Between Packs and Paws [NCT]

XLII: Love is never wrong

[Solo un aviso, publique otro capítulo antes que este, por si no les salió]

Johnny sabia que podía ser despistado.

Pero desde que habia llegado a esa casa se habia dado cuenta que si no prestaba mas atención a su alrededor, iba a volver a ser el único sentado en la mesa que lucia tan confundido.

Parecía que todos tuvieran secretos y o preocupaciones... Menos el, que lo único que hacia era ayudar al bebe Jisung a cortar sus Nuggets de dinosaurio.

Por un lado estaba su adorado, tierno, hermoso, bello y aterrador omega, quien parecía mirarlo junto a Yuta como si estuvieran planeando su muerte, quizás para quedarse juntos e huir con todos los niños y...

"Rayos, debo dejar de escuchar las historias que se inventa TaeYong" Se dijo a si mismo sacudiendo esos pensamientos de su cabecita mientras impedía que Jisung le diera un Nuggets con kétchup a Mark.

Los dos omegas mayores tenían sonrisas picaras, casi diabólicas, hablando entre ellos con susurros y risitas y dándole una que otra mirada divertida al alfa castaño.

Johnny nunca tuvo tanto miedo,

Lo que el alfa Seo no sabia, era que esos dos omegas se estaban preparando para darle la mejor noticia de su vida, el test que TaeYong y JaeHyun habían ido a buscar habia dado positivo, confirmando el embarazo de DoYoung, y el quería que su alfa supiera que iba a ser papa de forma especial, así que le pidió ayuda a su mejor amigo.

Por otro lado, Johnny también habia notado que su mejor amigo en todo el universo, Moon TaeIl, también lucia como si estuviera ocultando algo, solo que la forma misteriosa y casi incomoda con la que el alfa mayor se comportaba lo hacia sospechar que si ocultaba algo, probablemente un cadáver.

El hombre casi ni habia tocado su comida, ni prestaba atención a nada a su alrededor.

Lo que Johnny no sabia, era que podía estar en lo cierto.

TaeIl habia comenzado a percibir otros aromas, otros alfas, cerca de su territorio, alguien habia traspasado el paramo que los separaba de otras manadas y eso lo habia puesto en un estado de alerta permanente, constantemente patrullando el bosque, mirando a sus espaldas y marcando su territorio con su aroma. El que su celo y el de Yuta estuviera a la vuelta de la esquina no lo ayudaba con su animo, lo único que quería hacer era quedarse encerrado en una habitación con su omega y dedicarse completamente a el, si tan solo no tuviera tres niños a su cargo.

Luego estaban TaeYong y JaeHyun, a quienes Johnny entendía menos que la novela de las siete.

Hace unas horas, se habían marchado completamente enamorados en plan "Familia feliz", luego regresaron llorando y tristes, luego Yuta intento golpear a TaeYong en las pelotas con un bate mientras DoYoung le gritaba cosas que su madre no permitiría que repitiera, luego, cuando TaeYong pudo huir, Johnny vio a JaeHyun correr hacia el cuarto del mismo, después de que Ten saliera huyendo de la habitación del omega, y ahora en la cena, estaban chisme que chisme como mejores amigos de la secundaria, codeándose y bromeando con risitas bobas y miradas divertidas.

Y es que TaeYong estaba intentando convencer a JaeHyun de montarse su propia telenovela con Ten, y el menor no podía hacer mas que reír ante sus ocurrencias. Pararse sobre la mesa y gritarle su confesión no estaba entre sus planes.

El omega tailandés también estaba extraño, pero Johnny no podía juzgarlo, nunca lo haría, por que Ten se la devolvería veinte veces peor.

El omega mas bajo comía su cena en silencio, solo respondiendo a su cachorro, quien gruñía molesto con YangYang por ensuciar su remera favorita y Johnny era ajeno a los dilema y penas que abrumaban su mente.