Dead Walkers [Calum Hood]

Dead Walkers. Seven

-¿Y cómo se llamaba tú hermano?.-Le pregunte a Calum con una voz de consuelo.

-Armin, Armin se llamaba.-Dijo fingiendo una sonrisa.-

-Qué lindo nombre.-Dije apoyando mi cabeza en su hombro.

-Sí, lo era.-Susurro.

-¿Y qué pasa si sigue vivo?.-Dije mirándolo y le sonreí.

-No lo creo, era chico, indefenso, no tenía cómo sobrevivir en un bosque, pero gracias por hacerme ver el lado positivo.-Sonrió.

-De nada.-Coloque una cara de estúpida.

-Reímos-

-Okay, tenemos que ir marchándonos, se está atardeciendo.-Dije parándome de la roca, para mirar a Calum.

-Vamos.-Dijo parándose.

-¡Hey! Inútil, nos vamos.-Le grite a Adam y me reí.

-Oye dime una vez más inútil y te tiro la lagartija.-Rio y coloco frente a mí la lagartija.

-¡Ya vota eso!.-Reímos.

Adam soltó la lagartija, y comenzamos a caminar, no sabíamos a dónde íbamos, pero a algún lado nos dirigíamos.

-Kate. ¿Te queda algo de comida?.-Preguntó Adam mientras caminaba delante de nosotros.

-Si.-reí con Calum, pude ver cómo la cara de Adam se ilumino cuando le dije que si.-Pero comeremos cuando lleguemos a un lugar seguro.-Volví a reír.

-Ouuu.-Adam me miró e hizo un puchero.

-Calum. ¿Tienes hambre?-Le pregunte mirándolo.

-Un poco.-Sonrió.-No es nada.

-Okay nos quedaremos lo más cerca posible.-Le dije.

Seguimos caminando y aún no encontrábamos ni una casa, o algo seguro para refugiarnos, Estaba muy pensativa, la historia de Calum me había quedado rondando en la cabeza, pero un gritó me hizo despejarme de todo lo que estaba pensando.

-¡AYUDA!, ¡AYUDA POR FAVOR!.-Se escuchó un gritó femenino y unos ladridos de perro.

Mire un segundo a Calum y a Adam, y comencé a correr, estos me seguían detrás, pare unos segundo saque la Katana de mi espada, haciendo que provocara un raspado ruidoso.

-¡Por favor ayúdenme!.-Gritó la chica, estaba arriba de una roca gigante, con zombis alrededor, y un perro ladrándole a los muertos.

Me acerque despacio y corte las cabezas, a uno por uno, sin dificultad.

-Gracias, gracias.-Dijo la chica bajándose de la roca.

-¿Cómo te llama?.-Le pregunte a la chica.

-Elizabeth.-Dijo tartamudeando.

Se veía agradable, era blanca, muy blanca, pelo negro, ojos celestes, eran de un color intenso, su perro era de una raza pastor alemán, al menos eso parecía. Adam lo primero que hizo fue ir a acariciar el perro.

-¿Cómo sobreviviste tanto tiempo?.-Le pregunte firme.

-Bueno. Tenía un grupo, todos murieron, fui la única que sbrevivio, y bueno mi perro.-Sonrió.

-Está bien.-Suspire.

Calum me miraba esperando que dijera que fuera con nosotros, Mire a Adam cómo estaba entreteniéndose con el perro, y sonreí.

-Muy bien, vendrás con nosotros.-Le sonreí dándome una vuelta para seguir caminando.

-¡Gracias! De verdad.-Dijo la chica caminando detrás de mí.