por El Destino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora