One-Shots Supercorp

Besos accidentales

AUTOR: #sapphic_luthor
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Lena ha completado la mayor parte del proceso de edición del informe de ganancias trimestrales de L-Corp cuando su teléfono suena en el escritorio. El nombre de Kara aparece en negrita en su pantalla de bloqueo, la notificación se colocó sobre varias alertas del mercado de valores y una noticia de última hora que Lena no tiene la energía para leer en este momento. Ella vuelve a mirar el informe que tiene delante y sopesa sus opciones. Por un lado, Kara le envió un mensaje de texto en lugar de llamarla, por lo que definitivamente no es una emergencia. Por otro lado, ha estado metida hasta el cuello en este informe durante casi cinco horas, y si tiene que leer la palabra sinergia una vez más, puede presionar el botón de su reloj y pedirle personalmente a Kara que la arroje directamente al sol. .

Lena suspira, apoya la cabeza entre las manos por un momento y mira el informe entre los dedos. Está bien, razona ella. Otros 30 minutos, como máximo, y luego habré terminado con esto, y Kara puede distraerme todo lo que quiera.

Dura 42 segundos antes de alcanzar su teléfono, que, en defensa de Lena, es unos 40 segundos más de lo que normalmente tarda en leer los mensajes de texto de Kara.

Kara: Oye, algo extraño acaba de suceder.

Lena lee el mensaje rápidamente y siente que su ceja se arquea con curiosidad. El tono del texto es decididamente diferente al de Kara, y la clara falta de emojis le dice que algo debe haber sucedido. Ella responde rápidamente.

Lena: ¿Qué?

Kara: Uh

Pasa suficiente tiempo para que el dedo de Lena se mueva hacia el icono del teléfono para llamar a Kara y exigir respuestas, y luego la pantalla se ilumina con la llegada de un mensaje.

Kara: Andrea Rojas me besó

Algo afilado la atraviesa, feroz y rápido, y sus nudillos se blanquean alrededor del borde de su teléfono. Ella se levanta de repente de su silla, informe completamente olvidado, como una serie de repetidos ¿qué carajo? s juega a través de sus pensamientos.

Deja caer el teléfono sobre su escritorio y su cuerpo comienza a moverse por sí solo, tratando de distraerla de la inesperada ola de incomodidad que hizo que sus mejillas ardieran. Camina hacia el sofá, reconsidera, camina hacia las puertas del balcón, reconsidera, camina hacia el mostrador y casi se sirve un vaso de agua, reconsidera. Es en este momento que el cerebro de Lena se reorienta, algo parecido a la conciencia de sí misma comienza a regresar y se da cuenta de que está paseando por su oficina con tacones de diez centímetros que definitivamente no fueron hechos para caminar. Ella se quita los talones y apenas está empezando a pensar en cómo responderá cuando su teléfono vibra contra su escritorio nuevamente, y casi tropieza en su prisa por agarrarlo.

Kara: No me refiero a mí a mí, a Supergirl a mí, pero aún a mí. Sabes a lo que me refiero

Ella responde con el pensamiento más verdadero que puede reunir a través de su conmoción.

Lena: ¿Qué ???????????????

Lena: Kara QUÉ