Hielo vs Fuego.

278 23 19
                                    

Notas iniciales: hola a todo el mundo espero que se encuentren bien mis queridos lectores aquí un nuevo capítulo para que su día sea al fin un buen día, los leo abajo.

Hielo vs Fuego.

Maldito el día en que puso a nombre de su esposa la casa que tenían y la mayoría de sus cosas dejándolo prácticamente con la mitad de su sueldo ¡era indígnante que no pudiese comprobar las infidelidades de su mujer!  y peor aún que a pesar de que no tuvieron hijos estaba obligado a darle una pensión alimenticia porque según la “ley” ella había trabajado en su casa por más de veinte años por lo cual quedaba estipulado ante la Código Londinense que sí, su esposa adultera merecía dinero y no cualquier dinero, su maldito dinero. 

Un poco más relajado se tranquilizó, ella, su ex esposa, esa mujer que ahora le hacía la vida imposible también le brindó muchos días felices, estaba ahí cuando nadie más estaba y la amo durante muchas noches. Se contaron secretos y experiencias, tuvieron en su momento muchas cosas en común y ahora lo único que tenían en común era el divorcio, no estaba tan mal, después de todo el amor se tiene que acabar tarde que temprano y estaba bien si acababa, eso no significaba el fin del mundo para nadie además; no iba a discutir por algo tan tonto como el dinero, a pesar de las constantes atenciones del licenciado que le asignaron a su persona o las llamadas para decirle que conocía a un buen detective que podría ayudarlo para comprobar las infidelidades. Greg, simplemente ignoró todo, puesto que de haberlo querido de verdad, el demostrar que su esposa le era infiel solo tenía que llamar a Sherlock, incluso el mismo Watson se lo propuso una noche en que salieron a tomar pero este lo rechazó inmediatamente. No quería la ayuda de nadie ni la lastima de nadie, no quería nada de nadie.

No sentía nada por su esposa, era claro, pero aun así existía el recuerdo del matrimonio que siempre soñó tener, una relación tan bella como la de sus padres ¿realmente la había dejado de amar? Que pregunta tan más tonta,  como dejar de amar algo que no estabas seguro si amabas, como amar algo que te hacía tanto daño...

Se presentó después de mucho a los Juzgados familiares, al final de todo tomó una pluma y sin siquiera leer el documento firmó. No esperó nada más, no quería saber cuánto le quitarían, donde viviría, que comería, solo quería terminar con todo esto para no volver a ver a la mentira más bonita que había sido el amor.

Salió del tribunal, extendió la mano a su abogado a quien también le pago, agradeció su servicio y sin dirigirle la mirada a su ex mujer, sin sonreírle, sin siquiera notar su presencia como si no estuviera ahí empezó a caminar tranquilamente a su carro. La mujer se acercó a él cuando el detective prendía un cigarrillo y abría la puerta de su vehículo, ya fuese por la culpa o por el desinterés tan ferviente que mostraba su ahora ex marido después de insistirle tantas veces en que se quedará con él, ella no podía creer que en estos último meses nisiquiera le dedicará un hola, se sentía bien estar soltera pero a él, ese detective quien siempre sonreía a las dificultades verle así tan opaco, apagado o muerto le preocupo un poco.

- Greg espera… yo, mira sé que no fue fácil todo esto, podrás salir adelante porque eres tú, se que podrás hacerlo pero quiero que sepas que te deseo felicidad absoluta, sabes que esto es lo correcto y lo mejor para ambos - dijo ella tomándole de las manos con cariño pero este sorpresivamente las quitó, llevando una a su bolsillo y la otra al cigarrillo.

- Si, bueno al final me gustaría desearte lo mismo, pero no puedo desearte nada ni a ti ni a tu infinidad de amantes y si me disculpas, quiero estar tranquilo como estuve estos meses sin ti, adiós...-

Con esto último la mujer se quedó con los ojos bien abiertos e inundados de lágrimas. Lo último que escuchó Greg fueron las incesantes disculpas que su esposa le dirigía. Nunca olvidaría esa voz ronca repitiendo una y otra vez “lo siento”

HieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora