𝐇𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐒𝐢𝐞𝐦𝐩𝐫𝐞 • 𝙼𝚊𝚛𝚌𝚘 𝙰𝚜𝚎𝚗𝚜𝚒𝚘 •

4: ¡bellezze a sorpresa!

● Clarice Leite ●

Siendo las 19:56 de la noche, salgo del aeropuerto de Madrid tomando un taxi con destino a la casa de Sara Salamo e Isco Alarcón, son las primeras personas que quiero ver en mi reaparición.

Después de casi 30 minutos llegó, bajo mis dos maletas y respiro, estoy muy nerviosa, así como también emocionada por verlos y ver su reacción.

9 meses en un hospital psiquiátrico, tomando rehabilitación para quitarme la depresión en la que me puso la persona que pensé que me amaba, mi psicóloga, mi madre y Javier, han sido el apoyo que he tenido todo este tiempo.

Me siento bien y me siento capaz de continuar con mi vida, a pesar de lo que pase, perder a ese bebé es de lo que más me siento culpable por que deje que el dolor me destruyera y lo destruyera a el, ahora ya no es momento para arrepentirse, pero si para salir adelante.

Camino a la puerta y tocó el timbre, respiro y nuevamente vuelvo a respirar, se escuchan los gritos de un niño y eso hace que me emocioné y quiera dar un abrazo a todos los que forman parte de mi pasado y que extraño ver, la puerta se abre y en ella veo a Isco, pongo una sonrisa y el se queda mirándome.

- ¡Clarice! - asiento muchas veces y el se lanza a abrazarme.

- ¡Isco! - respondo fuertemente a su abrazo y ya estoy llorando.

- ¿Quienesssss..... -

- ¡Sara! - nos separamos y la miro limpiando mis lágrimas.

- ¡Clariiii! - grita y corre a abrazarme.

Sin darme cuenta, ella también ya estaba llorando, los pequeños nos miran raro y yo sólo pongo una sonrisa.

- ¿Cómo es posible? - dice Isco metiendo mis maletas.

- enserio eres tu -

- yo les dije que volvería...... y aquí estoy - me alejo y saludo a los nenes.

- no estás muerta - vuelve a decir Sara.

- se que es difícil de creer, pero no, estoy más viva que nunca - reímos.

Nos sentamos en el sofá, Isco en frente mío y Sara a mi lado, los pequeños se van y ellos me miran como si pasará algo.

- ¿Qué ha sido de ti en todo este tiempo? - dice Isco y yo río.

- les contaré pero informó que no hay nada interesante ahí, por que todo ha sido desgracia en mi vida - Sara me abraza.

- lo importante es que estas viva -

- me fui a Lisboa y sin darme cuenta me hice daño a mi misma, caí en depresión y prácticamente mi vida ya no tenía sentido, después de unas semanas me enteré que había estado embarazada pero por que no me di los cuidados necesarios mate a mi bebé, ya se imaginan - nuevamente estoy llorando y no puedo contenerlo - después de eso, intente quitarme la vida tomándome unas pastillas y agradezco mucho que ese día lograron salvarme, por que ahora se que aún tengo mucho por vivir.... le dije a mamá y Javier que me dieran por muerta y que sigan el juego hasta que yo lo diga y ellos aceptaron -

- fui a tu entierro, te vi en el ataúd - dice Sara.

- y era yo, tenía oxígeno en la caja y estaba sedada por unas cuantas horas, nadie sabría que estaba viva, antes de el momento del entierro ya habían cambiado la caja y yo ya no estaba ahí, mamá y Javier no dejaron que nadie me vea en el cementerio y sólo enterraron la caja vacía - suelto una sonrisa y Isco trae cara de confusión - me internaron en un hospital psiquiátrico y recibí la ayuda que necesitaba, estuve allí 9 meses y cuando me dejaron en libertad, decidí continuar con mi vida, nos fuimos a vivir a Italia y en estos últimos tres meses he estado pensando en mi regreso para todo el mundo, por que quiero que sepan que mi carrera no acabo y que yo estoy viva, pero será todo a su tiempo, no aguantaba más las ganas de verlos y volví a Madrid, gracias chicos -.