9

1.1K 98 56
                                    


Pov Nat

– ¡SOLO TENIAN UNA MISIÓN! ¡UNA! – gritó Stark.

El playboy había llamado después de recibir un aviso de Maggie informando de las últimas actualizaciones.

– No debí mandarla – hablaba a lo bajo refiriéndose a Wanda. La miré, estaba sentada en el ventanal mirando la poca lluvia que había caer. Tenía su cara sin expresión alguna, solo contemplaba aquello. Aunque a juzgar por su manera de morderse las uñas, estaba estresada.

– No fue su culpa Stark – la defendí.

– Pero, Maggie me dijo que el tio vio a Wanda con sus poderes. – Stark estaba despistado.

– Yo lo provoqué, fue mi culpa, sabía que la bruja se exponía y eso no me detuvo a pesar de todo. Fue mi culpa Tony, no suya.

– Miren, da igual de quien haya sido la culpa. Solo... – Stark suspiró – terminen su trabajo y vuelvan sanas y salvas.

Después de eso colgó. Intenté acercarme a Wanda sin que me note pero al estar a 4 metros se giró para verme, no dijo nada, supuse que era una invitación a sentarme enfrente de ella.

De verdad merecía una disculpa, se la debía de dar. No debí decirle eso.

– Perdón – Wanda no me miraba a los ojos – No quise decir todo lo que dije allí, fue impulso vengativo.

– Tu excusa de ser vengadora no sirve de perdón Natasha – Wanda me miró por un segundo pero volvió apartarla

–No ese tipo de vengativo. No pienso que hagas todo mal, de echo casi todo lo que haces lo haces bien, y es bueno. Salvo jugar al billar, se te da horrible. – La bruja sacó una pequeña sonrisa tras oír eso. – No me arrepiento de haber venido, me encanta pasar tiempo contigo desde que te volví a ver, por eso pedí tantos entrenamientos contigo.

– ¿Por qué lo hiciste Natasha? Y quiero la verdad, por favor.

– Ya sabes, mi impulso vengati...

– Natasha.

– Estaba celosa de Maggie – admití

¿Admití que estaba celosa? ¿Enserio lo hice? Pero, no entiendo, ¿por qué?

– ¿Por qué? – preguntó Wanda. Eso mismo me preguntó yo. Me quedé unos minutos pensando hasta que escuché un carraspeo de Wanda, la bruja quería saberlo.

– Porque... – Vamos Nat, piensa piensa – Estaba celosa de que me quitara a mi mejor y única amiga. – Muy bien improvisado, me aplaudo.

– Oh... estabas celosa de ¿perder mi amistad? –

– EH... si. Eres la única persona en el mundo que nunca me juzgó a pesar de que te conté mi pasado con lujos y detalles. Nunca me criticaste de ninguna forma y siempre quisiste ayudarme en todo lo que pudieses. Agradezco tenerte en mi vida. Y maldije cada segundo que el chasquido me había arrebatado de pasar tiempo contigo. De verdad te aprecio Wanda. Eres fuerte, demasiado. – tome la mano de Wanda entre las mías para poder darle caricias. No sé incomodó, y yo tampoco, no quitó su mano.

– Pero aún así no puedo controlarme... da igual cuan fuerte sea. Al contrario, mientras más fuerte sea, más daño haré. – Miré su cara, una lágrima rebelde resbaló por su mejilla.

– Claro que no Wanda. Se que puedes, necesitas tiempo, pero puedes. Lo controlarás, de verdad que lo harás, y yo estaré delante tuyo o al lado tuyo aplaudiendote. Confío en ti. – Wanda se abalanzó sobre mí. La abracé fuerte, ahora mismo Wanda se sentía desprotegida, yo misma había recibido ese muro que la "evitaba sentir cosas demasiado fuertes" y la dejé debilitada. Quería que vuelva a sentirse protegida. Como haces años hice que se vuelva a sentir.

Segunda Oportunidad [ScarletWidow]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora