One shot - Ben Hardy

Broken heart 💔

Mis ojos se cristalizaban más cada vez que mi dedo se deslizaba por la pantalla leyendo todos los mensajes. 

Nunca fui capaz de revisar el teléfono de ninguna de mis parejas pero un instinto me decía que debía revisar el de Ben.

Se hablaba con una tal "Markie", los mensajes confirman uno de mis más grandes miedos; ya no ser suficiente para alguien.

"Deberíamos vernos esta noche"

                     "No puedo, Ariana está en casa🙄"

"¿Mañana?"

                 "Mañana a la tarde, paso a buscarte"

"Ya ansió verte, extraño sentirte en mi"

Jamás creí a Ben capaz de hacerte esto. Pensé que estábamos bien. Pensé que aún me amaba.

Deje su teléfono en el lugar anterior observándolo dormir. Duele pensar en que mi más grande amor tuvo que buscar otra persona para satisfacerse.

— Te odio y te amo Benjamin.

Me levanté de la cama sin hacer un solo ruido y comencé a empacar mis cosas ¿que sentido tiene quedarme en su departamento si él está con otra?

Empaque las pocas cosas que tenia en su closet, mis productos de aseo y luego bajo hacia la sala de estar.

— Hey — susurré al ver que Frankie despertó y se acercó moviendo su cola — te extrañare.

Agarré un papel blanco y un lápiz.

            "No me busques, sé feliz con ella."

Limpie mis lágrimas y deje la nota en la isla en medio de la cocina. Mi teléfono indicaban las dos de la madrugada.

— Pórtate bien pequeña, te extrañaré más que nada — deje un beso en la frente de la perrita y salí del departamento.

Fue difícil conseguir un taxi a esas horas pero finalmente me derrumbé en la habitación de mi departamento.

Me senté en el borde de la ventana y mire a las estrellas.

— Comienzo a creer que mi destino es no tener novio ¿es ese mi destino? ¿pueden darme una señal? Estoy cansada de enamorarme de chicos que no me ven suficiente para ellos.

Suspiré, estoy loca por hablar con las estrellas.

— Solo quiero tener a alguien que me ame.

Mi teléfono comenzó a sonar anunciando una llamada entrante. "Benny" aparecía en la pantalla pero no contesté, solo deje que sonara.

Regrese a mi cama y observe el techo, recuerdo que Ben me ayudó a pintar la Mona Lisa ahí. Una de mis obras preferidas.

Los minutos pasaban y silenciosas lágrimas caían a los costados de mis ojos. Ben fue el único de mis novios al que pude decirle "te amo", los otros también me engañaron pero no me dolió tanto como con Ben. Él... era el amor de mi vida. Es la persona con la que creí que pasaría toda mi vida y formaríamos una familia. Me equivoqué.

La puerta de mi departamento comenzó a sonar, me levanté, limpie mis lágrimas y salí a mirar por el agujero de la puerta quien era.

Ben se encontraba del otro lado aún con el pijama puesto. Se lo veía preocupado, su mirada hacia todos lados y mordiendo sus uñas.

Debatí por unos segundos si atenderlo, luego de uno de los segundos más largos de mi vida decidí atenderlo.

— ¿Qué? — pregunté tratando de no hacer contacto con sus ojos.

— ¿Por qué te fuiste del departamento? ¿Y que carajos significa esa nota en la cocina?

— No te hagas el idiota, Benjamín. Leí tu conversación don Markie.

Tragó saliva — ¿Markie?

— Si, ya sabes, la chica con la que tienes encuentros.

— No la conozco — miró hacia otro lado y pasó sus manos por el costado de su pantalón, sé cuando miente.

— No quiero pelear Ben, estoy cansada. Solo... ve y se feliz con ella, no te preocupes por mi.

— Pero no quiero ser feliz con ella, quiero serlo contigo.

Reí sin ganas — Eso quedó muy claro en los mensajes.

— Lo lamento ¿okey? no debí hablar con ella ni dejarme seducir, te amo a ti, quiero mi futuro a tu lado, formar una familia juntos. No la quiero a ella, te quiero a ti.

— Ben ¿Crees que puedo ser tan idiota de perdonarte algo como esto? Llevabas meses hablando con ella ¡meses! En el momento en que comencé a ser insuficiente para ti ¿por qué no me dejaste? ¿Por qué dejaste que sufra por ti? ¿Tan mal estábamos? Pensé que estaba haciendo bien todo.

— Te amo Ariana, no quiero a otra persona en mi vida, siempre fuiste suficiente para mi y más, yo nunca fui suficiente para ti — miró al suelo — no sé qué pasaba por mi mente cuando me relacioné con esa... chica. Pero no me dejes, por favor, no soy nadie sin ti.

Negué — Adiós, Ben. Fue un gusto coincidir contigo en esta vida.

Cerré la puerta escuchando los gritos entrecortados de Ben pidiendo que lo perdone. No puedo perdonar una infidelidad de meses. Llevará tiempo sanarme pero primero estoy yo.