╔Jaemin nunca creyó tener que cuidar de un lobo, que para variar era un híbrido. Su vida daría un gran giro al momento de haber dejado aquella puerta trasera abierta╗
➳ Omegaverse / M-preg
➳ Jeno ↪︎ top / Jaemin ↪︎ bottom
➳ △△△ Emplea un vocabulari...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Doyoung se la pasaba de un lado a otro organizando documentos, así como firmando otros donde aceptaba la alianza con nuevas manadas; reclutando con ayuda de Yuta a nuevos alfas y betas para formar un escuadrón más grande.
Taeyong entró a la oficina que estaba llena de papel por aquí y por allá, observando al omega peli negro caminar de un lado a otro mientras hablaba por teléfono y leía documentos en su mano izquierda.
— Si, yo le llamo, si muchas gracias por la oferta NamJoon, hasta luego— Dejó escapar un suspiro lleno de cansancio, el peli rojo sonrió y se acercó al omega.
— ¿Porqué no tomas un descanso?— Doyoung miró con sorpresa a Lee, no lo había visto ni escuchado entrar, negó sonriendo, cosa que últimamente hacía mucho cuando estaba cerca de él.— Parece como si no hubieras dormido en días, deja esos papeles aquí y vamos a comer algo, no acepto un no por respuesta.
— ¿Aceptas un golpe en la cabeza?— Ambos se miraron con seriedad antes de reír.
A Kim no le quedó más que seguir al alfa fuera de la oficina y caminar a la cocina para preparar un poco de comida.
— Tu siéntate y yo te preparo algo, soy mejor chef que tú.
— ¿Disculpa? — Taeyong rió divertido mientras arremangaba sus mangas y comenzaba a sacar los ingredientes para el platillo.
— Taeyong, ¿Puedo hacerte una pregunta?
El peli rojo miró momentáneamente al contrario, sonriendo y asintiendo, regresando su vista a la carne frente a él que cortaba con cuidado.
— ¿Porqué vienes tan seguido y te comportas tan... atento? Quiero decir, no me molesta en lo absoluto pero, bueno, tengo la curiosidad.— Doyoung miró la espalda del mayor esperando una respuesta.
— ¿Alguna vez te preguntaste el porqué Jaehyun me odiaba?— Eso había tomado completamente desprevenido al peli negro, lo pensó un poco y si, efectivamente su ex marido odiaba al de cabello rojo, lamentablemente nunca supo el porqué de tal odio.— Te conozco desde que somos unos cachorros, siempre me gustó tu compañía y determinación ante todo, lamentablemente no fui el único que pensaba así, Jaehyun comenzó a rondar con más frecuencia en la aldea después de que su padre fuera proclamado como líder, tú caíste enamorado por aquel alfa y yo me quedé con mis sentimientos guardados.
Kim no sabía que decir, había sido una declaración bastante directa, tenía sospechas sobre los sentimientos del mayor pero nunca se atrevió a preguntar.
— Y-yo-
— Pasaron los años, después de lo qué pasó con la aldea y la separación de muchos, yo fundé la mía propia junto a mis padres, sabiendo que Jaehyun había hecho lo mismo con esta aldea— Comenzó a freír la carne, sin si quiera mirar a Doyoung— Años después me enteré de su compromiso, unión y hasta que habían tenido dos hijos, estaba feliz pero a la vez herido, yo soñaba con que algún día tal vez y solo tal vez pudiera tener una oportunidad.
Kim mordía su labio, sabía a qué iba todo eso, y ahora se cuestionaba si estuvo bien el haber pregunta leo en un principio, ¿quería eso, estaba listo?
— Doyoung, sé perfectamente que no es el momento y créeme que no quería sacarlo aún por respeto— Ambos dejaron salir un suspiro, uno de ellos sonriendo mientras miraba al contrario. Taeyong terminó por dejar un momento la comida y poner su completa atención en el peli negro— Me gustaría poder cortejarte y hacerte feliz, claro que no voy a hacerlo hasta que estés listo, Jaehyun bueno, su muerte es reciente y su lazo roto y tus hijos y-yo-
Doyoung interrumpió al mayor con su risa, Taeyong miró confundido y avergonzado al contrario.
— L-lo siento — Kim tomo aire y siguió solo con una sonrisa— Solo me dió un poco de risa tu nerviosismo e inseguridad, Tae somos amigos ya y no es que no quiera solo... creo que podemos esperar un poco y posiblemente acceda a un cortejo...
Ambos sonrieron tímidamente, Lee asintió y murmuró un "Gracias", siendo un asentimiento de parte del contrario su respuesta; siguieron hablando de otros temas y terminando la comida.
⚪︎⚪︎⚪︎
— ¡Ven, Sungchan! Dios no seas como tu padre— Jaemin corría intentando alcanzar a su hijo, este corría por toda la casa intentando escapar del baño que le tocaba— ¡Jeno más te vale que salgas de donde sea que estés y te metas al baño ya!
— Papi, no vamos a salir, ¿para qué quieres que me bañe?— La risa de Jeno se escuchó desde la planta de arriba, molestando más al rubio que se acercó a Sungchan y lo cargó.— ¡No!
— Que no salgamos no quiere decir que no se bañen, Lee Jeno ven aquí ahí mismo, y tu Na Sungchan, te bañaras y te cambiarás, puedes jugar pero no excedas el tiempo que te di— El castaño puchero pero hizo caso, se quitó sus prendas y se metió en la bañera, Jeno se asomó cuidadosa y por la puerta, notando que bien su novio podría estar sacando humo por las orejas— Debes aprender a asearte solo, no aprendas de tu padre, no quiero dolor de cabeza por ahora, al menos nueve meses, nueve meses les pido de tranquilidad...
Ambos, tanto de Jeno como Sungchan mostraron una expresión de arrepentimiento, el rubio tenía mil emociones combinadas dentro de su pecho desde que se enteró del embarazo, al menos debían ayudar un poco ahora que estaba delicado, por así decirlo.
— Nana, lo siento, ve a descansar yo me encargo— El peli negro ayudó al menor a levantarse del suelo y llevarlo a la habitación, besando su frente y mejillas antes de dejarlo y regresar al baño para ayudar a su hijo.— A partir de hoy ayudaremos a tu papi sin quejarnos, ¿está bien?
— ¡Si!— Ambos chocaron puños y tomaron eso como un sello de compromiso.
Después del baño Sungchan ayudó a Jeno a preparar la cena, ensuciando todo el lugar pero logrando un delicioso platillo.
Llevaron en una bandeja tres platos de comida y tres vasos con jugo, entrando en silencio a la habitación de los mayores, encontrando a Jaemin mirar entretenido la libreta donde tenían anotados los nombres para bebé, aún no elegían concretamente uno de cada sexo.
— Trajimos al cena, espero te guste papi— Jaemin sonrió y recibió a su hijo con un abrazo, se acomodaron en la cama y cenaron tranquilos entre pláticas sobre el futuro.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.