Dead Walkers [Calum Hood]

Dead Walker. Eleven

Me separe lentamente de la boca de Calum, para mirarlo a los ojos.

-Eh… Calum.-Susurre.

-Coloco su mano en mi boca.-No digas nada.-Volvió a darme un delicado y corto beso.

-Ya vamos a dormir.-Le susurre.

Bajamos de la roca. Adam y Elizabeth ya estaban echados en el suelo para dormir. Calum cerca de la roca, y yo cerca de Adam. Mire a Calum que ya había cerrado los ojos, luego mire a Adam que estaba a mi lado abrazado del perro. Me pare y me dirigí donde estaba Cal, me senté a su lado haciendo que abriera los ojos, deposite un corto beso en su mejilla y apoye mi cabeza en su hombro para dormir.

Al día siguiente desperté tendida en el suelo abrazada de Calum. Parecía un verdadero niñito chico durmiendo, era adorable. Me levante para preparar algo de comer. Adam seguía dormido y Elizabeth igual. Saque unos galletones que tenía en la mochila y sodas, no nos quedaba mucha comida, tendríamos que buscar un hogar para encontrar más comida. En eso despierta Adam, haciendo quejidos.

-Kate…-Susurro Adam.

-Dime.-Le respondí.

-Tuve un mal sueño.-Dijo mirándome con los ojos entre cerrados.

-¿Qué soñaste?.-Le pregunte sentándome a su lado.

-Soñé que todos se morían, tú, Elizabeth, el perro y Calum.-Me respondió sobándose los ojos.

-No te preocupes. Todo está bien.-Dije abrazándolo.-Despierta a los demás.-Le dije besando su cabeza.

Volví hacia donde estaba la mochila, y escuche un ruido muy molestoso de las latas que estaban en los alambres, mire para atrás y un zombi trataba de pasar. Me levante y agarre la Katana, en eso todos se despertaron. Me acerque con agresividad  al zombi, agarre el resto de pelo que tenía y corte su cuello. Seguía vivo ya que no le enterré la Katana en la cabeza, pase por debajo de los alambres y enterre con brutalidad está espada en su cráneo. Me voltee para regresar de donde estaba, todos me estaban mirando. ¿Había actuado muy extraño?

-¿Qué?-Les pregunte riendo.

-Sólo me miraron un segundo y volvieron a hacer lo que estuvieran haciendo.

-Okay, queda algo de comida, saquen lo que queda.-Dije sacando un galleton y una soda.

Todos sacaron algo para comer. Me senté cerca de Calum y comencé a comer.

-Hola.-Dijo sonriendo.

-Hola.-Le respondí.

Hubo un silencio por unos momentos.

-Calum necesito saber qué fue lo de ayer.-Lo mire con una cara apenada.

-Hmm. ¿Un beso?-Hizo una mueca.

-Pero me refiero a que si tú sientes algo.-Lo mire.

-Eh no lo sé, supongo.-Dijo haciendo puchero.

-Muy bien. Apúrate en comer que ya nos vamos.-Dije algo molesta y me levante.

-Kate.-Dijo Calum para que volteara.

Seguí caminando, agarre la mochila y saque los alambres para guardarlos en la mochila. Cuando todos estábamos listos comenzamos a caminar en cualquier dirección. Adam jugaba con el perro y Elizabeth, mientras yo, bueno sólo caminaba sin tratar de dirigirle la mirada al estúpido de Calum. Me había molestado porque cómo no lo sabía, alguien no besa a otra persona si no sabe que siente. Me molestaba porque me hacía creer que estuviera jugando conmigo. Caminamos un largo rato sin. Estaba enfadada de verdad, llegaba a hablarme ese tonto lo iba a mandar a la cresta.

-Kate…-Dijo Calum caminando a mi lado.

-¿Qué quieres?-Le pregunte con una voz firme y sin mirarlo.

-¿Por qué te enfadaste?-Me pregunto.

-Cállate y no me hables.-Seguí mirando al frente.

Calum se calló y seguimos caminando en eso aparece un zombi entre los arbustos, era pequeño así que no iba hacer problema.

-No hay problema, yo me encargo.-Dije sacando la Katana de mi espalda.

Calum camino al mismo paso conmigo, miraba algo extraño al zombi. Nos acercamos más estábamos a unos metros.

-¡Espera! ¡Espera!-Me grito haciéndome parar.

-¡¿Qué HACES!?-Lo mire.

Calum miró un segundo más al zombi, se le llenaron los ojos de lágrimas cerro los ojos con fuerza y de dirigió a un árbol, golpeo con toda fuerza el tronco y volvió a mí.

-Déjamelo a mi.-Dijo dejando caer unas cuantas lágrimas.

Le pase la Katana y la tomó con firmeza se puso en frente del zombi, levanto con sus manos la Katana la sostuvo unos momentos así, volvió a cerrar los ojos y dejo caer la Katana en la cabeza. Al matarlo por completo Cal se tiró al suelo junto al muerto y coloco su cabeza en su pecho. Comenzó a llorar por unos segundos. Se levantó y tomó el cuerpo y lo dejo al lado de un árbol donde había mucho césped. Mantuvo su mirada en él y volvió hacia nosotros.

-Ten, aquí tienes.-Dijo pasándome la Katana.

-Calum ¿Estas bien?.-Le pregunte.

-Si.-Dijo tratando de hacerse el fuerte.-Ya vamos.-Dijo caminando delante de nosotros.

No había entendido nada. ¿Qué le había pasas a Cal?. Porque tanto afecto en ese muerto, si sólo era un zombi. Me había parecido raro ese comportamiento. Calum no quiso mirarme en todo el camino ni hablar, sólo seguía adelante, podía sentir cómo su cuerpo se movía por completo cómo un salto, estaba llorando, a cada segundo podía ver por detrás cómo su brazo se levantaba para pasársela por la cara. Me estaba preocupando de verdad.

-¿Qué pasa con Cal?.-Pregunto Adam caminando a mi lado.

-No lo sé Adam, No lo sé.-Le dije mientras seguía mirando al chico del frente.