010

129 33 5
                                    

˚₊· ͟͟͞͞➳❥┆010┊Italian food

Luego de aquella pelicula, salieron del cine, habían comido pochoclos pero aún estaban hambrientos.

Ambos habían llegado a la conclusión de que la película era terrible, pero aún así se divirtieron viéndola y criticándola.

-Los efectos especiales eran terribles.-Habló Mark. DongHyuck asintió riendo.

-Terribles y todo pero aún asi te asustaste.-

-Me asustó lo terrible que eran.-Respondió riendo.

-¿Sabes que tengo ganas de hacer ahora?-Preguntó el menor.

-No, ¿Qué?-

-Ir al centro y comer comida chatarra.-Respondió sonriente. Y solo bastó una mirada para que ambos comenzaran a correr en dirección al centro mientras reían.

El primer local que vieron fue en el que pararon hacer sus compras, para luego terminar en una plaza sentados en un banco compartiendo papas fritas, chizitos y anécdotas.

DongHyuck se quedó concentrando admirando a las personas que pasaban por allí y Mark no desaprovechó esa oportunidad para sacarle una foto al menor, lástima que al darle clic hizo ruido y el castaño lo miró curioso.

-Hey, si vas a sacarme fotos avisa al menos.-Respondió rodando los ojos.

-Lo siento, te veías lindo concentrado.-

-Mjm, son 20 cada foto hacia mi persona.-Contestó el menor mientras alargaba su mano hasta el canadiense para que depositara el dinero ahí.

-Tengo una mejor idea.-Respondió mientras chocaba su mano con la del menor. Éste lo miró confundido y de un segundo al otro Mark se le había acercado para hacerle cosquillas.

-¡Oh dios Mark! ¡Para! ¡Para!-Chillaba una y otra vez el castaño, para cuando Mark detuvo sus cosquillas se encontraba encima del menor. Al darse cuenta de la posición en la que estaban se sonrojaron y se separaron rápidamente.

-Bien... Ya es tarde creo que deberíamos volver.-Soltó Mark de repente. Hyuck le dió la razón, tiraron los envoltorios al tacho de basura que había por ahi y comenzaron a caminar.

Iban entretenidos escuchando música del celular de DongHyuck cuando de repente al alzar la vista se encontró con aquellos dos chicos que habían sido sus mejores amigos hasta aquella pelea.

Tomó el brazo de Mark llamando su atención.

-Crucemos por favor.-Pidió, el mayor asintió no tan seguro de por que le pedía aquello.

-¡Hyuck!-Habló una voz a sus espaldas, el menor cerró sus ojos con fuerza y se volteó. Mark lo imitó observando aquellos dos chicos que estaban enfrente suyo.

-¿Jeno?-Se extrañó el canadiense, no sabía que se conocían.

-¿Mark?-Al parecer el rubio estaba igual de confundido, pero pronto su lamparita se encendió.

Pronto un nuevo chico se acercó a ellos, uno que Mark conocía bien.

-Renjun.-Nombró el pelinegro. DongHyuck lo miró confundido.

-¿Ustedes se conocen?-Los miró serio el castaño.

-No.-Respondió el chino, mientras que Mark dijo lo contrario.

-Si. Es el ex de mi mejor amigo.-

-¿Ex? Pero Ren no estuvo con...-Y su cerebro comenzó a maquinar. Soltó una pequeña risa acompañada de su suspiro.-Vaya... otra mentira ¿Cuántas más de esas tenés?-

El morocho no respondió, solo suspiró. Mark los miraba atentos a los dos.

-Si vas a enojarte con alguien hacelo conmigo, no con Jeno, es mi culpa que quedara en el medio.-Respondió tomándole el brazo al menor. Éste lo miró mal, le regaló su peor mirada. Su pecho ardía de furia. Se soltó bruscamente de su agarre y salió corriendo de allí.

Mark parpadeó dos veces antes de correr tras el menor, quien no dejaba de repetir insultos para su mejor amigo quien parecía haberle mentido en más de una ocasión.

¿Cómo era posible que después de tantos años de amistad el mayor no le haya contado que había tenido pareja? ¿Cómo rayos es que lo ocultó tan bien? Se sentía frustrado.

Se detuvo de repente cuando una visión apareció.

Mark corriendo detrás suyo, y accidentalmente chocando con alguien. Quien no parecía del mejor humor.
Una discusión comenzó, el pelinegro intentaba disculparse pero nada, aquel chico estaba demasiado enojado. ¿Quién diablos se creía?

Y sin dudarlo golpeó a Mark.

Abrió los ojos en grandes cuando aquella ráfaga de imágenes terminó.

Dió media vuelta y comenzó a correr. No lo veía por ningún lado. ¿Dónde diablos se había metido?

De repente su vista se enfocó y lo vió, en una esquina sentado en el suelo.

-¡Mark!-Gritó al verlo. Rápidamente se acercó a él. Tenía la mejilla lastimada y el labio partido. Tomó el rostro del mayor entre sus manos mientras lo acariciaba.-Lo siento, lo siento, lo siento, no debí dejarte solo, perdón, perdón, perdón.-Repetía una y otra vez mientras lo abrazaba.

Para el canadiense aquel golpe no había sido nada, peor había sido ver llorar a DongHyuck en cuanto lo vió herido. Se dejó abrazar por el menor.

-Estoy bien no te preocupes, no fue tu culpa, asi que deja de disculparte.-El castaño se separó del canadiense, y éste le limpió las lágrimas.

-Pero.-

-Sin peros.-Respondió Mark mientras se levantaba del suelo con ayuda del menor.

-Vamos a tu casa, es la que queda más cerca, y si no te pones algo se te va a hinchar la mejilla.-Habló el menor mientras discretamente tomaba la mano del contrario y emprendían camino.

Fue un camino silencioso, pero a ninguno de los dos le molestaba. Tan pronto llegaron al edificio DongHyuck lo acompañó a entrar.

Taeyong, el padre de Mark, al escuchar la puerta, se acercó felizmente hasta el pasillo para ver a su hijo.

-¿Como te fue en tu ci... ¡Oh por dios Mark!-Chilló el mayor mientras se apresuraba en llegar hasta su hijo.-¿Qué te pasó?-

-Nada grave papá.-Habló el pelinegro rodando los ojos. Mark dirigió su mirada al castaño a su lado.-Padre, él es DongHyuck, Hyuck, él es mi padre.-Los presentó.

El menor le sonrió al padre de su amigo.

Mientras los menores se acomodaban en el cómodo sillón de la sala, y Taeyong iba a la cocina a buscar hielo.

-Linda casa.-Soltó el menor admirando el lugar. Se imaginaba que Mark viviera con lujos ya que vivía en uno de los edificios más caros de la ciudad. El mayor solo le sonrió.

Taeyong rápidamente llegó a la sala, se dedicó a desinfectar las heridas de su hijo y le dió un poco de hielo para que se le desinflamara la mejilla, que ya se estaba empezando a poner morada.

-¿DongHyuck cierto?-Preguntó el mayor, el castaño asintió.-Tengo la cena casi lista ¿Te quedas a cenar?-Propuso el mayor.

Hyuck dirigió su mirada a Mark quien lo miraba sonriente, aun con su mano en una compresa con hielo.

-¿No pidieron comida italiana verdad?-Todos allí rieron.-Claro, me encantaría.-Respondió sonriente.

MarkHyuck | Bad LuckyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora