CAPÍTULO 5

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-¿Donde estabas?-mi madre se acercó a mi al abrir la puerta-estaba muy preocupada.

-Si, Michelle llegó hace algo de tiempo-dijo paty.

-Es que, me perdí-fue la primera escusa que se me ocurrió.

-Muy bien, pero ya sabes, ¿Verdad?-me pregunto mi madre.

-Si, ya me aprendí el camino.

Michelle está dormida desde que llegué y yo me acosté e hice lo mismo.

Era la segunda vez que estaríamos con David y Michelle se puso un vestido rojo con zapatos de piso y un poco menos de maquillaje que la vez pasada, yo me puse unos jeans ajustados negros con una blusa suelta gris y mis tenis.

Michelle y yo nos fuimos al mismo lugar donde antes nos habíamos encontrado con David, y allí está el, pero su hermana no. Nos acercamos y frío nos saludó, a Michelle con un fuerte abrazo, y a mi con un beso en la mejilla.

-¿Y Diego?-pregunte por curiosidad.

-Se quede en mi casa-respondió.

-No importa, si tu estas aquí me doy por bien servida-dijo Michelle. David río.

-Bueno chicas, ¿Que quieren hacer?- nos preguntó sentándose de nuevo en la banca.

-Pues...-intente decir pero Michelle me interrumpió.

-Lo que tu quieras.

-¿Ti que dices Paola?- David me miró.

-Yo iba a sugerir ir a la plasa al cine o algo parecido-comente.

-Perfecto-dijo levantándose.

Fuimos al cine y vimos una película de terror, David se sentó en medio de mi amiga y yo y uno un momento en el que nos tocamos Lasa manos.

Cuando terminó fuimos a comer hamburguesas.

-Estoy muy llena-dije apartando mi plato vacío de mi.

-También yo.-se apresuró a decir Michelle que a penas había dado dos mordidas a la suya.

-¿Ya se quieren ir?-nos preguntó David.

-Si.-dijimos Michelle y yo al unísono.

Salimos de allí y nos sentamos en una de las canas que había fuera.

-David, cantados-dijo Michelle cruzando la piernas.

-Claro,¿Que quieren que les cante?-preguntó David parandose.

-Sorprendenos-le solté pasando una pierna por debajo de otra e inclinandome más hacia el.

El pienso un poco.

-¡Ya ser cual!

Nos dijo y se abrió paso en medio de nosotras para sentarse.

Comenzó a cantar "tanto la quería", esa canción me fascinaba, y no pude resistir cantar la parte que correspondía a la voz femenina. Sentí como su mirada me recorría atónito, pero siguió cantando.

-Por la que yo sufro-terminó de catar David.

Yo me quedé con una sonrisa que no podía borrar de mi rostro mientras el me miraba.

-No me habías dicho que cantas-me dijo sin dejar de mirarme.

-Es que no cantó-baje mi mirada por qué no supe que hacer- sólo habló con ritmo y entonación.

David, rió un poco.

-Wou, fue hermoso-dijo Michelle, casi se me había olvidado que estaba allí.

Entonces entró una llamada a mi celular.

-¿Bueno?-conteste.

-¿Paola?-era mi mamá

-si.

-Paty y yo encontramos a un viejo amigo que se mudó aquí saliendo de la Universidad, nos ofreció ospedaje, así que dejaremos es hotel he iremos a vivir unos días con el.

-Eso es grandioso mamá.

-Arreglaremos las maletas, las llevaremos a la casa y después pasaremos por ustedes ¿De acuerdo?

-claro.

-Bueno, te amo. Adiós.

-Adiós.-dije y colgué.

-¿Que dijo?-preguntó Michelle.

Yo le conté todo y seguimos platicando.

Dieron las 8:30pm cuando Michelle contestó su celular.

-¿Bueno?-contestó- Hola... si... si...te la pasaré.

Michelle me dio su móvil.

-¿Bueno?-respondi.

-Paola, hay mucho tráfico y Paty y yo decidimos regresar, nuestro amigo conoce a Maria, la mamá de David y estamos pensando en que se queden allí.

-¿Nosotras?

-si.

-Pero...

-Sabes que, pasame a David.

Yo la obedeí y le dio el teléfono a David.

-¿Hola?.. si... ha, si es un gran amigo de mi madre... por supuesto... claro que no... muy bien... cuidense- y colgó.

Michelle y yo le mirábamos con los ojos como platos.

-¿Querer te dijo?-preguntamos Michelle y yo.

-Dijo que tendrán que quedarse a surgir en mi casa.-David le devolvió el móvil a Michelle.

Todos nos miramos y así cabo de un rato caminamos a la casa de David.

Mi sueño se cumple. #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora