Entré a gran paso dirigiéndome a mi habitación. Senti que una mano rozó ligeramente la mía y la aparte bruscamente.
- ¿Marie? - pregunto con confusión
- ¿Se te perdió algo, Draco? - dije con el ceño fruncido y mis manos en mis caderas
- ¿Te sucede algo?
- No seas idiota, que no se me olvidan las palabras que gritaste
- ¿De verdad?, con todo lo que pasamos pensé que eso había quedado atrás - dijo el acercándose y tomándome de los brazos
- Pues pensaste mal. - lo empuje hacia atrás - E-es que eres un maldito desgraciado. Y deberías hablar con alguien respecto al problema que tienes con Potter
- Que te... - se acerco nuevamente con el entrecejo fruncido
- ¡No!, ¿Que te pasa a ti?. Te atreves a insultarme con semejante osadía, sin vergüenza. - Le grité, me sentía muy dolida por lo que me había dicho en el bosque
- Yo... - levanto sus brazos para volver a tomar los míos
- No me toques. Aléjate de mí. - pero me retiré antes me gire y me fui.Entre a mi habitación y me recosté en la cama era tarde ya y no quería pensar en nada. Solo quería dormir y olvidarme por un momento de todo esto.
•¤•
- Buenos días profesora Hooch - dijeron todos los estudiantes que se encontraban en el lugar de entrenamiento. Todos teníamos a nuestro lado una escoba, -¡hilarante!, compre mi propia escoba para que al final usara una de las que están aquí-. Estabamos formados en dos filas, normalmente hubiera estado junto a Draco, pero no quise hacerlo por más infantil que se viera, solo me hice al lado de un Hufflepuff y un Gryffindor.
No pude evitar sentirme incómoda sentí unos ojos que me observaron continuamente durante la clase, esa mirada penetrante e intimidante que por momentos solía tener Malfoy. No me sorprendería saber que esta enojado por haberme alejado de él.
- Bienvenidos a la clase de vuelo, solo tengo una indicación y es que deberan estar atentos si no quieren una muerte segura - advirtió la profesora Hooch
- Ahora continuemos, todos tienen a su lado una escoba, lo que deben hacer es llamarla, decir "¡arriba escoba!" -•◇•RECUERDOS•◇•
- ¡Vamos Mary!, ¡Tu puedes! - gritaba mamá desde el cielo arriba de su escoba
- ¡No lo logró!, esto no se levanta - le respondí algo frustrada al no poder hacer que la escoba se levantara
- ¡Vamos, ten seguridad! - seguia gritando desde arriba - ¡El bebé hipogrifo se escapa!
- ¡No!, ¡Detenedlo! - me escandalice
- ¡Di, "arriba escoba"!
Cerre mis ojos y me concentre lo que más pude - ¡ARRIBA ESCOBA! ¡ARRIBA ESCOBA! ¡ARRIBA ESCOBA! - Tras pronunciar aquellas palabras la escoba se levantó hacia mi mano donde la tomé con fuerza
- Muy bien pequeña, ahora sube... - dijo mi madre con dulzura - ... aquí te espero... -
- Tengo miedo... de caer - respondí con terror, sin siquiera haberme levantado del suelo
- Ven hacia mi... no me iré de tu lado... Te lo prometo - cuando oí esas palabras me armé con un poco de valor y me monté alzando vuelo, Intentando tener equilibrio para no caer me dirigí hacia mamá.•◇•
- ¡arriba escoba! - pronuncie sin esfuerzo y la escoba enseguida voló a mi agarre. Mientras tanto seguía escuchando algunos intentos fallidos de los estudiantes que no podían hacer que su escoba subiera.
- Bien, para los que ya lo han logrado ahora monten su escoba, sin alzar vuelo. - Todos los estudiantes estaban realizando dicha acción cuando de repente un chico emprende vuelo sin autorización.
- ¡Detente ahí mismo joven! - grito la maestra
- ¡Ayuda! ¡Ayuda! - gritaba el pobre chico aterrado por la situación.
- ¡Niño, baja de ahí ahora mismo! - escandalizó la profesora Hooch, sin darle una mano al chico en aprietos
- ¡Ayuda! - Seguia gritando el chico en busca de un auxilio, no tenía control en absoluto, su escoba subía a toda velocidad las torres y las volvía a bajar daba vueltas y vueltas sin parar.
Todos observaban perplejos el panorama pero nadie se dignaba ayudar. Yo lo iba a intentar. Queria hacerlo. Solo era cuestión de imaginar que era una... un... u-una cría de dragón que volaba desenfrenado.Tome mi escoba y fui tras el chico oyendo tras de mi gritos
- ¡¿Pero que haces niña?!
Estaba subiendo nuevamente y lo alcancé con avidez
- ¡Tranquilo te ayudaré! - le dije al chico quien me miraba suplicante por querer que este mal rato terminará. Con un movimiento me acerqué a el y le tomé de la mano. El chico no muy hábil, no saltó a mi escoba sino quedo colgando, lo sostuve con mi mano izquierda mientras que con la derecha conducía mi escoba. Baje a toda prisa y puse al chico sobre el suelo. Quien exageradamente se arrodilló y le dio múltiples besos.
- ¡Casi muero, por merlín!, ¡Muchisimas gracias! -me dijo el chico con gran júbilo-
- N-no es nada, aprenderás rápido tienes... ¿potencial? - dije sonando más insegura de lo que me hubiera gustado
El chico soltó una risa - Tu misma fuiste testigo de que tengo potencial, ¡para caer! -
- vaya, no digas eso, solo necesitas práctica. Tampoco lo logré a la primera - Mentí -
- De todas formas muchas gracias, Collins Hightoph un placer
- soy Marie Scamander, un gusto -- ¡Genial niños, es todo por la clase de hoy! - dijo la profesora Hooch retirándose del lugar
- Vaya clase de hoy - dijo Collins
- Anímate, todo tiene una ventaja - dije intentando sacar algo bueno de lo sucedido
- Tienes razón - confesó Collins con mucha seguridad
- ¿La tengo?
- Si, tuve el inmenso placer de conocerte - expreso relagandome una sonrisa radiante y un profundo mirar
- De acuerdo, te veo luego, me voy... para allá - dije señalando torpemente con mis manos y tropezando un poco al salir del lugar - Adiós -.🐉DRACO 🐉
No... estoy... feliz. De haber sabido que algo así ocurriría, me hubiera aventado yo de la escoba. Ese tonto tomó la mano de ¡Mi chica!, de ¡Mi Marie!. Además de eso tiene las agallas de hablar con ella.
Se veía fantástica, voló como si fuera parte de ella, una ráfaga de fuego en medio de la claridad. Nadie debería tocarla, Ella es el fuego que mí infierno necesita.
Esto no se queda así ese chico debe aprender a conocer límites.
- ¡Hey tú! - le llamé acercándome a él
- Hola - respondió el idiota con una sonrisa
- ¿Que crees que haces?
- ¿Disculpa?
- No quiero que te le acerques a Marie, ¿Entendido?
- y tu quien eres? - Respondio el chico desafiante
- Tu peor pesadilla - dije con toda la frialdad que tenía introducida, para luego dar vuelta y alejarme🐉
Quise verme despreocupada al despedir al chico, pero estaba más tensa de lo normal, voltee mi mirada hacia donde estaba Collins, y para mi sorpresa Draco se estaba alejando de el, y el chico le apuntaba ferozmente con su varita, me apresuré a correr
- Flipe... - intento conjurar Hightoph
- ¡Protego! - le interrumpí a tiempo
Logrando que se cayera hacia atrás y que Draco volviera su vista al frente
- ¿Que sucede? - dijo el chico inocentemente
- ¡Cobarde!, no atacas a nadie por la espalda - le grite al chico para girar en dirección a Draco y pasar mi brazo por su espalda, alejándonos inmediatamente del lugar.- Draco, ¿estás bien? - le pregunté apartando mi brazo
- Lo estoy gracias a ti - dijo tomando mis manos - ¿Aún estas enojada? - levanto sus cejas
-Debo irme... - me solté de sus manos y me gire para irme
-Espera... - susurro - dime que debo hacer... para que me perdones-.
Bajé la mirada al suelo no sabia que responder
- Por que me alejas de ti... ¿Dime, qué sucede?, se supone que me proteges, pero eres distante conmigo, basta... háblame- dijo, Draco con desesperación.
No respondí nada ante ello solo me alejé, me dirigí a clase de adivinación.
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EL PEQUEÑO PRÍNCIPE-DRACO MALFOY Fanfic
De TodoMarie Scamander es una de las brujas más poderosas de la generación, junto con sus amigos vivirá muchas aventuras emocionantes donde tendrán que tomar decisiones sobre su futuro. Fragmento. Tome su hermoso rostro entre mis manos sintiendo bajo mi t...