Una Peripatética Más

Capitulo 4: ¿Qué te pasa?

Salí de casa mientras desayunaba, porque no me había dado tiempo. En la puerta del instituto me encontré a Oliver y fuimos a clase de Lengua, Eugèni nos enseñó un par de temas y nos mandó un montón de sintaxis, ya tenía la tarde llena.
-Oye Caria.
-Dime Pol.
-¿Te importaría venir a mi casa hoy para ayudarme con sintaxis? No entiendo nada.
-Claro sin problema. Me pasas la dirección y me paso sobre las cuatro y media.
-Perfecto.

Estaba ya en penúltima hora y todavía seguía buscando a Marc para hablar con él, necesito aclarar lo que pasó, solo fue que nos fuimos a besar la mejilla y nos chocamos o eso creo.

Ya era por la tarde y acababa de llegar a casa de Pol, me abrió Óscar su hermano y me dijo que pasara y esperara a Pol, que seguramente estaba en el trabajo. Dicho y hecho a los 5 minutos apareció Pol, que venía del trabajo y se sentó conmigo en la mesa del comedor para empezar con la sintaxis, después de un buen rato terminamos y me ofreció ir a merendar y dar una vuelta, a mí me pareció una buena idea así que salimos de su casa.
Fuimos hacia la plaza del barrio donde nos encontramos a Iván en una terraza, seguramente porque era el bar de su madre. Nos sentamos en un banco más adelante pensando que merendar.
-Dime, ¿tú que vas a querer?
-No mucho, no tengo tanta hambre.
-¿Segura? Antes me has dicho que solo has comido un bocata.
-Si si, no te preocupes, me tomaré un zumo y ya está.
-Pues ahora vengo. Espérame eh.
-Tranquilo, aquí estaré.
No quiero comer nada, odio comer en público y todo por los comentarios de mi madre, intento no hacerla caso pero no puedo evitarlo. Y si, hoy solo he comido un bocata y el café del desayuno pero ya llega un punto que me estresa comer aunque también está el contrapunto de que como me estrese arraso con todo. No tengo término medio.

-Gracias por acompañarme a casa Pol.
-De nada, no te iba a dejar sola cuando estábamos a una hora de tu casa. Una cosita te voy a comentar, ¿te ha pasado algo con Marc? He notado que te lleva ignorando todo el día.
-Auch. Eso dolió. Bueno ayer me pidió subir a mi casa para usar el baño y cuando nos despedimos los dos giramos la cara y nos besamos.
-Ufff menudo marrón, oye, ¿sientes algo por Marc?
No me dio tiempo a responder, Pol me había acorralado contra la pared y me besó. No me podía apartar hasta que lo conseguí.
-¿QUÉ COÑO HACES? No me gustas tío. No soy un trofeillo de tu colección.
-Caria, perdón no quería. Solo estoy celoso, Marc me dijo que le llamaste la atención y hoy he descubierto el porqué. No volverá a pasar.
-Gracias Pol y ahora si me disculpas me subo. Adiós.
-Adiós Caria.

Diosss Pol tío, vete a la mierda, que me gusta Marc. Ay dios Caria, por fin lo admites. Pues hay que buscarle y decírselo mañana mismo.