-Entiendes que como vicepresidente estarás a cargo ¿no?-. Hashirama se dirigió al otro Senju. Este asintió y empezó a buscar las llaves de su auto.
-Lo entiendo Nii-san-. Respondió y ambos siguieron caminando hacia el estacionamiento.
-No quiero regresar, y tener demandas porque no concuerdas con otras empresas, y las agredes-.Hashirama lo miraba con cautela. Aunque confiaba en el, ya que no era la primera vez que se quedaba a cargo, desde que conoció a Indra se escapa del trabajo siempre. No es como si el no lo hiciese, ¡Pero el era su propio jefe. No se podía auto regañar! Además, no lo hace tan a menudo. Bueno, cuando se trata de Madara es diferente. Aún así, no quería regresar, y ver como la empresa esta vuelta un caos. -Además, tus escapaditas con Indra, deberán disminuir... al menos por esta semana.
-No demandas, Indra a mi oficina-. Ashura suspiró, pensando en lo cansado que era ser una persona, tan, tan responsable. -Si yo no puedo ir con Indra, el puede venir a mí. Además, no es muy diferente a tus innumerables escapadas con Madara, hablando de ustedes... ¿Sabias que él ascensor tiene cámaras de seguridad, no? Digo, eres el jefe, tu más que nadie debería de saberlo.
Mierda, pensó Hashirama. Empezando a sonrojarse. Que demonios, se olvidó por completo de eliminar todas las filmaciones de las cámaras del ascensor.
-Como soy un buen hermano menor y buen vicepresidente, lo borre por ti... Pero no pude evitar que él guardia las viera, después de todo el me aviso-. Ashura suspiró. Hashirama era como un animal salvaje cuando se trataba de Madara, sin duda. -Créeme, que te llamen a las seis de la mañana, para darte el informe sobre cómo alguien apretó el botón de emergencia para un rapidin, y que cuando veas el video, tu hermano sea el personaje principal del porno, no es una buena manera de comenzar la mañana. Si tu oficina es insonorizada, ¿Por qué hacerlo en un ascensor?
-¡Ya cállate, estaba caliente!-. Su rostro y orejas se sentían tan calientes, su hermano menor lo vio, follandose a su novio contra la pared de un ascensor... Si Madara se enteraba... Oh, si su Madara se enteraba... Ahogo un gemido de tan solo imaginarlo. Casi, teniendo una erección de tan solo pensarlo. ¡No, no es momento! Se dijo a sí mismo. Arrojó rápido lejos de su mente cualquier tipo de pensamiento inapropiado. Pero si lo vuelve a pensar bien... tal vez sea buena idea que se entere... Hashirama sacudió su cabeza, tratando de concentrarse en lo que estaba diciendo Ashura. Que masoquista soy, pensó. -¿Ehh, qué dijiste?
-Eres la persona más atenta que conozco Hashirama, de verdad-. Hablo con notable sarcasmo. -Como te decía, Indra me llamó, debo irme. Nos vemos la otra semana.
-¿No te verías con mamá hoy?-. Pregunto Hashirama. -¿No fue lo que dijiste en la mañana?
-Sí, y luego me canceló. Mi propia madre me dejó medio plantado-. Ashura puso una mano en su pecho, dramáticamente. -Dijo que fuese por ella en la noche, esta con Madara-. Hashirama detuvo abruptamente su caminar. ¿Está era la razón, por la que Madara, pospuso su comida juntos? -¿Mi Madara y mamá?
-Si, deben estar conspirando en tu contra...- Ashura encogió sus hombros mientras cerraba sus ojos. -Ya sabes, suegra y nuero... Deben estar hablando de ti en este mismo momento, tal vez mamá le esté contando cosas vergonzosas sobre ti. Qué lástima... -. Hashirama palideció, suficiente era que su madre le enviara las fotos más vergonzosas de él, cuando era niño. No se, ¿No le pudo enviar unas mejores?... Aunque, de igual manera, él siempre era lindo. Claro.
-Bien Nii-san, como dije, tengo que irme. Debo preguntarle algo importante a Indra. Nos vemos en la junta con mi cuñado-. Decirle cuñado a Toneri, le pareció tan divertido, que no pudo evitar soltar una carcajada. Se preguntó, que pasaría si se lo dijese de frente al Otsutsuki. De seguro le escupe en la cara. Volvió a reír de tan sólo imaginarlo.