Capitulo 18

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-Vamos al bar de Kik – Decía Minerva del otro lado del teléfono, enérgica y entusiasta, como siempre.

-¿Conoces a Kik? - Pregunté sorprendida.

-Aguarda... ¿Tu conoces a Kik? Lo estarás confundiendo.

-¿Es el dueño del bar con billar no?

-¡Si! ¿Como lo sabías? No puede ser... nunca te he llevado, es mas, nunca he ido. A el lo conozco de fiestas, pero jamás puse un pie allí.

-Un día fui con Suga.

-Hay muchas cosas que me ocultas Joy, hoy tendrás que ponerme al día, o yo misma tendré que ponerme al día ya que el también irá.

-¿En serio? - Sonreí como una niña y comencé a dar pataditas de alegría en el aire mientras estaba recostada. Tenía verdaderas ganas de verlo. Me sorprendí de mi comportamiento.

-¿A que hora será?

-A las diez, te pasaré a buscar con Jimin.

-¡Está bien! Iré a prepararme.

Luego de cortar corrí hacia mi armario ¿Que rayos planeaba usar?

Comencé una revolución en mi cuarto, poco a poco dejó de verse el color del piso, solo había prendas de todos colores cubriéndolo. Sobre mi cama había dejado una gran variedad de perfumes ¿Cual le gustará mas?

-Debo pensar como el – Dije concentrándome mientras olía cada una de las fragancias. Me decidí por uno que llevaba un elegante frasco color negro con letras doradas que decían ''Wild'' ¿Algo predecible no?

Escogí las prendas nocturnas mas atrevidas que encontré en mi pudoroso ropero, aunque no era tanto, llevaba unos tejanos negros rotos en lineas horizontales a lo largo de toda la pierna y una camiseta gris abierta por los lados.

En el mismo instante que terminé de maquillarme pude oír la bocina auto de Jimin. Corrí hacia la puerta principal y entré al mismo. Dentro pude notar que la chatarra continuaba en los asientos de atrás y el motor hacía un increíble ruido molesto.

-¡Hola! - Dije apenas me senté detrás.

-¡Joy! Espero que ya hayas aprendido a jugar al billar. - Respondió Jimin.

-Se jugar, pero eso no quiere decir que sea buena en eso.

-¿Billar? ¿Ustedes jugaron al billar? - Minerva volteó desde el asiento del acompañante para observarme. Asentí con la cabeza.

-Si, la vez que fui con Suga.

-Ah... Cierto... Vaya Joy, creí que eras un saltamontes pero acabaste siendo todo un tigre.

-¿Eso es un cumplido?

-¡Claro que si!

Jimin condujo hasta el bar. Desde fuera retumbaba la música y las calles estaban totalmente vacías. La tenue iluminación de los escasos postes de luz alumbraban vagamente. Frente al Bar, en la calle paralela a este, pude reconocer el lugar en dónde fui a reparar mi computadora ¿Así que por esto aquel día me encontré casualmente con Hoseok a la salida?

Al entrar pude divisar a Suga frente a la mesa de billar con un taco en la mano.

-¡Comenzaron a jugar sin mi! Eigsh... Estos bastardos – Dijo Jimin incorporándose mientras despeinaba a Kik.

-Joy, no sabía que vendrías. - Suga me dirigió la mirada inmediatamente. Le dirigí una sonrisa.

-¿Pedimos algo para beber? - Preguntó Minerva acercándose a la mesa de billar mientras estiraba el brazo para tomar un taco.

Los opuestos se atraen, las almas gemelas se unen | BTS J-HOPE / SUGA |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora