𝐎𝐧𝐞-𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬 |𝐳𝐢𝐚𝐦 𝐦𝐚𝐲𝐧𝐞|

𝒑𝒂𝒑𝒊 𝒍𝒊

Liam llegó al jardín de niños con una gran sonrisa en su cara, saludo a los niños que estaban afuera haciendo sus actividades de educación física y a la maestra. Pasó derecho hasta el último salón que estaba cruzando la cancha, tocó la puerta de el y después de escuchar el “pase” la abrió.

—¡liam! —gritaron los veinte pequeños corriendo hacia él. El castaño los abrazo a uno por uno dejando besitos en sus frentes, liam se sentía aún más feliz, esos pequeños niños siempre lograban hacer que su humor fuera el mejor.

Se acercó a su madre y dejó un besito en su mejilla.
—hola, mami.

—¿cómo estás, cariño? ¿Estás listo para contarles el cuento de esta semana? —la bulla de los pequeños se hizo presente, liam rió mientras movía su cabeza de arriba abajo.

—estoy listo. —dejó su mochila encima del escritorio de su mamá, sacó “el gigante egoísta” para después jalar uno de las sillas que estaba de más y sentarse. —presten atención y recuerden no interrumpir.

—sí, papi li. —el rostro de liam se sonrojo al escuchar el apodo con el cual lo llamaban, sin esperar más comenzó.

[...]

—Mantén el amor en tu corazón, una vida sin él es como un jardín sin sol… ¿qué entendieron? —preguntó una vez que terminó.

—¡yo, yo! —alzó su mano Ana mientras brincaba en su asiento. Liam asintió y la niña se levantó. —trata de que un gigante en su jardín al cual lo visitaban unos niños y que ellos hacían feliz al jardín. Un día llegó el gigante y los sacó de ahí porque era su casa, puso un letrero que no recuerdo que decía, y puso un muro por el cual no podían pasar los niños. Y ese jardín siempre estaba en invierno, había mucha nieve y escarcha, y cuando salió una vez una flor se volvió a esconder porque no había niños. Una vez los niños por un hoyo lograron entrar al jardín y volvieron a hacer feliz al jardín. Y el gigante se dio cuenta de que ellos lo hacían feliz y con un marro tumbó el muro y cambió el letrero por uno mejor, fin. —sus compañeros aplaudieron al igual que liam y su madre.

—muy bien, gracias por ese resumen, cariño, ahora, ¿qué entendiste?

—qué no debemos ser egoístas con las cosas. — habló la niña sonrojada, liam asintió.

—recuerden, los personajes a los cuales los hacen ver como malos no siempre son los malos porqué así lo quieren, siempre detrás de cada acto hay un por qué. —los niños dijeron que sí. Liam se levantó de su asiento y le dio una de las paletas que cargaba consigo a Ana.

Los otros niños hicieron carita triste al no recibir dulce, pero liam les dijo que todos tendrían oportunidad de ganar un dulce si terminaban a tiempo su dibujo. Eso los motivo y en menos de diez minutos los niños ya estaban formando fila para ser revisados.

El tiempo pasó rápido y la hora de salida llegó, mientras su madre terminaba de revisar unos papeles que le habían mandado de dirección, él estaba a cargo de entregarle a los padres sus hijos.

—nos vemos, papi li —se despidió Lucio sacudiendo su manito, liam le sonrío e hizo lo mismo.

Notó que Safaa estaba al final del salón tratando de acomodar su cabello con un pequeño puchero en su carita, se acercó sin perder de vista a los otros niños que jugaban con los juguetes de los estantes, se posicionó detrás de ella, retiró sus manos y con el cepillo comenzó a peinarlo.

—gracias, papi li —dijo la pequeña niña cuando liam terminó de hacerle las dos coletas con las cuales había llegado.

–cuando necesites ayuda puedes acudir a mí, bebé. —dijo terminando de acomodar los moñitos en su cabello.

—me gustaría poder acudir a ti cuando también lo necesite. —dio un brinco en su lugar al escuchar una voz gruesa detrás de él.

—¡zee, hermanito! —grito la niña abrazando a su hermano.

Liam se dio media vuelta y su respiración se entre cortó al ver a semejante hombre frente suyo. No podía creer que el mismo zayn malik estuviera delante suyo sonriendo en su dirección abrazando a una de las alumnas de su madre.

Espera, ¿hermanito?

—¿son hermanos? —la pequeña niña asintió.

—es mi hermanito mayor, ¿a poco no es muy bonito? —achicó sus ojitos en dirección a él mientras envolvía su mano con la del hombre alto.

Liam se sonrojo y prefirió no responder aquello.

—así que papi li, eh —mordió su labio mirándolo de arriba abajo. Se acercó hasta estar más cerca de él sin soltar la mano de la pequeña la cual estaba boba mirando a sus compañeros. —tienes más cuerpo de muerde almohadas, cariño. —susurró en su oído. Las piernas de liam parecían de gelatina y creía que en cualquier momento podría azotar en el piso.

—yo–

—Calma, amor, no tengo problemas en mostrarte lo rico que se sentirá ser el que este debajo, o podría ser arriba depende de la posición que más te guste. –su hermana soltó su mano corriendo hacia los demás niños. Una de las manos del moreno subió hasta la cintura del castaño. —ya sabes, cada día podríamos intentar algo nuevo para no aburrirnos.

Liam estaba sorprendido, fuera de sí, sonrojado y lubricado. Un solo toque y esas palabras fueron más que suficientes para tener a liam a los pies de malik.

El rostro de liam cambió a uno asustado, zayn rió, depósito un besito en su cuello para después alejarse.
—mañana búscame en el receso, cariño, te daré una probadita de todo lo que tendrás a mí lado. —sin decir más tomó la lonchera de la pequeña, fue por ella y salió no sin antes guiñarle un ojo a nuestro castaño, el cual seguía sin poder creer lo que había pasado.

Miró a su madre con su boquita en forma de O, ella solo lo miró con una ceja alzada para después reír.
—cara de pasiva. —dijo, el rostro de liam se calentó y se tiro a la silla tapando su rostro.

¡Él no era pasivo!

Pero iría con él mañana, solo para confirmar...

[...]

Trate de terminarlo lo más pronto posible ya que SerranistaSiempre quiso saber más de cómo se conocieron ellos y pueh aquí está.

Les recomiendo que lean “el gigante egoísta” porque lo ame. También “Macario” porque madre santa, es tan genial e impactante. [gracias a mi maestro de literatura por leerlo para mí y mis compañeros]

Los amo, son tan lindos.

muchas gracias por leer, votar y comentar <3