Turmalina.

Fiesta.

Adara amaba las fiestas, ama las celebraciones y aunque aún no podía manejar del todo el aturdimiento que le generaba, también amaba la alegría de las personas al estar en un evento como una graduación. Por lo que, aunque la ceremonia fue fastidiosa y solo pudo cuchichear con Bella que estaba igual de aburrida que ella, una parte de si estaba feliz de graduarse.

Tan feliz que ni siquiera tuvo un desliz donde imaginaba que asesinaba a alguien para beber su sangre.

Vitoreó feliz cuando Alice, Jasper e incluso Edward fueron a recibir sus diplomas. Y cuando fue su turno esperó a Bella -quien iba después de ella- para ser la primera en abrazarla.

—Felicidades. —susurró Jasper contra su oído, abrazándola.

—Mi primera graduación de mil más, ¡yai!

—Espero que en cien años te sigan entusiasmando. —jugó con la borla del birrete, haciéndole cosquillas a Adara en la nariz.

—¡Ada!

Charlie se hizo pasó entre las multitudes para acercarse a su hija. Adara contuvo la respiración cuidando la fuerza que aplicaba en su abrazo.

—Jasper...

—Jefe Swan. —respondió con un asentimiento de cabeza.

—Felicidades, muchacho.

—Gracias.

—Bien, vamos a buscar a Bella antes de que ustedes dos se queden sin palabras. —frotó sus manos en un gesto de entusiasmo.

—¿Qué te parece ir al Lodge para cenar? —se giró levemente, haciendo ver que se dirigía solo a Adara.

—No seas descortés, pa.

—¿Te gustaría ir o tienes planes con tu familia? —Jasper sonrió levemente por el mal disimulado tono de disgusto de Charlie.

—Gracias por la invitación, señor, pero, así es, quedamos con nuestros padres. —Charlie asintió, tomando a Adara por el hombro.

—Te veré más tarde.

Se despidió con una sonrisa y un movimiento de mano y junto a su padre fueron a buscar a Bella, con quien, básicamente se repitió la conversación.

Ni siquiera tener que obligarse a cenar en un restaurante atestado de gente logró ponerla de mal humor. Fingió exitosamente disfrutar su comida mientras los tres conversaban del pasado y futuro, de vez en cuando usando frases como "cuanto ha pasado el tiempo".

Cuando llegaron a la casa de los Cullen Adara no se sorprendió de todo el empeño que había puesto Alice, solo de cómo en cada festejo lograba superarse a su misma. La sala parecía un antro gracias a la iluminación y los aparatos de sonido.

Jasper apareció a su lado en menos de un parpadeo, abrazándola contra su pecho durante el tiempo en que ella seguía admirando el trabajo de Alice.

—Te ves preciosa con ese vestido. —susurró contra su oído.

Adara puso sus manos sobre el pecho de Jasper obligándolo a retroceder hasta que estuvieron apartados de Alice, Edward y Bella.

Jasper no demoró en comenzar a besarla. Sujetándola por la cintura la atrajo a su cuerpo lo más que pudo, disfrutando como las curvas de Adara se amoldaban perfectamente a él.

—También sin él. —murmuró contra los fríos labios de Jasper.

—Te verías preciosa con un anillo de matrimonio. —contraatacó

—También sin él. —repitió.

Antes de que Jasper pudiera protestar volvió a besarlo, acariciando sus brazos y subiendo hasta su nuca, donde jugaba con los rizos rubios.