Mi Esposa, Mi Obsesión... (Terminada)

capítulo 18

Maximiliano en multimedia.

Narrador:

Maximiliano llegó rápidamente a la empresa y subió velozmente a la oficina de Donna, iba con furia en su cuerpo, no iba a permitir que su esposa le fuera a ver la cara y menos a ponerle los cuernos, pensó para si mismo, cómo es posible que ya no deseé estar con ninguna otra mujer y todo desde que vio  Donna por primera vez en la reunión de la empresa?
Y ella lo ignore y no quiera estar con él? Muchas mujeres matarían por estar en el lugar de ella y ésta se atreve a rechazarlo?

Maximiliano llegó muy silencioso tratando de atrapar infraganti a su esposa,  y escuchando sólo temas de oficina y del proyecto de publicidad trató de calmarse, pero cuando iba a entar vio claramente cuando el asistente personal de su esposa le ofrecía una vaso con agua muy amablemente y con cara de ternura, máximo apretó sus puños por los celos posesivos que sintió y rápidamente entró sin tocar la puerta, bruscamente se dirigió a Donna reclamandole las excesivas atenciones del asistente y con una voz agresiva le exigió salir de la oficina.
Donnatella no podia creer lo grosero e impulsivo que era Maximiliano, al reaccionar ella lo confrontó para hacerle ver el ridículo comportamiento.

-- se puede saber que rayos te ocurre?
Cómo te atreves a armar éste espectáculo y a correr de la oficina a vincent?
Ahora si te interesa saber que hago? Ahora si quieres estar conmigo? Ahora si te acuerdas que tienes esposa?
Donnatella explotó, ya no soportaba los comportamientos y celos de un hombre que no la respetaba y le había hecho tantos desplantes, lo miró y respiró para calmarse, y le pidió amablemente que se fuera para la casa que luego ella iría para hablar las cosas y poner reglas en ése matrimonio.

Maximiliano sintió una gran vergüenza por las palabras de su esposa, bajó la cabeza y asintió lo que ella le dijo, y antes de salir la miró con cara de arrepentimiento y le dijo..

-- lo siento, te voy a esperar en nuestra casa.

Donnatella se sentía extraña cuando él la miró así y esta respondió, -- está bien, esperame en el lobby y vamos juntos.

Maximiliano abrió sus enormes y hermosos ojos y con una sonrisa le respondió sí.
Realmente máximo no podía creer que fuera a rogarle a una mujer y a obedecer a las palabras de una mujer, pensaba para si mismo...

Donnatella que me pasa contigo?!!

********************

Regresaron a su casa sin decir ninguna palabra ninguno de los dos, y decidieron reunirse en un restaurante al día siguiente para poner orden a su matrimonio, sabian perfectamente que ellos los obligaron a casarse y no había amor de por medio,  pero tenían que calmar sus diferencias y tratar de conciliar en la relación, al menos intentar por empezar a ser amigos.

Al día siguiente, llegada la hora de la cena, juntos salieron al restaurante y por supuesto cada uno se vistió de una manera en que normalmente no van a la oficina.

Donnatella en multimedia.

Cuándo Donna bajaba las escaleras, Maximiliano quedó embobado con su esposa, realmente con cualquier vestimenta era exquisita y una maravilla ante sus ojos, definitivamente ésta mujer es mía y nadie me la va a quitar... pensó máximo.

Donna por su parte vio disimuladamente a su esposo y le encantaba lo sensual y varonil que se veía así, casual y tan imponente.
Ella no podía creer que pensaba así de él, y sintió muchos nervios cuando él la miró como si quisiera devorarla, automáticamente sintió algo extraño en su cuerpo cuando él le hablaba.
Donna aclaró su garganta para salir del momento de idiotez aguda que estaba sintiendo por Maximiliano. Y éste a su vez reaccionó y trató de pasar relajado al ver que tenía tan cerca a Donna, le invitó a salir para dirigirse al auto y tomar rumbo al restaurante, el cual ya tenían reservado mesa muy privada y romántica.
Maximiliano quería empezar por demostrarle a Donna que quería empezar nuevamente y perdirle perdón y una oportunidad para su matrimonio.

Se merecen una oportunidad?
Maximiliano la merece???

Continuará...