Vida de Una Chica no tan Común

40- Skyler y Bailey

Pov Bailey

Sin poder evitarlo me adentro en la habitación, Skyler sigue sin decir una palabra, mirándome fijamente, y yo por algún motivo siento que no debo irme, algo me incita a quedarme, tal vez deba hacerlo, o no, quizá sólo me estoy desubicando por completo, Ethan me da la mano y tomo el brazo entero, no debería entrometerme tanto. Estoy pronta para irme, pero mi cuerpo sigue estático mirándola fijamente.

—Sé que te irás, no tienes que hacerlo— me sorprende oír su voz, tan delicada, y suena tan vacía— ¿Quién eres? Sé qué hay más gente abajo, nadie suele pasar por aquí, no en reuniones.

—Yo soy...— ¿debería decirle quién soy? ¿Y si eso le afecta?— Soy Bailey— me presento.

—Bailey... suena bonita su pronunciación, no eres de aquí— no es pregunta, lo está afirmando— ¿Siempre eres así de callada? Dime quien eres, no te ves como alguien de la empresa, ¿eres la hija de algún amigo de mis padres?— curiosea con el mismo tono apagado, neutro. Yo me limito a negar.

—No soy de aquí, soy de Londres, y he venido de California— me permito responder.

—Entonces Ethan está aquí, él vive allí, es mi hermano mayor... o eso creo— la forma en que esas palabras salen de su boca, me parte el corazón.

Se ve tan pequeña, tan delicada y tan... débil. Tiene 15, y pareciera que está muerta en vida, me parte el alma porque la entiendo, a su misma edad, estaba igual, y cada persona que me veía sentía esa misma sensación que estoy sintiendo en este momento.

—Sí, de hecho... yo soy su novia, he venido con el, de visita— confieso y por más que su expresión era totalmente neutra, veo cierto destello extraño en su rostro.

—Me dejó por otra chica... creí que sería diferente esta vez— dice decepcionada.

—Te ama— pienso en voz alta y ella eleva su mirada a mi— Yo... conocí a Ethan en un mal momento, no nos llevábamos bien, el era... un idiota— genial Bailey, dile a la hermana de tu novio que el es un idiota— Y en ese entonces él estaba con una chica, la cual tampoco me caía muy bien, y entre los 3 nos llevábamos muy mal. Sigo sin saber en qué momento me involucré tanto con tu hermano y los chicos, pero mediados que lo iba haciendo, aflojaba esa idea de que era mala persona, hasta que él y yo nos involucramos demasiado, pero las cosas salieron mal al principio— confieso y ella frunce muy levemente el ceño— De repente el se fue, simplemente se fue cuando más lo necesitaba, no fue capaz de escribirme, devolverme los llamados, y los chicos pasaron todo por alto, estaba tan enojada, que decidí hacer el intento de sacarlo de mi vida. Hace... hoy, hoy me enteré el motivo de esa acción, me di cuenta de que era mucho más importante, y todo había cobrado sentido, a pesar de que ya estaba todo bien, él decidió hacerlo. Yo conocí q Ethan siendo una persona que no es realmente, una fachada que se inventó para que nadie lograra llegar a el, y yo tuve el privilegio de llegar, por eso estoy aquí. Él te ama, y no me trajo por el, ni por mi, ni siquiera nosotros, me trajo por ti, porque quería que llegara a ti.

No sé en qué momento me terminé acercando a la cama, estamos demasiado cerca, y puedo notar como unas lagrimas caen por sus pálidas mejillas.

—Es extraño, jamás lo hizo, nunca me prestó atención, y menos hablaba de mi, o si quiera conocía a sus amigos, solo a los chicos, luego... solo lo avergonzaba— susurra con cierto dolor.

—No le avergüenzas, eres todo lo que lo vuelve débil, porque sigue sintiendo culpa, y le duele creer que tú estás así a causa de el— delato— No se avergonzaría nunca...

—¿Qué sabes tú? No sabes lo que viví, ni como me siento al respecto— sube un poco más su tono de voz.

—No sé con total exactitud lo que tú viviste, pero en ti veo la chica que fui yo hace dos años, y de hecho, la que fui hace un par de meses— confieso aguantando las lágrimas y ella frunce el ceño levemente— También abusaron de mi, 2 veces, también se burlaron de mi por eso, me encerré, me cohibí, me aislé, en ambas ocasiones. Y en la segunda vez tú hermano estuvo ahí todo el tiempo, y lo estará contigo, porque te ama. Y entre nosotras, el jamás logrará entenderlo, por más ayuda que el aporte, pero entre las que sí lo hacemos, siempre sabemos que la otra podrá salir adelante— intento brindarle mi apoyo y tomo su mano entre las mías.