cabello

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Un día, en el templo aire de Ciudad República Aang hablaba con uno de los acólitos del aire.

-Perdone la pregunta,pero... Si el niño es maestro aire ¿Por qué no ha empezado a ser más riguroso con las tradiciones? — el hombre miró un segundo a los gemelos de casi seis años que jugaban y reían —¿como el aspecto del pelo?, el niño lo llevaba muy largo.

Eso era cierto, Tenzin tenía el cabello tan largo como Izumi; un poco más abajo de los hombros. Los dos iban vestidos con la ropa típica de la realeza de la Nacion del Fuego incluso llevaban el cabello recogido.

—Es una larga historia, lo intente hace casi un año... eso de cortarle el cabello y que cambiara un poco de ropa.

Aang recordó que un par de días después de saber que Tenzin era un maestro aire, cuando decidio empezar a enseñarle de su cultura y tradiciones. Empezó tratando de darle la ropa de un maestro aire, cosa que no tenía muy cómodo al niño aunque el traje le  permitiera moverse mejor.

Luego fue con algo más grande, el cabello; solo lo cortaría a la altura de sus mejillas, Aamg sabia que podía sentirse incómodo totalmente rapado. Tenzin estaba algo confundido pero no se quejó cuando vio el resultado, hasta parecia feliz.

Nada parecía haber cambiado realmente,los gemelos aún jugaban todo el día y siempre iban juntos a todos lados, sin embargo algunos sirvientes agradecían en silencio el cambio que había tenido Tenzin, ya podían diferenciarlos y no se la pasaban todo el tiempo bromas tontas fingiendo ser el otro  preguntándoles a todos si los diferenciaban.

Sin embargo cierto día que los niños estaban más silenciosos que de costumbre, se encerraron en su cuarto de juegos y solo salieron para ver a su mamá.

—¿Quien es quien? —gritaron al mismo tiempo frente a Aang, quien casi se desmaya.

No podía decir muy bien quién era Izumi y quien Tenzin, los dos ahora tenían el mismo corte de cabello aunque uno llevaba la ropa de maestro aire, volvían a ser iguales.

—¿Por que lo hicieron? —grito casi enojado —¿por que le cortaste el cabello a Izumi? —miro al que iba con su tradicional ropa de principe.

—Yo... soy Izumi.

—Eso ... ya lo sabía, no debieron tomar tijeras, es peligroso.

—Perdón —dijeron los niños al mismo tiempo.

—Es que somos gemelos y los gemelos son iguales —dijo Tenzin sin levantar la mirada

—Siempre son iguales.

—No los hará menos gemelos un corte de pelo o la ropa, tienen la misma cara.

—Pero así nos gusta.

—Izumi no pueden hacer eso.

—Pero, cuando seamos grandes ya no podremos ser iguales... yo tendré el cabello muy largo y Tenzin no tendrá cabello.

—Queremos ser iguales al menos ahora.

—Les propongo algo —a aang se le ocurrió algo luego de ver la carita triste de los niños — ustedes pueden ser todo lo iguales que quieran, incluso la ropa pero solo hasta que Tenzin obtenga sus tatuajes, ¿esta bien?

Los niños asintieron energéticamente y fueron a cortarle bien el cabello a Izumi, volverían a ser iguales.

—Por eso, no volveré a cortarle el cabello, al menos no en unos años... ella sería capaz de raparse la cabeza para seguir con sus bromas —termino de contar Aang casi decepcionado de si mismo. Volvió a ver a los niños que seguían jugando a veces usando sus poderes.

El hombre junto a él se río un poco de la curiosa historia, pero en el fondo Aang estaba aliviado que el descubrimiento de sus poderes no hubiera separado a los niños, parecía que los había unido más.

Una familia peculiarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora