Dead Walkers [Calum Hood]

Dead Walkers. Seventeen

Al ver los cuerpos me tape la boca y comencé a caminar hacia atrás, cuando escucho una voz.

-No debiste haberte metido aquí.-Me hablaron por detrás.

Al instante sentí una apuñalada por el estómago, algo me hacía presión, me ardía, mire hacía mi estómago sangraba, después sentí una apuñalada por la espalda de la misma forma, me hizo caer al suelo con brutalidad.

-Esta es una de las niñitas intrusas.-Dijo un hombre.-Que tenemos aquí.-dijo quitándome la Katana.

Me costaba hablar y a la vez respirar. Apretaba mi estómago para que no sangrara pero la profundidad de la herida era muy profunda, sangre comenzo a correr por mi boca, mi mano estaba completamente roja y mi sangre ensuciaba el suelo.

-Ya mátala.-Dijo otro de los hombre que había.

Trataba de hablar pero de verdad me costaba. Uno de los hombres saco mi Katana de la vaina y la puso en frente mío. No podía luchar más, mis ojos se iban cerrando de a poco, tenía que dejar que me asesinara, no podía hacer nada más. Pero algo me salvo, dos disparos que hicieron caer a estos dos hombres. Mire para fijarme quien era. ¿Elizabeth?. Pensé. ¿Qué hace a aquí?

-Kate.-Dijo tirándose al suelo.

-¿Qué haces aquí?-Pregunte con la voz torcida.

-Sabía que saldrías, así quete perseguí.-Me dijoa brozándome para tomarme en brazos.

-No me podrás.-Dije tocando mi herida.

-A la mierda.-Dijo y me tomo en brazos.

-Elizabeth...-Susurre con la voz quebrada.

-¿Qué pasa?.-Pregunto caminando.

-Debes apresurarte, vienen más hombre.-Susurre mientras miraba la ventana.-Espera, mi Katana.-Dije mirando esta que se encontraba en el suelo.

Elizabeth le costó agacharse para recogerla, pero lo logro. Salimos por la puerta contraría donde venían los otros hombres. Corrimos buscando una salida, nos costó, pero lo logramos. La parte más compleja fueron los alambres, nos demoramos. Después de cruzarlos íbamos corriendo y los hombres comenzaron a gritar, estaban afuera y venían por nosotras.

-Mierda Elizabeth, deprisa.-Susurre.

-Hago lo que puedo.-Dijo con una voz agitada.

Al llegar a la casa podía ver cómo los demás seguían afuera. Calum al verme en brazos de Elizabeth, su cara cambió completamente de feliz a triste. Corrió hacía nosotros y se colocó al frente de Elizabeth.

-Que-Que paso.-Dijo Calum tartamudeando.

-Debemos irnos rápido, después habrá tiempo para contar trae todas las cosas de adentro y vámonos.-Dijo caminando hacia los demás.

Elizabeth se acercó a Dren, Adam, y Julliete.

-¡HERMANA!.-Grito Adam al ver la sangre que corría por mí.

-No te preocupe, estaré bien.-Dije sin fuerzas.

-Dren trae al perro, nos vamos.-Dijo Elizabeth algo agitada.

No se demoró en salir Dren con el perro, ni Calum con las mochilas. Elizabeth me paso a los brazos de Calum, pero ya era tarde los hombres nos habían visto, y venían hacia nosotros, eran tres hombres. Dren trato de depararles a los que pudieron, pero sólo le tiró a uno. Calum corría lo más que podía, mis fuerzas verdaderamente eran una mierda, me costaba moverme. Podía ver su cara de afligido, una lágrima cayo a mi rostro.

-Calum...-Susurre tratando de sacar todas mis fuerzas.

-Que pasa.-Dijo mientras corría.

-No es necesario, ya déjame aquí.-Dije adolorida.

-Olvídalo, no puedo.-Dijo mientras caía otra lágrimas más.

Estire mi mano para acariciar el rostro de Calum, le sonreí, y de a poco mis ojos comenzaron a cerrarse, mi brazo cayo. Mis fuerzas se habían acabado por completo...