Crimen Favorito #1 ✓ (Jimelio)

17: TODO ESTA BIEN ENTRE ELLOS

Jimena

-jimena, oye, despierta.

Mis ojos se abrieron y estaba Jessica frente a mi.

Mire la camilla de Boggi y estaba ahí.

Joder, fue un sueño.

Gracias dios por no dejarme besar a mi amigo.

-¿Que pasa?-le pregunté a Jessica mientras me levantaba.
-Ya son las 5 de la mañana pensé que te irías apenas se durmió.
-No, me quedaré con el hasta que le den el alta.
-¿Estas segura?
-Si.
-Esta bien, yo ahora tengo que irme, porque son las 5 de la mañana y debo ir a mi instituto de inglés.
-Si quieres duerme tranquila- me dijo mientras levantaba sus cosas-siempre se despierta como a las 10 de la mañana.
-Esta bien, oye te tengo una pregunta¿Que dijo el doctor sobre su estado?
-Hace un mes era raro pero dijo que era normal ya que la enfermedad esta avanzando muy rápido.
Por esa razón va a esperar a mañana para hablar con la madre de Boggi y ver si lo dan de alta pasado mañana o la otra semana.
Depende de que quiera Boggi.
Hace tiempo que no está siguiendo los tratamientos por eso está empeorando.
Pensé que quizás tu compañía lo alentaría a seguir sus tratamientos, por eso te dije.
-Estoy segura que los seguirá.
-Yo antes no lo creía posible pero supongo que contigo aquí tendrá más ganas de vivir.

Me rei y la chica se fue.

-Nos vemos Jimena.
-Adios Jessica.

Me levanté y vi a Boggi, tan perfecto y hermoso como siempre.

No Jimena, no puedes dejar que tus sueños afecten el gran vínculo que formaste con Emilio.
No lo permitas, tu eres mucho más fuerte que cualquier pensamiento.

Sin más me aleje de Boggi y me volví a recostar en la silla.

No puedo dejar que mis pensamientos pasen sobre mis decisiones.
Además, Emilio nunca me haría algo así a mi.

Emilio

Dejé mi teléfono sobre mi escritorio y no pude evitar sentirme un poco estúpido.

Prefiere a ese chico dormido antes que a mí.

Solo le pedí unos minutos para comer algo, nada más.

En fin, ni siquiera se porque me siento así, conozco a Jimena y ella nunca me engañaría.

-Emilio, ¿vamos a celebrar?- pregunto Gabriel, el padre de Jimena.
-Claro hombre, vamos.

Agarré mi móvil con mi saco y salí detrás de Gabriel.

-Hace tiempo que nadie había pedido tanta mercancía-comento el hombre a mi lado.
-Si, es verdad, hace mucho tiempo que nadie nos pedía tanto.
Por eso hay que celebrar- me rei y el también sonrió.

Llegamos abajo y cuando ví a la persona que estaba en el auto donde iríamos nosotros mi corazón se detuvo.

-¿Que hace Sofía aquí?- pregunté tratando de ser lo más amable posible.
-Ella nos consiguió al socio con el cual arreglamos el trato, me pareció lo más justo invitarla a la celebración.
-Esta bien, es lo más justo después de todo.
-Ademas pensé que te gustaría que viniera, ¿no salen juntos?
-No, yo tengo novia pero no es ella.
-Oh, perdón pensé que era ella, si quieres podemos invitar a tu novia.
-No tranquilo Gabriel, estoy bien.
Además ella está terminando la universidad y está muy ocupada.
-Entiendo, que bueno que hayas encontrado una buena chica.
Sigo esperando que Jimena haga lo mismo pero no tengo suerte, al menos termino con su novio, nunca me dió buena espina.

Solo me rei ya que no podía hacer nada más.
Después de todo no puedo decirle a Gabriel.
"Tranquilo hombre, tu hija sale conmigo".

Soy la peor persona con la cual podría estar su hija.

-Hola Sofía- saludo Gabriel a la chica sentada en el auto.
-Hola- me miró y volvió a hablar- te extrañe Emilio-una sonrisa se formó en su rostro.
-Lamento no poder decir lo mismo Sofía.

En ese momento la sonrisa se fue de su rostro.

Después de estar un rato en camino hasta nuestro lugar de celebración llegamos a un bar-karaoke.

Entramos junto a Sofía, Gabriel y otros 5 empleados a la sala de karaoke esperando a que nuestra comida estuviera lista.

-Voy al baño, ahora vengo- le avisé a Gabriel.

Salí de la sala y camine por el pasillo llego de habitaciones oscuras en las cuales había gente cantando y riendo.

Me gustaría estar aquí con Jimena.

Estaba a unos cuantos metros del baño cuando de pronto alguien me tomo del brazo.

-¿Aun sigues con esa niñita?-pregunto Sofía mientras me miraba fijo.
-No es de tu incumbencia, tuviste tu oportunidad de estar conmigo y solo querías que estuviera encerrado en tu nube de cristal.
-Si estabas todo el tiempo con mujeres ¿como no iba a querer eso.?
-Es mi trabajo, no toda la vida estuve contigo en cambio mi negocio sigue en pie.
-Esta niña sabe de qué trabajas.
-Si, su padre trabaja conmigo, así que obviamente lo sabe.
-No Emilio, sabes a lo que me refiero, ¿ella te acepta aún sabiendo en lo que trabajas realmente?
-No es tu maldito problema así que mejor vete Sofía.
-No me iré,¿Porque la prefieres a ella aún sabiendo que si se entera de la verdad nunca te aceptará?
En cambio yo desde el minuto uno te acepte, que tiene ella que no tenga yo.
-Es transparente y respeta mis decisiones.

Sofía sonrió y me miró fijo mientras tenía una risa en su rostro.

-Puede que ella sea transparente pero que haría si se entera que mientras ella está en su casita, su hermoso novio está con su ex pareja en el karaoke.
-Ella no es igual de psicópata que tú Sofía, entiéndelo de una vez.
-Lo trate de hacer por las buenas, pero al ver que no colaboras no me queda de otra, si no vuelves a desearme le diré a Gabriel que estás con su hijita, y dudo que le guste saber que su hija está con una persona como tú.
Después de todo solo nosotros dos sabemos cuál es realmente tú estúpido negocio.
-¿Solo quieres que te vuelva a follar?
-Si Emilio, solo necesito eso y dejaré de molestarte, necesito sentirte dentro mío.

Mire hacia los lados y vi que nadie venía.

Metí a Sofía dentro de la habitación de karaoke que estaba a mis espaldas y ella se sentó en los sillones que habían dentro.

-Ya follame Emilio-suplico.
-Si eso quieres ya hagámoslo.

La chica frente a mi se quitó la ropa y acercó su cuerpo hacia mí pero antes de poder tocarme me levanté y dije.

-Me das pena Sofía, te rebajas tanto hasta el punto de solo follar conmigo para que no esté con ella.
Ahora entiendo porque no sigo contigo.
Si quieres dile todo a Gabriel pero prefiero que todos sepan la verdad antes de engañar a la mujer que me robó el corazón.

Abrí la puerta y estaba apunto de salir del cuarto cuando la mire y dije.

-Pense que al menos te respetas un poco, pero al parecer me equivoqué.
-Me las pagarás Emilio.
-Esperare tu venganza.

Nota de la escritora:

Me ayudarían muchísimo votando y comentando que les pareció la historia.
Lo apreciaría mucho.
Gracias por leer mi historia y espero sigas disfrutando de "Crimen favorito"