-Golpeas como chica.
-Soy una chica.
Le lanzo algunos puñetazos en el estómago, se queda sin aire pero aún conserva la sonrisa, lo que me hace querer golpearlo más fuerte para que no sea tan engreído.
-Eso sí me dolió.
-Que bien.
Está vez él me golpea, me desestabiliza un poco pero no es suficiente para hacerme caer al suelo, se necesita más que eso.
-Veo que vas en serio.
Ahora yo sonrío -Siempre voy en serio, Zombi.
Cuando terminamos nos alejamos un poco del resto. Hoy nos tocaba combate cuerpo a cuerpo con otros dos pelotones, y el pelotón de Ben era uno de ellos.
Por lo general no nos mezclamos para estas cosas, por el puntaje y eso, pero a nosotros nos falta un soldado y en el pelotón de Ben hay una niña demasiado pequeña como para practicar este tipo de lucha, así que Ben y yo aprovechamos para estar juntos. Lo que tal vez no fue la mejor idea ya que él se pasa todo el rato haciendo bromas y se lleva varios regaños de su Sargento. Incluso Vosch voltea a vernos un par de veces, lo que no me gusta, su mirada gélida me incomoda.
Vosch. El Comandanate Vosch. Me parece extraño, se ha estado pareciendo en la mayoría de los entrenamientos de mi pelotón estos últimos días.
Walker nos ha estado presionando más, nos obligó a practicar tiro hasta que nos sangraron los dedos. Literalmente. Aunque me cueste aceptarlo, parece que su método funciona, veo que mis dianas han mejorado con los días. Ocho de diez, justo en el centro.
Y en cuanto al combate, no he mejorado tanto como me gustaría. Es aún más evidente cuando el combate al final lo gana Ben. En mi defensa, él es más grande y fuerte que yo. Aunque me cuesta esquivarlos, me aprendo un poco sus movimientos. Estoy segura de que la próxima vez no le será tan fácil derrotarme.
-Eres fuerte- me dice.
-Tú también.
-Lo sé- vuelve a poner esa expresión de superioridad. Recuerdo que les gustaba bastante a las chicas de la escuela, y para qué mentir, yo odiaba eso. -Pero ya, hablando en serio casi me ganas.
Niego con la cabeza –No, no es cierto. Pero la próxima te costará más trabajo, te lo aseguro.
Nos quedamos en silencio un momento -¿Qué harás después?- me pregunta, lo miro pero él está observando el resto del entrenamiento.
-Tal vez vaya al cine, o a tomar un helado al centro comercial, no lo sé, aún no me decido.
Me sacude el cabello, que se me ha escapado de la coleta alta que me hice para el entrenamiento –Que lista eres.
Me encojo de hombros. –Walker quiere que limpiemos las duchas, nos repitió el turno porque encontró una envoltura de chocolate en la basura de nuestro barracón- le contesto, y aprovecho para beber un poco de agua.
Asiente. -Hay un puesto de vigilancia que casi nunca se usa, justo detrás de la zona de los barracones. Nos vemos allí, esta tarde. Te estaré esperando.
Siento algo extraño en el estómago, seguro bebí muy rápido -Si, está bien- le digo.
As me hace señas para que la siga, ya todos han terminado y están por retirarse -Ya debes irte, Liv. Nos vemos más tarde.
-Claro.
Me alejo de él y empiezo a caminar hacia donde está el resto de mi pelotón, pero de repente está a mi lado nuevamente y oigo que me susurra -¡Es una cita!
Me volteo lo más rápido que puedo pero él ya se ha alejado y camina de regreso con sus compañeros de pelotón.
-Tenemos que hablar- me dice As una vez terminamos de almorzar. La comida es horrorosa como siempre, pero me la trago sin quejarme ya que podré encontrarme con Ben. Me siento nerviosa, incómoda. Cita. Hace tiempo que no pensaba en esa palabra.
-¿Tiene que ser ahora?- le pregunto.
Ella asiente algo molesta -¡Sí! ¡Tú, muévete!- le dice a Jefferson, él la observa entre sorprendido y molesto, pero obedece en silencio y se cambia de lugar.
As se sienta a mi lado, no me mira y mueve sus dedos impulsivamente. Diría que está algo nerviosa, pero ese pensamiento se esfuma de mi cabeza en cuanto veo su rostro serio -Sobre esa chica conocida tuya, el otro día, cuando nos tocaba PyE...
-Sí, Maya. ¿Qué sucede con ella? - se me revuelve el estómago, suelto el tenedor que estaba sosteniendo.
-Hablé con uno de los chicos del pelotón 29, eran los que se encargaban de transportar los cadáveres aquél día junto a nosotros, y le pregunté acerca de ella.
Se me tensan todos los músculos del cuerpo -¿Te dijo cómo murió?
-Sí.
Observo a nuestros compañeros, nadie nos presta atención.
-¿Y bien? -pregunto ya que se queda en silencio.
Ella suspira -Te lo diré si prometes no perder el control, llorar, vomitar o algo parecido.
Ruedo los ojos pero asiento impaciente –No lo haré, ahora dime.
- Murió de un balazo en el pecho. Tenía un pulmón perforado, así que probablemente se asfixió cuando se llenaron de sangre y...
-Sí, entendí, gracias- digo levantando un poco el tono de voz, siento una opresión en el pecho. Debo mantener la mente fría -Tú crees que...
-¿Que fue un Silenciador?- pregunta en un susurro -No, no lo creo. Un Silenciador no le daría en el pecho, si no a puntos vitales como la cabeza, la nuca, el corazón, tal vez una pierna... El pecho, aunque es un lugar expuesto y vulnerable, no sería demasiado eficaz porque podría pasar lo que le pasó a ella, y además ¿con qué motivo perderían el tiempo haciendo sufrir a una pobre chica?
-Pudo haber errado el disparo, o tal vez fue alguien del campo de refugiados que estaba con ella.
As levanta una ceja -¿Por qué el cuerpo estaría aquí sí podrían haberla dejado allí mismo?
-No lo sé- me empiezo a molestar. No estamos llegando a nada.
Suspiro, siento que mi cabeza empieza a latir y sé que pronto tendré una jaqueca.
-¿Entonces qué piensas? -pregunta finalmente.
Niego con la cabeza -¿En serio quieres saber?
Ella me ignora -Creo que hay algo más en todo esto, y no solo me refiero a esa chica, si no aquí- hace un ademán señalando todo el lugar -. Nos ocultan cosas, todo es demasiado sospechoso. Y no me veas así, sé que piensas igual, si no fuera así no estaríamos hablando justo ahora.
Niego con la cabeza -¿Te estás volviendo Dorothy, As?
-Dispárame si es así, pero no, no me estoy volviendo Dorothy.
No volvemos a hablar. Cuando todos terminamos de comer, veo que Jefferson nos observa pero aparta la vista cuando se da cuenta.
Después de eso nos levantamos y salimos del Rancho.
Pero lo que no he notado, en realidad nadie lo ha hecho, es la fría mirada de Vosch fija en nosotras durante toda la hora de la comida.
ESTÁS LEYENDO
La Quinta Ola - El Inicio (Ben Parish)
FanfictionLa Quinta Ola - El Incio "Los Otros nos crearon, y lo van a lamentar" ... El mundo funcionaba como siempre, normal. Hasta que los otros llegaron, y lo cambiaron todo. ESTA OBRA ES UN FAN FIC DE "LA QUINTA OLA"...