Segunda Oportunidad [ScarletWidow]

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El despertador sonaba una nueva mañana en la base actualizada de los vengadores después de la última batalla contra Thanos. Donde esta vez, el equipo de héroes terminó siendo vencedor, aunque con algunas bajas bastantes dolorosas.

Natasha Romanoff, alias Black Widow. Quien había dado su vida para poder conseguir la gema del alma. Su mejor amigo, Clint Barton aún se lamentaba de no haber podido salvar a Natasha. Habian pasado más de 3 meses desde aquel acontecimiento, pero el hombre seguía con pesadillas de aquel sitio.

Vision, quien luchó hasta el último momento por intentar resguardar la gema en su cabeza, pero que el sabía que tarde o temprano iba a terminar perdiendo.

Otra de las bajas fue Stephen Strange; también conocido como Doctor Strange. El paró a Tony antes de dar el chasquido, y decidió ocupar su lugar a pesar de que Tony discutiera con el. Aunque no hubiesen pasado mucho tiempo juntos, Tony le cogió un gran aprecio al mago, y él al igual que Clint, se lamentaban pensando en sus amigos.

Y por fin, después de 3 meses, se haría por fin el funeral de estos dos héroes, aunque más que funeral era una conmemoratoria. Héroes y agentes estaban de pie enfrente del lago cerca de la nueva sede de los vengadores mirando como la corona de flores de cada héroe se alejaba por la marea.

Nadie quiso dar palabras por lo buenos héroes que habían sido, pues sus acciones ya hacían mérito de sus hazañas. Solo se quedaron ahí, viendo cómo los recuerdos se iban.

Después de ese momento de nostalgia, las personas empezaron a irse, aunque no todos. Cierta bruja se quedó sentada en un banco mirando todavía el agua.

- No es fácil despedirse ¿eh? - Clint se sentaba al lado de la chica a la que quería como una hija.

- No me gustan las despedidas en general - Wanda seguía perdida en el movimiento de la marea. - ¿Crees que sabrán que ganamos?

- Lo saben, créeme - Clint abrazó por los hombros a la pelirroja. - ¿Volverás al cuartel?

- Creo que aún no estoy lista - Wanda miró a Clint por primera vez en la conversación - No creo poder estar ahí sin ellos, este tiempo ahí se sintió como un infierno, no puedo más.

- Es comprensible Wanda, eres la que mas sufría en silencio por ellos, entiendo si no quieres volver. Yo tampoco lo haré - Clint actuaba de padre.

La bruja miró al arquero buscando la respuesta de por qué tomó aquella decisión.

- No me mires así - Clint miró el lago - No quiero estar en ese cuartel sin Natasha y sin ti. Adoro a los chicos pero... No puedo sin mis chicas.

Wanda ladeó una sonrisa y se puso a pensar en los últimos años, en todo lo que había pasado. Pero sobretodo, en todo lo que había perdido.

- A Pietro le hubiera gustado esto... - dijo mirando a Clint.

- A Pietro le hubiera gustado todo - rió. - ¿Que harás si no te quedas en la sede?

- No lo se, recorrer el mundo buscando paz quizás, necesito un año sabático mínimo

- Vente conmigo a la granja - Clint papá volvía a la acción. - A Laura le encantaría, y a los chicos también, seguro. Conoces la granja, hay paz, lo que necesitas.

- Si Laura y los niños no tienen problema en ello... - Wanda dejó el suspense - Entonces supongo que acepto.

Clint abrazó a la bruja, se levantaron de aquel banco y caminaron en dirección a la base para coger las cosas de Wanda. Sería un año difícil. Pero sabía que lograrían salir adelante.