Narra Matt
El niño corrió a mí con sus pocas fuerzas pues era muy pequeño aún para tener el equilibrio de tomar vuelo y correr como un niño más grande. Se aferró de mi pantalón al jalarlo y simular que lo abrazara. Su sonrisa me demostraba que estaba tan feliz, me sentí incómodo y fuera de mi lugar, pero a pesar de mi confusión me agaché y tomé entre mis manos a la criatura que poseía el mismo color de mis ojos y un parecido bastante a mí.
— H…hola
— Papá
Me abrazó al rodear mi cuello, el aroma de ese niño era penetrante y me sentí bien por un momento, como si me transmitiera paz… ¿Cómo podía ser? Lo cargué entonces al quedarme claro que este niño era mío…si, pero aún no captaba mi vida pasada, quizá haya sido alguien importante.
Observé las imágenes sobre un mueble, era yo con una enorme sonrisa…al lado de una chica con ojos oscuros y cabello negro. Entonces giré mi mirada y ahí estaba ella, me miraba nerviosa y algo incómoda, ahora la recordaba…era la chica que estaba cuando abrí los ojos…la que me dijo que era mi novia, era linda pero no era mi estilo…y lo malo de la historia es que ahora tengo un hijo con ella.
— Bien…amm te espero afuera, James así recoges las cosas que viniste a buscar
— ¡¡Ufff!!
— ¿No te gustaría tomar algo? – ella me detuvo mientras dejaba al niño en el corralito…pero esté comenzó a llorar
— No…espero afuera, gracias
No dejaba de llorar y entré en pánico, me salí casi corriendo y esperé afuera recargado en el cofre de la camioneta.
Narra Lois
— Es increíble
Mis lágrimas salieron entonces, cuando por fin Matt había cambiado conmigo…pasa el mugroso accidente que le hace perder la memoria. Cargué a mi bollito y lo acuné, él extrañaba a su padre…y yo extrañaba a mi novio, James me miró con ganas de llorar junto con Mateo, era demasiado para mí. Sentí sus brazos rodearme como siempre, besó mi frente y saqué el aire mirando a mi hijo.
— Tengo que ser fuerte por él
— Matt estará bien, es solo que ahora tiene la euforia de ensayar y esas mugres
— De acuerdo…
— ¿Necesitas algo aparte del idiota que me está esperando en el auto?
Sonreí algo irónica y sentí su sonrisa, besó mi mejilla y luego besó a Mateo, se fue por la puerta y me asomé a la ventana, Matt se metió a la camioneta junto con James al irse, era horrible, simplemente una pesadilla, si era así quería despertarme ya enserio.
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Tomaba de la mano a un pequeño niño gigante. Mateo cumpliría 4 años y debía llevarlo de compras para escoger sus útiles y comprar su uniforme del colegio. Gracias a James y los chicos, pude registrarlo cuando apenas cumplió los 3 años, se acopló instantáneamente en el colegio y hasta me exigía ir todos los días, incluyendo fines de semana, a pesar de ser tan pequeño, ya sabía a dónde iríamos y me contaba sobre Batman y algunos otros súper héroes.
